Por suerte o por desgracia, no son muchos los deportivos de altos vuelos que mantienen en sus entrañas una mecánica de aspiración natural con altas dosis de potencia. Los motores turboalimentados están muy bien y los hay muy buenos hoy en día, pero un propulsor de aspiración natural siempre te deja un regustillo agradable tras exprimirlo al máximo al volante de una joya de cuatro ruedas.
Bueno, en este caso difícilmente llegarás a poder exprimir al máximo algunos de los modelos del listado, pues cuentan con más de 600 CV de potencia y un precio desorbitado, pero dicen que la intención es lo que cuenta.
Si en su día os hablé de aquellos deportivos de ensueño que tomaron prestados sus motores de modelos generalistas y de los que fueron originalmente diseñados para arrasar en el circuito, hoy es el turno de los deportivos más potentes con un motor atmosférico que puedes comprar hoy en día, aunque como ya sabréis algunos de ellos pasarán a mejor vida con su relevo generacional debido a la estricta normativa de emisiones.
Digamos que un bloque atmosférico o de aspiración natural es la manera tradicional y purista de hacer motores para deportivos. Es más, si eres fanático de los modelos clásicos seguramente recordarás algunos deportivos con propulsores puntiagudos llenos de garra, de esos que requerían rascar la zona roja del cuentarrevoluciones para darlo todo.
A día de hoy, la magia de hacer que un motor rinda mucha potencia con la simple admisión del aire de la atmósfera, sin sobrealimentación, ni compresor, ni turbo, se está perdiendo, y es por ello que he querido dedicarle unas líneas a este tema. Antes de empezar, me gustaría diferenciar brevemente las dos tendencias que existen en la actualidad en relación a las mecánicas atmosféricas.
De una parte, tenemos la corriente europea, la cual opta por apretar los motores hasta que giren muy arriba, rindiendo potencias por encima de los 100 CV por litro; mientras que la tradición americana se basa en el lema “no replacement for displacement” que os comenté al hablar de las diferencias entre pony cars y muscle cars, es decir, algo así como «nada mejor que la cilindrada», por lo que hablamos de motores enormes con un alto cubicaje para extraer la máxima potencia y par posibles.
Porsche 718 Spyder / Cayman GT4 – 415 CV
Por primera vez, los Porsche 718 Spyder y 718 Cayman GT4 comparten la base técnica, un propulsor atmosférico de seis cilindros y cuatro litros de nuevo desarrollo que queda asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades. Este motor bóxer proporciona 420 CV de potencia (309 kW) en ambos modelos. No es tan espectacular como el motor de 4.0 litros del Porsche 911 GT3, pero sigue siendo una auténtica bestia.
Chevrolet Camaro SS – 460 CV
Con su bloque V8 de 6.2 litros LT1 heredado del Corvette Stingray C7, el Chevrolet Camaro SS desarrolla una potencia total de 460 CV y un par de 617 Nm, contando con inyección directa, distribución variable VVT y el sistema Active Fuel Management de desactivación de cilindros en la versión equipada con caja automática de 10 velocidades. Si quieres más diversión, siempre puedes optar por el paquete de rendimiento Turbo 1LE.
Ford Mustang GT – 460 CV
En 2018, el Ford Mustang recibió una serie de actualizaciones que lo ayudaron a rivalizar con el renovado Chevrolet Camaro. Nuevas culatas y un inteligente sistema de doble inyección permiten ahora al Mustang GT V8 de 5.0 litros a igualar los 460 CV de potencia del Camaro, pero consigue un Mustang Bullitt y entonces tendrás unos nada despreciables 480 CV para jugar.
Dodge Durango SRT / Jeep Cherokee SRT – 475 CV
El Dodge Durango es uno de los 4×4 más llamativos disponibles en el mercado estadounidense, pero si además le añades las explosivas siglas SRT, se convierte en un verdadero monstruo de siete plazas que puede dejar en ridículo a más de un súper deportivo. El Durango SRT esconde bajo el capó el poderoso bloque 6.2 HEMI con ocho cilindros que desarrolla una potencia de 475 CV.
En combinación con la tracción total y una caja automática con ocho velocidades, es capaz de alcanzar los 100 km/h desde parado en sólo 4,5 segundos. Comparte motor con el Jeep Grand Cherokee SRT, que desarrolla la misma potencia, aunque en este último también encontrarás la salvaje versión Trackhawk con la friolera de 707 CV de potencia. Sabemos que no son deportivos como tal, pero merecen aparecer en esta lista.
Dodge Charger /Challenger Scat Pack / SRT 392 – 485 CV
Todos estos modelos comparten bajo el capó la misma mecánica V8 de 6.4 litros HEMI que cuenta con una potencia total de 485 CV y un sonido estremecedor que comparten con el resto de la humanidad a través de sus sistemas de escape deportivos. Además, si tenemos en cuenta que estos modelos no son extremadamente caros en los Estados Unidos, disfrutar de un motor atmosférico muy a la americana puede salirte a un precio bastante razonable.
Lexus GS F – 477 CV
Puede que veas el Lexus GS-F como un rival pobre para los BMW M5 o Mercedes-AMG E63 por la ausencia de un motor turboalimentado bajo su capó, pero lo cierto es que su escasa diferencia en rendimiento la solventa el encanto de su mecánica, un propulsor de V8 de 32 válvulas y 5.0 litros que desarrolla 477 CV y 527 Nm de par motor, todo ello acompañado de una emocionante banda sonora que emana de sus escapes. Pura delicia.
Lexus RC F – 477 CV
Si prefieres la misma mecánica V8 de 32 válvulas y 5.0 litros que desarrolla 477 CV y 527 Nm de par motor en formato coupé de dos puertas, el Lexus RC F es tu mejor opción. Ésta se basa en el bloque del IS F, aunque se han cambiado las piezas de rotación y deslizamiento, cuenta con Instantaneous Torque Concept derivado del LFA, las válvulas ahora son de Titanio, se han reforzado las bielas y se ha optimizado el control de válvulas.
Lexus LC 500 – 477 CV
El Lexus LC 500 también cuenta con una variante híbrida, pero en su versión de gasolina es el culmen de la deportividad en la marca nipona. Es caro, pues parte de nada menos que 140.000 euros, pero en sus entrañas esconde el bloque de 5.0 V8 ya conocido en los RC F y GS F con 477 CV y 527 Nm de par motor con el que es capaz de realizar el 0 a 100 km/h en sólo 4,6 segundos gracias a su transmisión automática de 10 velocidades.
Dodge Charger /Challenger Scat Pack / SRT 392 – 485 CV
Todos estos modelos comparten bajo el capó la misma mecánica V8 de 6.4 litros HEMI que cuenta con una potencia total de 485 CV y un sonido estremecedor que comparten con el resto de la humanidad a través de sus sistemas de escape deportivos. Además, si tenemos en cuenta que estos modelos no son extremadamente caros en los Estados Unidos, disfrutar de un motor atmosférico muy a la americana puede salirte a un precio bastante razonable.
Chevrolet Corvette C8 – 497 CV
Tras muchos meses de intriga, el Corvette Stingray 2020 es por fin una realidad. Más allá de su deportivo diseño, gran parte de su atractivo reside en su configuración mecánica, pues recordemos que se trata del primer Corvette de motor central. Su diseño es espectacular, pero todavía más interesante resultael nuevo motor LT2 V8 de 6.2 litros.
Disponible tanto para la variante coupé como para el convertible, desarrolla 497 CV (365 kW) y 630 Nm de par. Y si te parecen pocos, tranquilo, porque el paquete opcional Z51 Performance presume de una cifra total de 502 CV (369 kW) y 637 Nm de par máximo.
Porsche 911 GT3 RS – 520 CV
En el corazón de esta última evolución del Porsche 911 GT3 late un motor bóxer de cuatro litros. Esta mecánica atmosférica de altas revoluciones desarrolla 520 CV (383 kW) de potencia y se mantiene prácticamente sin cambios respecto al poderoso 911 GT3 Cup de competición. Con la transmisión de doble embrague y siete marchas (PDK) que monta, acelera de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos.
Este propulsor bóxer tiene 20 caballos (15 kW) más que el del modelo anterior y el del 911 GT3. Con una velocidad de giro que llega a las 9.000 revoluciones, es un verdadero motor deportivo.
Ford Mustang GT350 / GT350R – 526 CV
Aunque tanto el Mustang GT350 como su versión más picante, el Mustang GT350R, tuvieron que ser llamadas a revisión en los Estados Unidos ante un grave riesgo de incendiarse y sus propietarios han demandado a la marca por fraude, ambos modelos nos siguen fascinando por su motor V8 de 5.2 litros con 526 CV de potencia y más de 542 Nm de par.
Cuenta con doble árbol de levas y es el primer V8 de producción de Ford con un cigüeñal plano, una arquitectura que normalmente se encuentra en el mundo de la competición o en los coche de muy alta gama. Su línea roja empieza en las 8.250 rpm y, tras el último lavado de cara, la compañía del óvalo azul ha dotado al deportivo con algunas de las chucherías del nuevo Ford Mustang GT500.
Audi R8 V10 Performance – 620 CV
Como sabrás, el recién renovado deportivo de altas prestaciones de Audi está disponible en dos versiones, con 570 CV (419 kW) para el R8 V10 y con 620 (456 kW) para el R8 V10 Performance. El par motor máximo es de 550 Nm y 580 Nm, respectivamente. Comparado con el modelo anterior, la potencia se ha incrementado considerablemente y la respuesta es incluso más rápida.
Ahora este motor atmosférico de 5.2 litros alcanza un régimen de giro más elevado (hasta 8.700 rpm). Como en los coches de competición, el motor V10 tiene lubricación por cárter seco y su sonido característico es ahora más pleno. Opcionalmente, la marca de los cuatro aros puede instalar un escape deportivo que lo hace aún más radical.
Lamborghini Huracán Evo – 640 CV
El Lamborghini Huracán Evo representa a una evolución respecto al anterior Huracán. El bloque V10 de 5.2 litros y aspiración natural ahora ofrece una potencia total de 630 CV y 600 Nm de par motor. Si tenemos en cuenta que su peso se detiene en 1.422 kilogramos, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 2.9 segundos, alcanzando una velocidad punta superior a los 325 km/h.
La mecánica es la misma en el Lamborghini Huracán EVO Spyder.
Ferrari GTC4Lusso – 690 CV
Aunque también está disponible con un bloque V8 biturbo, preferimos indudablemente el motor 12 cilindros de 6.3 litros que entrega su potencia con suavidad y consistencia liberando sus imponentes 690 CV a 8.000 rpm. Tanto su ratio peso potencia de 2,6 kg/CV como el de compresión 13.5:1 marcan nuevos récords en su categoría.
Su par máximo es de 697 Nm a 5.750 rpm, con un 80% disponible desde tan solo 1.750 rpm, lo que garantiza una respuesta impresionante incluso a bajas revoluciones. Su melodía refleja brillantemente la personalidad multifacética del coche, siendo rica y poderosa en situaciones de conducción deportiva, a la vez que discreta y equilibrada en la ciudad.
Lamborghini Aventador SVJ – 770 CV
Ya sabes que el Lamborghini Aventador SVJ es una versión todavía más prestacional del feroz Aventador y, desde 2019, cuenta también con una variante a cielo abierto. En ambos encontramos una puesta a punto del poderoso bloque V12 atmosférico de 6.5 litros que convierte al Aventador SVJ en el más fiero de todos los ‘toros’ italianos de techo rígido y descapotables.
Hablamos de una potencia de 770 CV / 556 kW (20 CV más que el Aventador SuperVeloce Roadster) a 8.500 rpm y 720 Nm de par a 6.750 rpm, todo ello asociado a la transmisión ISR de 7 relaciones. Todo apunta a que será el último motor V12 de la compañía italiana, ya que se espera un tren motriz híbrido para el reemplazo del Aventador, el cuál llegará en 2020 tras 10 años en el mercado.
Ferrari 812 Superfast / 812 GTS – 800 CV
Ferrari ha desarrollado nuevamente la perfección y ha dotado a sus nuevos modelos de un revisado y poderoso motor V12 atmosférico de 6.5 litros que entrega la friolera de 800 CV (588 kW) a 8.500 rpm, lo que le permite marcar un nuevo punto de referencia entre los vehículos deportivos con motor central delantero y acercarse peligrosamente al mismísimo LaFerrari en términos de rendimiento gracias a una potencia específica de 123 CV/l y un peso en torno a los 1.600 kilogramos.
Va acompañado de un par máximo de 718 Nm a 7.000 rpm,aunque el 80% del mismo se encuentra disponible desde las 3.500 vueltas. Con semejantes cifras y un cambio de doble embrague y 7 relaciones optimizado, alcanza los 100 kilómetros por hora desde parado en 2,9 segundos, los 200 km/h en menos de 8 segundos y llega hasta una velocidad máxima de más de 340 km/h.
Una pena que se pierda el motor atmosférico!
Alejandro Lopez Guzman… Mi próximo coche será un atmosférico!!! Jejejeje!!
La perdida del motor atmosferico es para que nos dejemos las perras en cuestiones del motor. Esta claro que un turbo te destroza el motor. Atmosferico te puede durar toda la vida con un buen mantenimiento y algun que otro apreton. Como tu sabes patxi, vTec es la clave
Lo veo día a día patxi jajajaj riete si quieres pero es la pura verdad
Tengo que admitir que los motores de aspiración natural son mi devilidad
El C63 AMG también sería un buen candidato para esta lista no? Aún así muy buen artículo!
Que pasa con el SLS AMG??
Creo que los motores atmosféricos, nunca pasaran de moda, mientras aun se sigan usando los combustibles fósiles.
Turbos, híbridos y eléctricos, tendrán su encanto, pero nunca la durabilidad, sonoridad, entrega y progresiva potencia de un buen motor atmosférico.
Son hechos para durar y rendir, cientos de miles de kilómetros (con los adecuados mantenimientos y racional uso)
Serán los autos clásicos del próximo siglo.
Al rey de los atmosféricos(BMW) ni lo mencionaste….y en realidad,sin duda alguna ,son los mejores motores atmosféricos que se han fabricado jamás ?(por si no lo sabías)