Está claro que los trabajadores de General Motors Korea tienen que tener bastante miedo sobre su futuro más inmediato. Con la venta de Opel al grupo francés PSA, la división asiática perderá una gran cantidad de su producción sin que de momento se haya anunciado un posible relevo.
Hace unos días PSA comentó que dejaría de importar vehículos Opel producidos en Corea del Sur dado que lo principal es llenar las plantas de Europa, ahora mismo funcionando lejos del pleno rendimiento. Esto implica que los Karl y muchas unidades de los Mokka dejarán de importarse.
PSA no ha comunicado en qué lugar producirán los Karl (si es que se mantiene a la venta) mientras que el Mokka X, también producido en España, debería aumentar su tirada en nuestro país para cubrir con las necesidades de un segmento en alza.
GM Korea también se encarga de la producción de los Vauxhall Viva (la versión británica del Karl) y de algunos modelos Holden. Los trabajadores creen que la salida de Opel de GM producirá un descenso en la fabricación de hasta 200.000 unidades al año.
La división de GM Korea no tiene muy claro el comportamiento de la casa madre, General Motors. De momento no han anunciado ningún producto que sirva para poder cubrir el hueco que dejarán los Opel y, de no hacerlo, terminarán cerrando dado que en el país hay cuatro plantas de producción que no se llenan con la demanda de los Chevrolet «locales» y de exportación asiática.
GM sigue buscando la máxima rentabilidad y por ello optaron por vender Opel, salir de ciertos mercados importantes como Indonesia, Rusia e India, y cesando la comercialización de la firma Chevrolet en Europa. A pesar de los cambios, GM no ha mejorado mucho su situación económica por lo que posiblemente el error esté más en casa que en el extranjero.