El Salón del Automóvil de Los Ángeles fue el escenario elegido por la compañía nipona para darnos a conocer la nueva generación del Mazda3, pero ayer la marca nos sorprendió en un particular evento mostrándonos al natural las dos versiones que conocemos hasta la fecha, el sedán y el hatchback, las cuales se distinguen por algunos detalles específicos como, por ejemplo, el acabado de la calandra.
El modelo de cinco puertas representa la deportividad, al tiempo que el sedán de cuatro puertas le hace un guiño a la elegancia. En ambos casos, el nuevo Mazda3 2019 supone el inicio de una nueva era para la marca, con una notoria evolución del diseño KODO que, indudablemente, cautivará a gran parte de los usuarios.
A nivel estético, se puede apreciar un frontal cargado de personalidad en el que no falta la iluminación LED. Las fluidas líneas continúan por la carrocería hacia una dinámica caída del pilar C, rematado con un inclinado portón, una afilada ventana trasera y unas delgadas ópticas LED posteriores de poderoso efecto 3D.
Para ser francos, hay que señalar que las fotos oficiales que vimos en un primer momento no le hacían justicia. En vivo, hablamos de un coche de proporciones equilibradas y notable atractivo, especialmente en la zaga. De igual forma, el interior ha sufrido una gran evolución y el incremento de calidad es palpable desde el primer vistazo.
Esencialmente, en el interior cambia todo, con un habitáculo minimalista despojado de todos aquellos controles que resulten innecesarios. En el horizontal salpicadero, los botones han sido sustituidos en su mayoría por una pantalla flotante de 8.8 pulgadas, acompañada también de una interesante instrumentación digital y controles táctiles en la consola central.
A nivel de materiales, me sorprendió la elevada cantidad de superficies blandas que se han incorporado, recubriendo prácticamente todos los componentes de las partes más altas, incluida la parte superior del salpicadero. Lo que no me gustó tanto es el abuso por parte de Mazda del tedioso Piano Black, muy sucio y sensible a las rayaduras, algo que, por otra parte, es exactamente lo mismo que hacen todos los fabricantes.
Al hablar de los ajustes, también podemos hablar de acertada evolución, pues en su conjunto parece mucho más coche, digno de codearse con los mejores del segmento. Se nota que en Mazda no han escatimado a la hora de hacer un producto sólido y tan agradable a la vista como al tacto, y desde luego no es para menos teniendo en cuenta que tendrá que rivalizar con los nuevos Volkswagen Golf, SEAT León y Škoda Scala.
En términos de espacio, el nuevo Mazda3 también ha crecido en cotas para los pasajeros. Atrás, dos personas de 1,80 metros podrían viajar cómodas sin que la altura o el espacio para las piernas sea un problema. Respecto al maletero, no hay datos oficiales y sólo pudimos ver el del sedán, pero todo apunta a que será muy similar al del modelo actual.
Por último, recordemos que el nuevo Mazda3 2019 es el modelo en el que debutará, entre otras, la tecnología de encendido por compresión a la que la marca ha llamado SKYACTIV-X. Este método de combustión innovador denominado Sparkledled Compression Ignition (SPCCI) se convertirá en el primer motor de gasolina comercial del mundo en usar ignición por compresión.
En estos enlaces podéis encontrar todos los detalles de motorizaciones y precios tanto de la versión de cinco puertas como del sedán. Igualmente, hace algún tiempo os preparé una comparación visual entre esta nueva generación y su predecesor, para aquellos que tengan un poco más de curiosidad en saber cuánto ha cambiado el nuevo Mazda3.