Puede que te suene a broma eso de que un vehículo eléctrico está siendo llamado a revisión a causa de una fuga de combustible, pero lo cierto es que este caso es real como la vida misma. Hablamos del BMW i3 que, como todos sabemos, se trata de un modelo 100% eléctrico, pero recordemos que la firma bávara ofrece adicionalmente la posibilidad de incorporarle un pequeño motor de combustión interna para extender su autonomía total, convirtiéndolo así en una especie de híbrido enchufable.
En los Estados Unidos, teniendo en cuenta el reducido precio de la gasolina, la mayoría de clientes optaron por adquirir esta opción con sus i3, pero lo que no se imaginaban es que tendrían que llevar sus vehículos al taller por una posible fuga de combustible.
De acuerdo con la información facilitada por la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), el sistema que ventila los vapores de combustible del depósito en los BMW i3 REX -Range EXtender- podría entrar en contacto con el cable positivo de la batería y, con ello, causar una fuga de combustible que acabaría en un trágico incendio. Por suerte no hay ningún incidente registrado hasta la fecha, pero el fabricante germano está llamando a revisión a todas las unidades.
Si hacemos los cálculos, en los Estados Unidos se han vendido hasta finales de enero 25.123 unidades del BMW i3, de los cuales 19.130 coches equipaban el Range Extender, lo que significa que la orden de retiro afecta a más de tres cuartas partes de los clientes del modelo eléctrico.
Juan Rodríguez Martínez
Jordi Rielo López igual que los sistemas start-stop, quieren copiarse para reducir gastos y lo hacen como el culo.