La agencia de seguridad vial del gobierno de EE. UU. ha lanzado una nueva investigación sobre cuatro fabricantes de automóviles que tienen un tipo potencialmente mortal de paquetes de airbags presuntamente defectuosos fabricados por Takata y que no han sido retirados del mercado.
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras dijo en documentos publicados el pasado jueves que está investigando a Audi, Toyota, Honda y Mitsubishi en relación a los airbags Takata que involucra a 1.4 millones infladores.
Los infladores fabricados por el ahora en bancarrota Takata tienen un problema muy complejo y peligroso. Al parecer, con determinada humedad en el aire, a determinada temperatura y sobre todo, con cambios bruscos de temperatura, el metal puede presentar corrosión y debilitamiento. En caso de accidente o en caso de detonación, el debilitado metal podría fragmentarse y como si de metralla se tratara, salir despedido hacia la cara y cuerpos de los ocupantes de los vehículos que equipen estos sistemas.
Este problema ya ha causado víctimas mortales. El problema es tan peligroso que, en algunos casos, BMW les ha dicho a los conductores que estacionen sus vehículos hasta que se puedan hacer las reparaciones pertinentes.
La agencia de seguridad dice en algunos documentos que Takata no proporcionó detalles sobre las marcas, modelos o años de los vehículos afectados con los infladores defectuosos. La agencia ha establecido un arco de fechas en la que sitúan los sistemas defectuosos. Al parece estos infladores afectados habrían sido fabricados entre 1995 y 2000.
En las cartas remitidas a los cuatro fabricantes de automóviles, la NHTSA dice que tienen cinco días hábiles para notificar a la agencia del defecto de seguridad.
A diferencia de las retiradas previas, los infladores afectados ahora no usan nitrato de amonio para llenar las bolsas de aire en caso de choque pero al carecer de las juntas de sellado necesarias, el sistema puede presentar el problema de corrosión.
Takata, en documentos internos cifra los sistemas afectados en 4,5 millones de unidades.
Nada menos que 19 fabricantes de automóviles han retirado del mercado unos 70 millones de infladores en lo que se ha convertido en la mayor llamada a revisión de la historia de la automoción.
Hay que subrayar que la mayoría de los infladores retirados del mercado usaban nitrato de amonio para crear una pequeña explosión e inflar las bolsas de aire. El problema es que se ha demostrado que este químico puede deteriorarse a altas temperaturas y humedad haciendo que la estudiada explosión controlada se convierta en una elevada detonación que haría explotar el contendedor que alberga el airbag, generando metralla.
Fuente: Associated Press
Como siempre, ya veremos si los coches del grupo vag, se llaman a revisión, o se hace como las culatas y electro ventiladores, y se lo pasan por el forro, y se hagan cargo los dueños de los vehículos