La nueva división de lujo de Hyundai que vio la luz el pasado mes de noviembre tendrá que esperar para su desembarco en Europa según confirmación oficial por parte de la empresa. Se espera que puedan estar listos a finales de esta década, una vez tengan un gama amplia y más atractiva.
El problema principal de Genesis ahora mismo para no aterrizar en Europa es la ausencia de mecánicas diésel de alta potencia que puedan servir para plantar cara a las que sí ofertan otras firmas como Audi, BMW, Mercedes o Volvo. Tampoco la gama se puede decir que sea la mejor, con sólo dos berlinas presentadas.
Hyundai pretende conquistar al usuario europeo con la marca Genesis una vez tengan una familia de productos capaz de encajar con las necesidades del viejo continente y para eso es necesario tener al menos uno o dos SUVs con los que competir contra BMW X4 y X5, Mercedes GLC y GLE y Audi Q5 y Q7.
Por el momento Genesis irá llegando a otras regiones como América del Norte, Oriente Medio, China y por supuesto Corea del Sur, lugar en el que han tenido una excelente acogida provocando que los modelos altos de gama del trío alemán hayan visto caer su demanda.