Hay muchas razones para amar el nuevo Mercedes-AMG SL 63. Bajo la denominación R232, sin duda alguna ha cambiado con respecto a su predecesor. Asentado sobre una nueva plataforma, la nueva generación de este roadster llega llena de tecnología procedente de la Clase S, pero con un formato clásico y un desarrollo desde cero. Y este BRABUS 750 Bodo Buschmann Edition es aún más brutal.
Toma como base el Mercedes-AMG SL 63 4MATIC. Su motor AMG V8 biturbo de 4.0 litros desarrolla una potencia de 430 kW (585 CV). Pone a disposición del conductor un par máximo de 800 Nm en una amplia gama de revoluciones, de 2.500 a 4.500 rpm. La aceleración de 0 a 100 km/h no dura más de 3,6 segundos. La velocidad máxima asciende a 315 km/h.
Una vez más, los chicos del especialista han logrado obtener una cifra todavía más jugosa del ocho cilindros. Gracias a la actualización de rendimiento PowerXtra B40S-750 y turbos de 52 milímetros, el deportivo desarrolla ahora 750 CV (552 kW) de potencia y 900 Nm de par. Con las mejoras, acelera de 0 a 100 km/h en solo 3,3 segundos, acelerando incesante hasta los 315 km/h.
Un escape de acero inoxidable con cuatro tubos de escape de carbono/titanio y múltiples modos de sonido pone la guinda del pastel a las mejoras mecánicas. El BRABUS 750 Bodo Buschmann Edition está limitado a solo 25 unidades. Cada uno cuesta 336.500 euros y rinden homenaje al fundador de la compañía, Bodo Buschmann.
Mejoras estéticas para el BRABUS 750 Bodo Buschmann Edition
Junto a las mejoras mecánicas, el SL firmado por BRABUS recibe diversas chucherías en su exterior. La carrocería se ha teñido en negro con elementos de fibra de carbono. Vemos una fascia delantera revisada con tomas de aire más grandes y un divisor frontal. También se han instalado un alerón en el borde del maletero y un difusor trasero.
No menos llamativas son las llantas de aleación de 21 pulgadas en el eje delantero y 22 pulgadas en el trasero. Por último, la empresa alemana ha aplicado su tratamiento Masterpiece al interior. Esto incluye cuero negro acolchado y en relieve con numerosos detalles de fibra de carbono. La firma de Bodo Buschmann aparece en la insignia que adorna la consola central.