Mazda Australia acaba de desvelar el nuevo BT-50, un modelo al que ya empezaban a pesarle los años y que iba totalmente desacompasado con el resto de la gama del fabricante de automóviles. En esta nueva entrega, el Mazda BT-50 2021 aprovecha al máximo las bondades del conocido diseño Kodo, al tiempo que recibe una fuerte carga tecnológica.
La gran novedad es la plataforma Isuzu sobre la que se asienta. En el frontal, la parrilla cromada y los faros se asemejan con los de sus hermanos de gama, dando como resultado un conjunto más elegante. En la vista lateral y en la zaga, el BT-50 hereda algunos rasgos de diseño del CX-9, aunque es cierto que guarda ciertas similitudes con el Mitsubishi L200 de última generación.
Los cambios más significativos están en el interior, con un aumento notable de la calidad percibida y un mayor empaque. El interior del BT-50 parece bastante lujoso a primera vista gracias a los tapizados en cuero, un deportivo volante de tres radios y una gran pantalla de infoentretenimiento que incluye Apple CarPlay y Android Auto.
Bajo el capó también se percibe la influencia de Isuzu, y es que el nuevo Mazda BT-50 deja de lado al Ford Ranger para parecerse al D-Max. El anterior bloque de la firma del óvalo azul ha sido sustituido por un motor diésel de 3.0 litros que produce 190 CV (140 kW) de potencia y 450 Nm de par máximo. La tracción puede ser 4×2 o 4×4.
La potencia se envía a las ruedas a través de una transmisión manual o automática de seis velocidades.
A nivel técnico, el Mazda BT-50 2021 tiene una capacidad de remolque de 3.500 kilogramos y una capacidad de carga de más de 1.000 kilos. Además, recibe un completo elenco de sistemas de seguridad y asistencia a la conducción, como control de crucero adaptativo, frenado automático de emergencia, asistencia de mantenimiento de carril, alerta de tráfico cruzado trasero…