La 86ª edición del Salón de Ginebra abre hoy sus puertas a la prensa especializada del motor y entre lujosas berlinas, curiosos prototipos y multitud de SUV no faltan creaciones de los mejores preparadores del mundo. Entre ellos tenía que estar el controvertido Mansory, quien nuevamente nos deleita con uno de sus salvajes proyectos sobre el deportivo estrella de Mercedes-AMG, el AMG GT S.
Raro sería que el conocido especialista no tuviera un as bajo la manga de cara a la cita suiza, donde fabricantes y especialistas luchan por llevarse un trozo del pastel. La competencia es fuerte, especialmente en cierto tipo de modelos como el Mercedes-AMG GT S, así que el preparador ha decidido romper las reglas una vez más y nos da a conocer la que probablemente sea la preparación más salvaje sobre la base del deportivo de Affalterbach.
En el exterior, todo el protagonismo se lo lleva el imponente kit aerodinámico ensanchado cubierto por una llamativa pintura gris mate, el cual incluye nuevos paragolpes delantero y trasero, un capó de fibra de carbono y taloneras revisadas con grandes tomas de aire para refrigerar el motor, los provocativos pasos de rueda que añaden 25 centímetros a la anchura total del modelo, el gran alerón fijo sobre la zaga y el difusor trasero con cuatro salidas de escape integradas.
Lógicamente, tampoco podemos olvidar el nuevo kit de muelles para rebajar la suspensión y las enormes llantas de aleación ultraligeras del especialista. Bautizadas como ‘Spyder’, estas cuentan con una medida de 9,5 × 21 pulgadas en la parte delantera y de 10,5 x 21 pulgadas en la trasera, calzadas con neumáticos 245/30 ZR21 y 305/25 ZR21, respectivamente.
Bajo el capó, el poderoso bloque V8 de 4.0 litros también ha pasado por el ‘quirófano’ de Mansory, elevando su potencia total hasta unos nada despreciables 730 caballos. Los principales componentes del paquete de rendimiento incluyen turbocompresores más grandes y un escape deportivo de acero inoxidable, acompañados de un filtro de aire optimizado y una unidad de control para la electrónica del motor.
Con sus nuevas cifras de potencia, el AMG GT S es capaz de acelerar hasta los 100 km/h desde parado en tan sólo 3,4 segundos, alcanzando una velocidad máxima de 330 km/h. ¿No es una delicia?