Ya se sabe que los vehículos con motor diésel en Estados Unidos no tienen éxito salvo en aquellos segmentos en los que sus propietarios hacen muchos kilómetros, como son los comerciales ligeros y camiones. A pesar de esto, en Jeep quieren ofrecer una gama variada con diversos combustibles, y el diésel forma parte de los planes.
En estos días arranca la comercialización en Estados Unidos del nuevo Jeep Wrangler EcoDiesel, un producto muy bien pensado y estudiado con el que quieren recuperar parte de la confianza perdida por parte de los consumidores tras el escándalo del «dieselgate».
Si bien no es la primera vez que la firma ofrece un motor con este combustible – los Grand Cherokee CRD estuvieron a la venta durante un tiempo-, sí es la ocasión en la que más en serio se han tomado el lanzamiento, adaptando un bloque específico para este fin.
En lugar de usar los motores ya conocidos en Europa, el Wrangler para Estados Unidos se podrá adquirir con un nuevo 3.0 EcoDiesel que desarrolla 260 caballos de potencia y se combina con una transmisión automática con ocho velocidades. En Europa el 2.2 CRD desarrolla 200 CV y posee una caja de cambios similar.
Más allá de los inferiores consumos respecto a los gasolina, la nueva alternativa no termina de encajar en este país debido a que no mejora la capacidad de arrastre y posee un precio de venta muy superior que alarga en exceso su amortización con el uso (son 6.000 dólares más que el equivalente en gasolina requerirán un uso de unos 19.000-20.000 km al año durante 20 años).
Según ha comunicado Jeep, el nuevo Wrangler 3.0 EcoDiesel está disponible en Estados Unidos desde 39.290 dólares, unos 35.657 € al cambio actual.