El lavado de cara del BMW Serie 2 Gran Coupé sigue la misma hoja de ruta que el BMW Serie 1 de nueva generación. Se trata de un modelo que representa la combinación perfecta de diseño elegante y tecnología, ofreciendo una experiencia de conducción deportiva sin comprometer la comodidad. Todo ello acompañado de una oferta mecánica que contempla opciones gasolina y diésel.
Hoy arranca la producción del nuevo sedán de la firma bávara y lo hace en la planta alemana de Leipzig. Allí se fabricaba también la primera generación desde el 1 de noviembre de 2019. Desde entonces, se han fabricado exactamente 220.795 de estos coches en la planta de Sajonia. El lanzamiento al mercado del BMW Serie 2 Gran Coupé está previsto para marzo de 2025.
Desde 2018, la planta del Grupo en Leipzig se ha sometido a mejoras sistemáticas. Ahora puede producir hasta 350.000 unidades al año, 100.000 más que antes. Actualmente fabrica cuatro modelos con tres tipos de propulsión diferentes de dos marcas distintas, todos en la misma línea de producción. Desde noviembre de 2023, la producción se ha visto impulsada por el MINI Countryman.
Su producción aumentará a lo largo de este año a 500 unidades diarias, además de los aproximadamente 800 vehículos BMW. El aumento de los volúmenes de producción asegura los puestos de trabajo existentes y crea otros nuevos. Sólo en la producción de vehículos se incorporarán 900 personas más; a finales de 2024, la planta de Leipzig dará empleo a unas 7.000 personas.
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La oferta mecánica del BMW Serie 2 Gran Coupé 2025
El lanzamiento al mercado tendrá lugar con tres variantes. La oferta arranca con avanzados motores de gasolina y diésel de tres y cuatro cilindros, respectivamente. Desarrollan 170 CV (125 kW) en el nuevo BMW 220 GC; 163 CV (120 kW) en el nuevo BMW 220d GC; y 150 CV (110 kW) en el nuevo BMW 218d GC. Los BMW 220 y BMW 220d cuentan con tecnología mild hybrid 48 voltios.
Tienen, por lo tanto, el distintivo ambiental ECO de la DGT. Todos los motores combinados con cambio Steptronic de 7 velocidades con doble embrague de serie. Además, BMW nos habla de una mayor rigidez de la estructura de la carrocería y de la conexión del chasis. El tren de rodaje de serie cuenta con cinemática optimizada y barras estabilizadoras de alta pretensión.
Por ahora no habrá PHEV ni EV.
El tope de gama es el BMW M235 xDrive GC, que equipa un nuevo motor de gasolina de cuatro cilindros y 2.0 litros con 300 CV (221 kW) y 400 Nm de par. Llega en combinación con la Steptronic de 7 velocidades con doble embrague y el sistema de tracción integral xDrive. Este asegura una mayor estabilidad y control, especialmente en situaciones de conducción deportiva.
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