El McLaren 675LT llegó al mercado con el objetivo de ofrecer el más alto rendimiento. Su ligera construcción y su elevada potencia pretenden eclipsar a sus rivales. El 675LT es básicamente una versión más ligera y más potente del 650S con un claro enfoque en el circuito.
Son ya 25 primaveras las que cumple el matrimonio entre Mclaren y JVCKenwood en los circuitos, y que mejor forma de celebrarlo que con un exclusivo prototipo del superdeportivo británico que ha visto la luz en el Consumer Electronics Show de Las Vegas 2016. El resultado se llama McLaren 675LT JVCKENWOOD y es, probablemente, una de las máquinas más radicales que han salido hasta ahora de la fábrica de Woking.
Durante su asociación, son más de 400 carreras en las que la conocida empresa de electrónica ha suministrado equipos de radio al fabricante. Por ello, para celebrar sus bodas de plata, el McLaren 675LT se ha vestido de gala con una carrocería pintada en negro brillante a contraste con franjas grises donde aparece el emblema de KENWOOD, grandes llantas negras y mucho más que unos simples apéndices decorativos.
Exteriormente, el modelo no difiere en exceso de la versión estándar, salvo por los detalles que ya hemos señalado y la sustitución de los espejos retrovisores por cámaras -una tercera cámara se integra bajo el alerón posterior-. Pero el plato fuerte viene en su interior, donde la la tapicería de cuero y Alcántara se complementa con un interior minimalista en el que desaparecen la instrumentación y la consola central para dar paso a un elenco tecnológico de primera, como el Head Display System (HUD) que proyecta una gran cantidad de información en el parabrisas gracias al Advanced Driver Assitence System (por ejemplo, los vehículos situados en el ángulo muerto o la velocidad).
Y sin duda, el protagonista indiscutible es el volante, inspirado en el mismísimo McLaren P1 GTR. En él, los botones para el boost y el alerón adaptativo DRS han sido sustituidos por los del mencionado head-up display, pero sigue resultando un detalle sumamente especial. Por desgracia, no llegaremos a verlo, ya que la firma británica no tiene pensado comercializar este concept.
Respecto a la mecánica, esta es la misma que en el 675LT de producción, un propulsor V8 biturbo de 3.8 litros con una potencia de 675 caballos y 700 Nm de par para un peso total en la báscula de 1.230 kilos. Con semejantes cifras, su velocidad máxima asciende hasta los 330 km/h y es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 2,9 segundos y de 0 a 200 km/h en 7,9 segundos.
Dios que Belleza de auto