A los especialistas del mercado de accesorios del automóvil les ha gustado la quinta generación del Toyota Supra. El modelo nipón se ha puesto de moda y no es de extrañar, porque hablamos de un automóvil deportivo en su forma más pura, sin compromisos que disminuyan el placer de la experiencia de conducción, aunque también con una esencia más alemana que japonesa.
Como ya sabrás, el Toyota GR Supra equipa un propulsor de 3.0 litros y seis cilindros en línea con tecnología TwinPower Turbo de BMW para consiguió una potencia de 340 CV y un par máximo de 500 Nm. Sin embargo, son ya muchos los especialistas del mercado de accesorios del automóvil que nos han demostrado que este bloque tiene mucho más potencial.
Hace unos meses os hablé del trabajo de Stephan Papadakis, un especialista que estaba desarrollando un motor de nada menos que 1.033 CV para el Toyota Supra A90. Si hay algo por lo que se ha criticado al Toyota Supra es por compartir un sinfín de elementos con BMW, especialmente en el interior y en el vano motor, pero este último trabajo de ingeniería lo hace sencillamente único.
La mecánica B58 de BMW es indudablemente un gran motor, pero la gran mayoría de los fanáticos del modelo son partidarios de la introducción de un motor jáponés en las entrañas del deportivo. Y no un motor cualquiera, sino uno que pueda llegar a ser tan mítico como el 2JZ. Recordemos que este desarrollaba 280 CV en Japón y hasta 330 CV de potencia en los Estados Unidos y Europa.
Era considerado como uno de los mejores motores de alto rendimiento jamás producidos por las ingentes cantidades de potencia adicionales que se podían extraer del mismo con leves modificaciones. Para cerrar bocas, Papadakis ha conseguido hacer algo parecido con la nueva mecánica de origen alemán, aunque es cierto que sacar elevadas dosis de potencia del B58 no ha sido tan sencillo…
El objetivo era extraer nada menos que 1.033 CV de potencia del motor y, para ello, el especialista ha desarrollado múltiples piezas de nueva factura para la mecánica, la gran mayoría de ellas fabricadas a medida. Lo más destacado es el colector de admisión, diseñado por Mountune e impreso en 3D, en aluminio. Esta pieza permitió a Papadakis intercambiar el intercooler y agregar un nuevo sistema de inyección de combustible.
También podemos encontrar pistones y varillas forjados y un colector de escape fabricado a medida para acomodar un turbo BorgWarner, mucho más grande que la unidad estándar. Junto con la construcción del motor, en los vídeos podéis ver una explicación de las diversas piezas que se han empleado y todo el trabajo que se esconde detrás de las mismas.
Por otra parte, en los vídeos podemos ver todos los componentes en funcionamiento. Papadakis ya ha iniciado las pruebas de esta mecánica de 1.033 CV en el banco de potencia y, para ello, ha tenido que desarrollar incluso un arnés de cableado personalizado para que el motor pueda funcionar en una ECU independiente, sin el resto del automóvil.
Como podréis ver en el vídeo, alcanzar la cifra de 1.033 CV en el banco de potencia no fue tarea sencilla. El motor comienza a gotear, lo que llevó a Papadakis a reemplazar algunas piezas; la unidad de aire comenzó a perder líquido; uno de los inyectores se derritió y comenzaron a salir chispas… Pero tras solucionar todos estos inconvenientes, la bestia vio la luz.
Finalmente, Papadakis logró el objetivo propuesto y podemos ver a la poderosa mecánica desarrollando 1.033 CV de potencia y 1.231 Nm de par máximo. Si te preguntabas si el nuevo motor del Supra podría estar a la altura de las capacidades icónicas del 2JZ, aquí tienes la respuesta, y ahora incluso sabemos dónde acabará este motor.
El receptor de este poderoso bloque será nada menos que un Supra de drift para el piloto profesional Fredric Aasbø. Estas representaciones de Jon Sibal muestran el aspecto que tendrá el automóvil una vez esté completo, y desde luego tiene muy buena pinta tras las múltiples modificaciones.
Lo primero que te llamará la atención es su kit de carrocería ensanchado, el cual luce una llamativa librea amarilla y negra de Rockstar Energy Drink. Los enormes pasos de rueda acogen neumáticos específicos para driftear, proporcionando al conductor un ángulo de dirección suficiente para mantener el derrape perfecto.