Durante la década de 1960, los vehículos de tracción total comenzaron a cobrar cierto renombre, por lo que Land Rover decidió crear un vehículo que aunara notables capacidades off road y gran confort. Nació así en 1970 el Range Rover, el cual cosechó un éxito rotundo gracias a su capacidad para combinar agilidad en carretera, refinamiento, comodidad y prestaciones fuera del asfalto.
Para celebrar los 50 años del lanzamiento del Range Rover Classic, la firma británica acaba de anunciar la producción de una edición especial limitada a 1.970 ejemplares a la que ha bautizado como Range Rover Fifty. Como se puede apreciar a simple vista, no son muchos los detalles que diferencian a este particular modelo de las versiones convencionales.
Partiendo de la base del Range Rover Autobiography, los clientes pueden optar por hasta siete colores exclusivos para la carrocería: los más convencionales Santorini Black, Aruba Silver, Carpathain Grey y Rosello Red; y un número «extremadamente limitado» en Bahama Gold, Davos White y Tuscan Blue. Para las llantas se puede optar por dos diseños en tamaño de 22 pulgadas.
Tanto en el exterior como en el interior hay diversas placas identificativas con el motivo ‘Fifty’. Por ahora los precios y la disponibilidad son una incógnita, pero el Range Rover Fifty se ofrecerá con las dos variantes de carrocería –normal y larga (LWB)- y en todas las motorizaciones disponibles, que son gasolina, diésel y el híbrido enchufable P400e.