El Gordon Murray T.50 por fin es una realidad. El superdeportivo nacido de la asociación entre Gordon Murray Automotive y el equipo de Fórmula 1 de Racing Point está centrado en el conductor y cuenta con la aerodinámica más avanzada y efectiva jamás vista en un automóvil de carretera.
Para su desarrollo no solo se ha utilizado el avanzado túnel de viento, sino que GMA se ha beneficiado de la información y experiencia de los ingenieros altamente experimentados de Racing Point. En contraste con las líneas limpias del cuerpo del T.50, quizás la característica más notable del exterior es la parte trasera.
La zaga está dominada por un ventilador de 400 mm que forma parte de un sistema único de gestión del flujo de aire. Es capaz de reducir la resistencia en un 12.5% y añade aproximadamente 50 CV (37 kW) a la potencia total del T.50. Adicionalmente, acorta las distancias de frenado y aumenta la carga aerodinámica hasta en un 100% en el modo de frenado.
En el conjunto del diseño destacan los faros LED inspirados en un Fórmula Uno, las puertas diédricas y la cubierta del motor que se abren hacia arriba, el techo de cristal, la toma de aire sobre el techo, la carrocería de fibra de carbono, las luces luces traseras 3D y llantas de aleación forjada de 19/20 pulgadas calzadas con gomas Michelin Pilot Sport 4 S.
Estas últimas están respaldadas en el eje delantero por un sistema de frenado de alto rendimiento que cuenta con pinzas de seis pistones, las cuales «muerden» unos discos carbocerámicos de 370 mm. En la parte posterior encontramos pinzas de cuatro pistones y discos de 340 mm de diámetro.
El T.50 presenta seis modos aerodinámicos diferentes –Auto, High Downforce, Streamline, Braking, Test y V-Max Boost– que optimizan el automóvil para diferentes escenarios. El más extremo, combina la tecnología slipstream con una potencia adicional procedente de un sistema de 48 voltios que aumenta la potencia hasta los 700 CV.
En el interior, cual monoplaza de F1, el Gordon Murray T.50 tiene un asiento central para el conductor que está flanqueado por un asiento de pasajero a cada lado. La consola central consta de un brazo ‘flotante’ a la derecha del asiento del conductor, donde se ubica una palanca de cambio de titanio y controles para el sistema de información y entretenimiento.
El T.50 cuenta con un sistema de audio de 10 altavoces y compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay.
Tras el volante de fibra de carbono se ubica un grupo de instrumentos montado en posición central, con un gran tacómetro flanqueado por dos pantallas digitales. A su alrededor podemos apreciar «interruptores rotativos de aluminio de grado aeroespacial«, al tiempo que los espejos retrovisores se sustituyen por cámaras y pantallas.
Las posibilidades de personalización del interior serán múltiples y cada cliente será invitado a «una sesión de ajuste» donde los ingenieros se asegurarán de que el asiento del conductor, el volante y los pedales sean «ergonómicamente perfectos e individualizados para cada cliente«.
Pero el plato fuerte es el corazoncito de la bestia, el Cosworth GMA V12, un motor de 3.9 litros que aspira a convertirse en el motor de carretera V12 de aspiración natural más veloz, de respuesta más rápida, con más potencia y el más ligero de todos los tiempos.
Una parte clave en el desarrollo fue mantener la cilindrada del V12 del T.50 lo más baja posible. La inspiración original para el motor surgió del V12 de 3.3 litros que impulsa al legendario Ferrari 250 GTO. Con el objetivo de una máxima aceleración, un elevado par y un peso muy contenido, el modelo se sitúa en solo 986 kg.
El motor V12 acelera hasta las 12.100 rpm.
El V12 del T.50 no solo promete la potencia que podemos encontrar en un modelo de muy alta gama, sino también ser manejable para la conducción diaria. La cifra de par máximo de 467 Nm se produce a 9.000 rpm, pero la clave para garantizar lo de «ser manejable en la conducción diaria», el 71% del par motor se produce a tan solo 2.500 rpm.
Al diseñar sus requisitos para el motor, Murray aprovechó su experiencia trabajando con el motor Honda RA121E V12 de 3.5 litros que impulsaba los McLaren MP4/6 de Fórmula Uno a principios de los noventa. Según Murray, este motor fue el pico máximo de los motores de Fórmula Uno V12 en términos de rendimiento, equilibrio y peso.
El tren motriz del T.50 también se inspira en el BMW S70/2 V12 desarrollado para el muy venerado McLaren F1 de Murray, que para muchos sigue siendo el motor de superdeportivo definitivo. El motor del T.50 entrega la potencia máxima de 663 CV (488 kW) a 11.500 rpm.
Para lograr el menor peso posible, el bloque en el T.50 está hecho de una aleación de aluminio de alta resistencia, el cigüeñal está hecho de acero y pesa solo 13 kilogramos, y las bielas y las válvulas están hechas de titanio, al igual que el embrague. Todo esto contribuye a reducir el peso hasta los 178 kg.
El motor de aspiración natural del T.50 también promete ser uno de los mejores motores de automóviles de carretera y uno de los que mejor sonido tienen. El T.50 presenta el Direct Path Induction Sound, un sistema pionero en el McLaren F1 y refinado en el T.50 para canalizar el sonido del estridente V12 hacia el habitáculo.
Creado por los expertos británicos en transmisiones Xtrac, la caja de cambios manual de seis velocidades con cambios cortos montada en el T.50 es asombrosamente liviana. Con un peso de solo 80.5 kg, la unidad hecha a medida fue creada para cumplir con el objetivo de ofrecer «el mejor cambio de marchas del mundo», para el máximo disfrute del conductor.
La caja de cambios manual de seis velocidades con «patrón H» es una pieza de diseño excepcional. Al ser totalmente hecha a medida, fue posible optimizar cada componente así como su peso. Sorprendentemente, el equipo de Xtrac creó una carcasa de aluminio con solo 2,4 mm de espesor súper fuerte, pero extremadamente ligera.
A nivel técnico encontramos un monocasco de fibra de carbono, una suspensión de doble horquilla, un sistema de dirección de cremallera y piñón para «conducir con pureza», un diferencial de deslizamiento limitado y diversas ayudas a la conducción que pueden desactivarse a voluntad del conductor.
El T.50 se lanzará en enero de 2022 y costará 2,62 millones de euros antes de impuestos. La producción se limitará a 100 unidades y habrá una red de servicios post-venta establecida en Abu Dhabi, Japón, Estados Unidos y el Reino Unido. También habrá un llamado «técnico de vuelo» para prestar servicio a los vehículos en estos y otros mercados.