A estas alturas de la «película» ya sabrás que la DGT pretende que España se equipare a muchos de los países de la Unión Europea a comienzos del próximo año, igualando los límites de velocidad en todas las carreteras convencionales. Pero no serán los únicos cambios, tal y como ha anunciado hoy el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.
Las nuevas medidas que se llevarán a cabo han sido anunciadas durante el discurso inaugural de la conferencia internacional ¿De la visión cero al objetivo cero? Liderazgo en la mejora de la seguridad vial, organizada por la Fundación Mapfre en el Congreso ante diversos expertos internacionales en seguridad vial.
Según apunta Marlaska, la DGT ya está trabajando en la reforma del Reglamento General de Circulación, el cuál recogería entre sus medidas más polémicas la rebaja del límite de velocidad en ciudad a 30 kilómetros por hora, una obligación que deberá aplicarse en todos los municipios españoles. Junto a esta, en el primer semestre de 2019 veremos también un nuevo conjunto de medidas destinadas a proteger a ciclistas y motoristas.
El ministro afirma que han sido las propias ciudades, como Madrid, Bilbao, Zaragoza, Málaga o Valencia, junto a diferentes asociaciones y colectivos, los que se han dirigido al ministerio para pedirlo.
Otra de las grandes modificaciones que se estudia tiene como protagonista el permiso por puntos, aunque en este caso hablamos de un anteproyecto de ley que modificaría el texto refundido de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, lo que necesariamente requiere su aprobación en el Parlamento.
El texto incluye pequeñas modificaciones que contemplan la pérdida de seis puntos al conducir utilizando el teléfono móvil con la mano (frente a la pérdida de tres puntos actual), la pérdida de cuatro puntos por no llevar puesto el cinturón de seguridad, el casco o el sistema de retención infantil (frente a los tres actuales) y la mayor penalización para quienes pisen más de la cuenta el acelerador en carreteras convencionales con límite a 90 km/h – 2 puntos y 300€ a partir de 111 km/h, en lugar de los 121 km/h actuales.
Pero no todo serán penalizaciones, ya que el anteproyecto también contempla la posibilidad de premiar a los conductores que superen un curso de recuperación parcial de puntos, pasando de los seis actuales a ocho; y a aquellos que hagan un curso de conducción segura, que obtendrían dos puntos más en el carné. Además, se unificaría el plazo para recuperar ocho puntos tras hacer un curso de recuperación parcial.
Y para rematar la jugada, Tráfico está actualmente ultimando un proyecto de orden ministerial que pretende actualizar la regulación de los cursos de sensibilización y reeducación vial para los titulares de un permiso de conducción, a fin de que estos tengan un contenido más práctico y participativo. Entrará en vigor el próximo 1 de julio de 2019.
Por último, Marlaska también ha querido referirse a la necesidad de regular la enseñanza presencial obligatoria para obtener el permiso de conducir, la instauración de una bonificación de 2 puntos en el permiso por realizar cursos de conducción segura, la posibilidad de segregar carriles para distintos tipos de vehículos o el impulso a la estandarización de los sistemas de seguridad más efectivos en los automóviles, entre otros.