Durante la semana pasada, la Dirección General de Tráfico llevó a cabo una campaña de vigilancia y control de camiones y furgonetas.
Durante los siete días de campaña, se han controlado 27.782 vehículos de mercancías, (24.894 estaban matriculados en nuestro país; 2.031 europeos y 857 de países no comunitarios). Del total de vehículos controlados se ha denunciado a 7.122 conductores. ¡Un total de 9.170 denuncias en 7 días!
No respetar las horas de conducción y descanso establecidas en la normativa, ha sido el precepto más infringido entre los transportistas, ya que ha supuesto 1.526 denuncias. Personalmente, esto me hace reflexionar sobre un aspecto que a mi parecer es de vital importancia, ¿dónde descansan estos profesionales?.
Si habéis salido de España y habéis circulado por Francia, os habréis dado cuenta de la cantidad de áreas de descanso que hay así como los servicios y la vigilancia que tienen. Este tipo de espacios son muy limitados en nuestras carreteras, sobre todo, en las secundarias.
La velocidad sigue siendo otro de los preceptos más infringidos, concretamente, 1.168 denuncias fueron por circular a una velocidad superior a la permitida.
Irregularidades con el tacógrafo conllevaron 992 denuncias y el cinturón de seguridad supuso un total de 457 denuncias.
Desafortunadamente, el alcohol y las drogas estaban presentes en 64 y en 6 casos respectivamente.
Las denuncias sobre documentación relativas al vehículo, al conductor y al cargador, ascendieron a 1.722 mientras que las impuestas por insuficiencias técnicas del vehículo o de la carga fueron de 1.027, de las cuales, 71 supusieron la inmovilización del vehículo.