Las siglas GTI –Gran Turismo Inyección– tienen desde hace muchos años un significado propio dentro de la gama Volkswagen. El Golf GTI es mítico, el Polo GTI pura diversión y, el más reciente Volkswagen Up! GTI, llegó hace relativamente poco para intentar robar ciertos clientes a los italianos de Abarth. Pero hoy es el turno del hermano mediano, así que centrémonos en él.
El Volkswagen Polo GTI es un verdadero juguete y, como ya te hemos comentado en ocasiones anteriores, recurre al motor 2.0 TSI de cuatro cilindros ya visto en otros productos de la firma. Desarrolla 200 CV de potencia y hasta ahora sólo se vendía asociado a la caja de doble embrague DSG de seis velocidades, aunque por suerte, la espera ha terminado: llega la caja manual de seis relaciones al Polo GTI.
Esta mecánica es diferente a la de su predecesor -equipado con un bloque de 1.8 litros con 192 CV-, aunque el aumento del peso se traduce, como podrás ver más adelante, en unas prestaciones prácticamente idénticas. Eso sí, esta versión GTI añade algunas chucherías” de lo más suculento respecto al resto de la gama Polo 2018.
Aunque por ahora no se han facilitado las cifras oficiales de esta versión manual, cabría esperar el descenso de alguna décima de segundo en la aceleración. Asociado a la transmisión DSG, el Volkswagen Polo GTI es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos, recuperar de 80 a 120 km/h en 3,8 segundos y alcanzar una velocidad punta de 237 km/h.
Igualmente, aumenta sensiblemente el consumo: mientras que asociado a la transmisión DSG declara 6,1 litros a los 100 km en ciclo combinado, con la caja manual la cifra asciende a 6,3 l/100 km. No es un aumento considerable, pero ahí está. Lo bueno es que baja el precio hasta unos nada despreciables 25.310 euros, situándose incluso por debajo del gran Ford Fiesta ST.
puedo cambiar la caja dsg de mi polo gti por otra caja manual.