El Ferrari 812 Superfast es un deportivo de élite que cuenta con infinitas innovaciones y un significado especial, ya que la serie 12 cilindros fue aquella con la que oficialmente echó a andar la historia del Cavallino Rampante allá por el año 1947, cumpliéndose ahora nada menos que 71 años. Fue presentado hace poco más de un año.
Bajo el capó, Ferrari continúa en busca de la perfección y equipa poderoso motor V12 atmosférico de 6.5 litros que entrega la friolera de 800 CV (588 kW) a 8.500 rpm, lo que le permite marcar un nuevo punto de referencia entre los vehículos deportivos con motor central delantero y acercarse peligrosamente al mismísimo LaFerrari en términos de rendimiento.
Pocos son los preparadores que se han atrevido con la berlinetta italiana, pero de entre ellos destaca ahora Mansory con su nuevo paquete estético para hacer algo más radical el modelo. Curiosamente, esta vez el especialista ha optado por la discreción, sin excesos, pero con ciertas chucherías de fibra de carbono que ensalzan la figura de este semental.
Estéticamente, el 812 Softkit incluye un nuevo alerón frontal, compuesto de dos partes. A él se une un divisor frontal que «abraza» la rejilla, nuevas entradas de aire y aletas verticales. También hay faldones laterales de nueva factura y, en la zaga, es apreciable un paragolpes extendido, también dividido en dos partes, que alberga las salidas de escape dobles.
Entre ellos hay un nuevo difusor trasero con luz de freno LED integrada al más puro estilo de la Fórmula 1. Todas las piezas están hechas de fibra de carbono visible en acabado brillante o mate y rematan el conjunto unas impresionantes llantas en tamaños de 21 y 22 pulgadas y acabado negro.
No hay mención alguna al apartado mecánico, pero en su proyecto Stallone Mansory ofrece un nuevo sistema de escape deportivo y diversas modificaciones en la centralita para elevar la cifra de potencia del bloque V12 hasta unos sutiles 830 CV (610 kW) y 740 Nm de par que rebajan los 2,9 segundos en el 0 a 100 km/h originales y los 340 km/h.