La división Coachbuild de Rolls-Royce es conocida por sus creaciones únicas y lo cierto es que este nuevo proyecto no te va a dejar indiferente. Presentado durante la Semana del automóvil de Monterey, el exclusivo Rolls-Royce Droptail está limitado a solo cuatro unidades en todo el mundo. Tras conocer La Rose Noire y el Amethyst, este Rolls-Royce Droptail Arcadia es el tercero de ellos.
Considerado como «un espacio sereno que ofrece un lugar para relajarse después de un día de negocios» por su propietario, su denominación Arcadia hace referencia en la mitología griega a una región en el Peloponeso central. Toma su nombre del personaje de Arcas y fue el hogar del dios Pan, celebrándose como un desierto virgen y armonioso, un lugar que representa el cielo en la tierra.
El Rolls-Royce Droptail Arcadia
La carrocería del Rolls-Royce Arcadia es todo un espectáculo, y no solo por su elegante silueta, sino también por su color blanco exclusivo. La pintura presenta partículas de aluminio y vidrio que hacen que la carrocería brille con la luz. A diferencia de los encargos anteriores, este comprador optó por pintar los elementos de fibra de carbono en un tono plateado personalizado.
A ello hemos de sumarle una tapa del maletero compuesta por un panel curvo revestido de madera, lo que hace a este ejemplar aún más especial. Para el interior se apuesta por los tapizados en blanco, con un color tostado hecho a medida en contraste para los laterales de los asientos y los reposacabezas. Para las molduras, encontramos madera de primera calidad.
En total, el fabricante de automóviles británico dedicó la friolera de 8.000 horas a elaborar las distintas piezas de madera. Pero eso no es nada comparado con los más de dos años que ha llevado desarrollar el reloj que luce en el salpicadero. Una auténtica joya cuyo montaje ha requerido ni más ni menos que cinco meses adicionales de trabajo.
La cara mecanizada tiene 119 facetas, mientras que el logotipo de la doble R de la marca está mecanizado en acero inoxidable. Los marcadores de hora pintados a mano requieren una cámara de aumento para que un técnico aplique el color negro. El destino final del Arcadia es Singapur, donde deleitará a los ciudadanos con su V12 de 6.6 litros biturbo por allí por donde pase.