Amanecía poco a poco en la Nave de Motores de Metro de Madrid, comenzaba a despertarse la capital en una mañana gélida y lluviosa de sábado mientras el parking de este peculiar lugar poco a poco se iba llenando de todo tipo de vehículos destinados a concursar en esta prueba tan especial, donde lo importante no será llegar el primero ni realizar el tiempo más rápido. Nosotros llegábamos con uno de los modelos que más miradas atraería dada su novedad en el mercado, el Kia Niro, un vehículo capaz y que nos sorprendería en cuanto a consumos.
Participantes, medios de comunicación, organizadores y profesionales de este tipo de competiciones empezaban a preparar su montura, colocar las pegatinas, chequear el estado correcto de vehículo, conocer la ruta que había sido desvelada esa misma mañana, así como rellenar el depósito con su posterior precintado para evitar cualquier alteración de los consumos reales de cada coche.
Tras un briefing a todos los participantes y echar un vistazo al roadbook -el libro de ruta en un rally- nos preparábamos para la salida en una fila india discreta y sin apenas ruidos de grandes motores. Aquí lo importante no es quemar rueda ni hacer el mejor tiempo, sino los consumos y la regularidad mantenida en cada tramo, lo cual también hay que decir, no es nada fácil de conseguir si no tenemos el entrenamiento suficiente en este tipo de competiciones tan específicas.
La primera etapa que tuvo lugar el sábado se inició tomando la carretera de Valencia y más tarde dirección hacia Guadalajara, recorriendo gran parte de La Alcarria. Atravesamos múltiples poblaciones como Campo Real, Torres de la Alameda, Escamilla o Fuentelencina para acabar haciendo un descanso para reponer fuerzas en Sacedón. El consumo del Niro varía entre los 5,4 y 5,6 l/100 km, una cifra nada despreciable dadas las continuas carreteras reviradas y cuestas que tenemos que atravesar para llegar hasta nuestra primera parada.
La jornada continúa con el mismo trayecto a la inversa hasta que llegamos de nuevo a la Nave de Motores en Madrid ya entrada la noche, hay que dejar el coche y volver a casa para coger fuerzas, aún queda una etapa y promete ser dura.
Se respira buen rollo y un ambiente de apasionados por el motor a la mañana siguiente, de nuevo toca madrugar y ponerse al mando de nuestro Kia Niro con menos de diez grados de temperatura en el exterior y muchas ganas de devorar kilómetros. Las condiciones meteorológicas no acompañaron en ningún momento, ambas etapas estuvieron acompañadas de lluvias e intensas nieblas que hicieron de esta rally una experiencia más radical.
Tras finalizar esta segunda etapa que recorrió diversos lugares como Colmenar de Oreja, Belmonte del Tajo o Morata de Tajuña tendrá lugar la entrega de trofeos a los más eficientes en nuestra base, la Nave de Motores. En la categoría EF el primero en dominar la tabla fue el Renault Twingo Tce 90 EDC, en la categoría de eléctricos (IIA) dominó el Mercedes Benz B250e del equipo Mercedes-Aquadis y finalmente en nuestra categoría de híbridos (VII y VIII) fue el Mercedes Benz C220 CDI BT también del equipo Aquadis el que encabezó la tabla de clasificación.
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Nota: Agradecemos la cesión de imágenes a nuestros compañeros Alberto Pérez Berrio y Daniel Vega.