El BMW M4 CSL no podía quedarse sin su hermano de cinco puertas en la gama bávara. Para aquellos a los que la carrocería coupé del M4 no termina de convencerles, el año pasado el grupo alemán les deleitó con una auténtica bestia en formato sedán, el BMW M3 CS. Pierde la ‘L’ de ‘light’, pero no te confundas, no va a decepcionarte en términos de peso y potencia… ¿O sí?
Ya sabéis que en el mundo hay mucho inconformista suelto. Precisamente por esa razón, el conocido especialistas del mercado de accesorios del automóvil dÄHLer acaba de sorprendernos con una interesante puesta a punto para el M3 CS. La compañía suiza ha retocado ligeramente la estética del sedán, al tiempo que ha añadido 80 CV y 90 Nm de par a la poderosa mecánica.
Recordemos que el concepto de propulsión del BMW M3 CS recurre al motor de seis cilindros en línea y 3.0 litros de los M3 y M4. Eroga 550 CV (405 kW) entre 6.250 y 7.200 rpm; así como un par de 650 Nm entre 2.750 rpm y 5.950 rpm. Son 40 CV (30 kW) más que el M3 Competition xDrive. Se asocia a la caja de cambios M Steptronic de ocho velocidades.
A diferencia del BMW M4 CSL, el M3 CS cuenta con el brillante sistema inteligente de tracción total M xDrive. Todos los elementos se combinan para producir un tiempo de 0 a 100 km/h de 3,4 segundos y unas dotes de conducción supremas. En esencia, la fórmula más potencia/menos peso confiere al nuevo BMW M3 CS unas prestaciones convincentes y un aura exclusiva.
El BMW M3 CS de dÄHLer
Los cambios del preparador en el M3 CS comienzan con un nuevo conjunto de suspensiones que rebajan la altura del modelo en 24 mm para la parte frontal y 30 mm para la zaga. Si no es suficiente para ti, también ofrece un conjunto de amortiguadores roscados que permiten ajustar la altura, así como realizar cambios en la compresión y el rebote de la suspensión.
A ello se suma un juego personalizado de llantas forjadas de 21 pulgadas, las cuales pueden complementarse con espaciadores para las ruedas. Adicionalmente, dÄHLer ofrece algunos complementos menores para la carrocería, y ojo, porque todas estas mejoras son compatibles con los BMW M3 y M4 en sus diferentes versiones, así como en el recién estrenado BMW M4 CS.
El plato fuerte llega bajo el capó, donde un simple ajuste de software con la Etapa 1 eleva las cifras hasta los 630 CV (463 kW) y 740 Nm de par máximo. Pronto veremos una Etapa 2 todavía más salvaje, pero hasta entonces podemos disfrutar de la toma de aire de fibra de carbono y un sistema de escape de acero inoxidable, el cual reemplaza al sistema de titanio estándar.