El Jaguar C-Type es uno de esos bólidos de los años 50 que llevan a sus espaldas una larga historia en el mundo de las carreras, y es que no soló consiguió ganar las 24 Horas de Le Mans dos veces sino que además lo hizo de una forma única. Pero esta unidad en especial tiene un plus de historia, ya que fue el primero en ganar en los Estados Unidos, identificado con el número de chasis XKC 007. Por lo tanto podemos saber que fue la séptima unidad de un total de 53 vehículos que se construyeron y que destacaban entre otros aspectos por su inmejorable aerodinámica como coche de carreras.
Su estética incluso hoy es arrolladora y atractiva, derrochando elegancia y deportividad a partes iguales con esa mirada tan característica. Aguarda una historia peculiar y es que fue conducido por el piloto americano Phil Hill desde California hasta Wisconsin para participar en una carrera de 200 millas denominada «Elkhart Lake Road Race«. Allí este piloto nacido en Florida quedaría cuarto después de haber ganado la Copa Sheldon. Pero no contento con ello Hill condujo el XKC 007 de regreso a Los Angeles, y años más tarde un coleccionista de Jaguar lo compraría.
Por aquella época el D-Type era el vehículo favorito de la marca en Le Mans, por lo que este coleccionista llamado Robert Lane decidió actualizar el motor en línea de seis cilindros con la culata del D-Type y unos carburadores Weber 45 DC03. Además entre sus proezas destaca que en Bonneville Salt Flats consiguió alcanzar una velocidad de 252 kilómetros por hora, una cifra que para la época era todo un logro, incluso entre los pilotos de carreras.
Hoy este coche tan especial pertenece a la casa de subastas RM Sotheby’s, y junto con un Ferrari 250 GT California será subastado en Nueva York por un precio que puede variar entre los 4.660.000 y 6.000.000 euros. La misma compañía lo ha definido como: «un ejemplo notablemente original y puro de una leyenda de Coventry«. Dado que se encuentra en un perfecto estado junto con la larga historia que añade a sus espaldas esperamos que los pujadores se vuelvan locos por quedarse con este C-Type en su garaje.