Cuando salió el BMW M4 Coupé a la venta, los preparadores de medio mundo empezaron a emplearlo como lienzo en blanco para plasmar sus sueños más macabros. Imponentes kits de carrocería, preparaciones mecánicas bestiales y mucho más. Un tiempo después, la llegada del BMW M2 Coupé ha hecho que todos los preparadores centren su atención en el nuevo juguete bávaro, y todas las semanas nos encontramos con alguna llamativa preparación sobre la base de este modelo.
Y la verdad, tampoco es de extrañar, pues el BMW M2 representa a la perfección lo que en realidad BMW es. Su parecido dinámico a lo que viene siendo el BMW M3 E30 y con un motor de seis cilindros en línea turboalimentado que genera 370 CV, este deportivo compacto es el modelo perfecto para los que busquen una puesta a punto espectacular y un rendimiento muy elevado.
En este caso, Alpha N-Performance ha querido juntar lo mejor de los dos deportivos para obtener un resultado espectacular que, por otra parte, pronto podríamos ver en la calle de manera oficial. Hablamos del BMW M2 GTS, la imponente creación del especialista del mercado de accesorios que transfiere lo mejor del BMW M4 GTS a su «hermano pequeño».
Rematan el conjunto los detalles en negro brillante y las llantas de 20 pulgadas BMW M Competition extraídas directamente del BMW M4 GTS.
En el exterior, los componentes aerodinámicos adicionales son abundantes, todos ellos facilitados por el proveedor de elementos de fibra de carbono del preparador, Edison Composites. Así, encontramos un capó al más puro estilo M4 GTS que puede pedirse en fibra de carbono o kevlar -3.399 euros-, un nuevo splitter delantero -desde 1.299 euros-, un panel de techo en fibra de carbono o carcasas de los retrovisores en este mismo material. En la zaga, no faltan un difusor de nueva hornada y un alerón de proporciones bíblicas.
Bajo el capó, el especialista ha introducido diversas mejoras que elevan la potencia del propulsor de 3.0 litros Twin Turbo hasta los 450 caballos, pero, por desgracia, no veremos -por ahora- el poderoso bloque del BMW M4 GTS en sus entrañas. Junto a la sobredosis de potencia y para un mayor control del deportivo germano, no faltan los frenos carbocerámicos y la suspensión ajustable de tipo coilover con amortiguadores rebajados obra de Öhlins Road & Track.
Jagui Sánchez Morales
Asssssu!
Dani Dorobantu
Eso vuela loco!