Coincidiendo con su 50 aniversario, BMW M GmbH nos presentó en 2022 una edición especial del BMW M4 basada en sus exitosos modelos de altas prestaciones para el segmento premium de tamaño mediano. Según la marca, el BMW M4 CSL combina la pasión por la competición de la vieja escuela con la tecnología más innovadora, y este G-Power G4M CSL Bi-Turbo va un paso más allá.
De fábrica, el resultado de ese cóctel perfecto es una experiencia de rendimiento inimitable y limitado a sólo 1.000 unidades a nivel mundial. Su carácter está basado en dos características fundamentales: un aumento de potencia de 30 kW/40 CV respecto al BMW M4 Competition Coupé para pasar a tener 551 CV (405 kW) a 6.250 rpm; así como una reducción de peso de 100 kilogramos.
El diseño del motor de 3.0 litros derivado directamente de la competición va acompañado de un par motor de 650 Nm entre 2.750 y 5.950 rpm. Se transfiere al asfalto mediante una caja de cambios M Steptronic de ocho velocidades con Drivelogic. Esto le permite declarar un 0 a 100 km/h en solo 3,7 segundos y un 0 a 200 km/h en apenas 10,7 segundos.
Así es el brutal G-Power G4M CSL Bi-Turbo
Siguiendo los pasos del G-Power G3M CS Bi-Turbo, este M4 CSL luce un capó de fibra de carbono con prominentes entradas de aire, un divisor delantero a medida con grandes flics aerodinámicos y un alerón trasero fijo más marcado (aunque nada tiene que ver con el del G3M. En la carrocería podemos equipar en opción un juego de calcomanías con detalles en rojo.
Rematan el conjunto visual las nuevas llantas Hurricane RR y Hurricane RS de G-Power, que miden 20×9 en la parte delantera y 20×10,5 en la trasera. Se complementan con una suspensión ligeramente rebajada. También se han realizado algunos cambios en el interior. Estas pasan por nuevas alfombrillas, logotipos del especialista y un volante de fibra de carbono.
Pero la guinda del pastel del G-Power G4M CSL Bi-Turbo está bajo el capó. El bloque de seis cilindros biturbo y 3.0 litros de BMW, muy valorado, se puede adquirir con tres nuevos niveles de potencia. La más sencilla incluye una puesta a punto básica de alto rendimiento y un silenciador nuevo, lo que aumenta su potencia a 620 CV (456 kW) y 750 Nm de par motor.
Quienes busquen más potencia y aún más rendimiento pueden optar por una puesta a punto más agresiva del software del motor y un sistema de escape completo, lo que nos brinda unas cifras de 670 CV (493 kW) y 800 Nm de par. Este paquete también incluye tubos de escape más grandes. En la cúspide de la gama está el GP-720, con múltiples mejoras.
La opción más potente es el GP-720. Combina un ajuste de alto rendimiento con un nuevo escape y tubos deportivos con catalizadores de metal de 200 celdas y alto flujo. Todo ello da como resultado la friolera de 720 CV (529 kW) y 1.000 Nm de par máximo. En otras palabras, las mismas cifras del recién estrenado BMW M5 híbrido enchufable, pero con un peso muy inferior.