Los Steed y Wingle lograron hacer un buen trabajo en diversos mercados internacionales para conseguir que las ventas de Great Wall levantasen el vuelo. Con la división de todoterrenos Haval separada, la oferta de la marca «madre» se había quedado obsoleta con modelos interesantes pero no punteros.
Con la nueva generación del GWM Cannon UTE, Pao en otros países, la firma quiere reconquistar al público con un producto muy elaborado, atractivo, con mucho equipamiento y resolutivo en cualquier situación gracias al sistema de tracción total con reductora.
Estéticamente el nuevo Cannon es llamativo por su poderoso frontal aunque está claro que no rompe esquemas en lo relativo al diseño, algo que precisamente se ha buscado para evitar correr riesgos. En Great Wall saben que un diseño clásico no disgusta y puede encajar a una mayor parte de la población.
En términos de calidad de acabado, el nuevo Cannon ha ganado muchos enteros incluyendo materiales acolchados, detalles en símil aluminio e incluso tapizados en piel en los acabados más completos. La pantalla táctil para el sistema multimedia será de serie y de hasta 9 pulgadas.
Otros elementos disponibles son los faros LED, airbag central entre los asientos delanteros (novedad absoluta en el segmento), alerta y asistente de cambio de carril, lector de señales de tráfico, frenada automática en ciudad, control de crucero adaptativo, monitor presión neumáticos individual, detector de peatones y ciclistas, detector de objetos en ángulo muerto y en maniobras de marcha atrás, etc.
También podrán contar con acceso y arranque sin llave, sistema de visión cenital, climatizador automático de dos zonas, asientos eléctricos y calefactables, sensor de lluvia, toma USB en espejo interior para alimentar una cámara «dash-cam», cargador de móvil sin cables, instrumentación con pantalla de 7 pulgadas, selector de modos de conducción, etc.
La motorización estándar es un nuevo bloque diésel de dos litros con 163 CV de potencia en combinación con una caja automática de 8 velocidades desarrollada por ZF, y la tracción total inteligente con bloqueo del diferencial trasero. Con 400 Nm de par máximo no es el más prestaciones o enérgico pero mueve bien el conjunto según indica la marca.
Lo mejor del nuevo Great Wall Cannon está en su precio ya que arranca desde solo 33.990 dólares australianos, es decir, 20.990 € al cambio actual. Para encontrar algo parecido en marcas «de prestigio» habría que invertir más de 60.000 dólares australianos(36.900 €) de los Mitsubishi L200, Toyota Hilux o Ford Ranger equivalentes. Sin duda alguna una distancia que será complicado justificar, más sabiendo que el chino llega con siete años de garantía.