Aunque como norma general os solemos hablar de los últimos lanzamientos de ABT, hoy nos ha llamada la atención un producto que la marca lanzó bajo el nombre de Golf GTI wide body de 1982.
Por aquel entonces, ABT Sportsline creó el legendario e icónico GTI de cuerpo ancho. Casi 40 años después, la octava generación del Golf se ofrece de serie en una amplia gama de modelos deportivos, mucho más allá del Gran Turismo Injection normal. Junto al GTI (245 CV / 180 kW / 370 Nm) y el GTI Clubsport (300 CV / 221 kW / 400 Nm), el GTD (200 CV / 147 kW / 400 Nm) está disponible para los aficionados a los diésel -en mercados diferentes al español- y el Golf R (320 CV / 235 kW / 420 Nm) es el automóvil deportivo compacto definitivo.
La bestia más poderosa de este grupo ofrece de serie casi el doble del rendimiento que el que nos encontrábamos en el ABT Golf de los años 80 con turbocompresor (163 CV / 120 kW).
Aunque el listón se ha elevado considerablemente en las últimas cuatro décadas y muchos conductores todavía quieren más potencia seguro que muchos de vosotros se queda con lo clásico.
Como ya sabrás, el actual Golf GTI cuenta con 290 CV (213 kW) y entrega un par máximo de 410 Nm. El GTD entrega 440 Nm y 230 CV (169 kW).
Independientemente de la plataforma seleccionada, ABT Sportsline ofrece tres atractivos diseños de llantas para los actuales Golf GTI, GTD, GTI Clubsport y R que van de las 19 a las 20 pulgadas, nada que ver con las llantas de 13 pulgadas que montaba el Volkswagen Golf GTI wide body de 1982.