Siguiendo los pasos del renovado Tucson, el KIA Sportage 2025 acaba de lanzarse en su mercado natal con una ligera actualización de mitad de ciclo comercial. Como no podía ser de otra manera, este restyling hereda el nuevo leguaje de diseño del fabricante de automóviles visto en sus hermanos de gama. Tampoco faltan sutiles cambios en el interior y en los motores.
La diferencia más notable está en el frontal, donde el nuevo Sportage recibe unos faros rediseñados que ya hemos visto en otros modelos como el KIA Sorento y el KIA EV9. Por lo tanto, las luces diurnas LED con forma de bumerán nos dicen adiós. La parrilla también es nueva y su patrón varía según el nivel de equipamiento. Lo mismo ocurre con el remozado paragolpes delantero.
El modelo llegará el próximo año a otros mercados como el español.
Pasando a la zaga, encontramos unos faros traseros con el mismo diseño general que en el modelo actual, pero presentan nuevos gráficos en su interior. Más sutiles todavía son los cambios en el paragolpes posterior. Rematan el conjunto nuevos diseño de llantas de aleación, disponibles en tamaños de hasta 19 pulgadas; así como los nuevos colores exteriores Wolf Grey y Heritage Blue.
Cambios bajo la piel del KIA Sportage 2025
El interior luce unos cambios más destacables, con un nuevo sistema de infoentretenimiento curvo de 12,3 pulgadas y un cuadro de instrumentos digital del mismo tamaño como protagonistas. Otras novedades pasan por una iluminación ambiental y unas salidas de aire remozadas, nuevos materiales, un volante rediseñado y nuevos ambientes interiores.
Por suerte para todos, se mantienen los botones físicos esenciales. KIA también ofrece un nuevo Head-Up Display, junto con un sistema de autenticación de huellas dactilares y una cámara montada en el volante que monitoriza al conductor para ver si está cansado y prestando atención a la carretera. Como en el Tucson tampoco falta el modo Baby & Toddler.
Cuando se activa, el coche suaviza automáticamente la aceleración para hacerla más progresiva. En cuanto a la gama mecánica, esta se mantiene intacta, con ligeros cambios. Si sigue los pasos del Tucson, veremos un aumento de potencia el en 1.6 TGDi hasta los 160 CV, pero se rebajará la potencia del HEV y el PHEV. La caja automática es ahora de ocho relaciones.
A nivel técnico, las novedades pasan por unos amortiguadores más sofisticados en el eje delantero y material absorbente adicional para mitigar el ruido en los pilares B y los paneles de las puertas. Dentro de poco conoceremos los detalles concretos para Europa y, más concretamente, para nuestro mercado.