Resulta curioso analizar el origen etimológico de palabras e incluso el origen de algunas expresiones populares y aunque en Autonocion.com no somos una página dedicada a la lengua, nos ha hecho gracias a el origen de la conocida expresión «hacer la 13 14».
Seguramente, en alguna ocasión hayas empleado o escuchado expresiones como «me han hecho la 13-14» en referencia a que te han hecho una jugarreta, sin embargo, ¿te has preguntado alguna vez el motivo por el cual se emplea esta frase y cuál es su origen?
Aunque seguramente hayas escuchado una frase similar como «hacer la 3-14», has de saber que la frase correcta es «hacer la 13-14» y aunque pueda parecer que no tiene relación con el mundo del automóvil, hoy te vamos a explicar que está muy relacionado y esperamos que te guste.
A todos nos han hecho una «jugarreta», nos han «tomado el pelo» o «nos han engañado» en alguna ocasión, así que podemos decir que a todos nos han hecho de alguna forma, una 13-14.
Curiosamente, la relación de la frase «hacer la 13-14» con el mundo del automóvil se remonta a una jugarreta que hacían los experimentados mecánicos a los aprendices que llegaban a sus talleres. Al parecer, la «jugarreta» o «broma» que les hacían a muchos como bienvenida, no era más que mandar al aprendiz o al novato a por la llave fija 13-14.
Seguro que hasta aquí sigues sin entender absolutamente nada, pero si estás familiarizado con las herramientas de los talleres o las que puedes tener en casa y coges un juego de llaves fijas, te darás cuenta de que las llaves fijas se miden en mm y parten -en los juegos normales- de las combinaciones 6-7, 8-9, 10-11, 12-13, 14-15, 16-17, 18-19, 20-22, 21-23, 24-27, 25-28 y 30-32.
Como has podido observar, la llave fija 13-14 no se corresponde a ninguna llave y si quieres esas dimensiones necesitas coger la llave 12-13 y la 14-15 pero no hay ninguna 13-14, de ahí el embuste, la tomadura de pelo y como no, la expresión de hacer la 13-14. Si a esto le sumamos el desorden que podían tener antaño los talleres mecánicos en sus cajas de herramientas, las risas generalizadas en el taller, estaban aseguradas. Por cosas como estas los aprendices debían estar alerta y meter el turbo para aprenderse todas estas cosillas.
¿Sabías el origen?