Hasta 2010, Mazda ofrecía en su catálogo el RX-8, un modelo de 1.310 kg de peso con un diseño muy atractivo y una motorización rotativa Wankel que le hizo ganar amigos y enemigos.
Ahora, en la cresta de la ola, la marca nipona está totalmente convencida de que tiene que tener en su catálogo un modelo deportivo por encima del aclamado MX-5 aunque no se sabe si se declinará por los ya usados RX-7 y RX-8 o le pondrá otro nombre como por ejemplo RX-9.
Se rumorea que Mazda quiere volver a traer de vuelta el motor rotativo que llegaría en 2017. En 2017, la marca nipona celebrará el 50 aniversario de su primer coche propulsado por un motor rotativo Wankel, el Cosmo Sport.
Según Autoexpress, el futuro automóvil deportivo de Mazda será más grande y más potente que su predecesor pero posiblemente, más ligero.
Los rumores confirman que la marca está trabajando muy duro para ofrecer un motor Wankel más eficiente, menos adicto al aceite y con un par algo más elevado (Estos son los contras del Wankel) eso sí, sin recurrir al turbo. Se cifran en 300, los cv de potencia que podrían tener el nuevo modelo.
Para los que no conozcan en profundidad el RX-8, se trata de un vehículo innovador en muchos aspectos, tanto por ser uno de los primeros coupés de cuatro puertas con las de atrás más pequeñas de apertura al revés, como por su motor wankel de 1,3 litros que pese a su pequeña cilindrada conseguía rendir 192 o 231 caballos, según la versión.
y que no gaste mas aceite que la freidora de Mc Donals
Es un hecho que cualquier configuración, salvo un monocilindrico o alguna barbaridad similar es más eficiente que nuestros cuasi impuestos tetracilindricos en linea.
El problema de este motor ha sido siempre la necesidad de aceite en el interior de la cámara para lubricar los delicados segmentos que permiten el milagro del motor rotativo, disparando las emisiones e incumpliendo todas las normativas vigentes de contaminación.
Motor con un rendimiento termodinámico magnífico, si logran meterlo en cifras de emisiones, volverán a su ser.
Me encantan los japos por su cabezoneria y sus peculiaridades a la hora de construir. Complicados en el taller, pero magníficos en la carretera!!