La división más exclusiva de Woking, McLaren Special Operations, acostumbra a ser noticia por el lanzamiento de alguna nueva edición limitada o accesorios de alto rendimiento para la gama de superdeportivos británica. Ahora, no se trata de nada de eso, sino más bien de un sello muy especial que solo podrán llevar los McLaren F1 originales gracias al programa ‘McLaren F1 Certification‘.
Se trata por tanto de un programa de autenticación de unidades del McLaren F1 destinado a aquellos propietarios que desean restaurar y certificar su superdeportivo. Y para dar la bienvenida a este nuevo proyecto han restaurado un espectacular McLaren F1 GTR Longtail R25, un coche de carreras que compitió en las 24 Horas de Le Mans allá por 1997.
Con este nuevo programa de certificación McLaren Special Operations espera recibir a todos los propietarios de un McLaren F1 que deseen autenticar su historial y especificaciones.
Según aseguran desde McLaren este programa se ha creado para «garantizar la autenticidad de las versiones de carretera y de circuito del superdeportivo ganador de Le Mans, ofreciendo la mayor tranquilidad a los propietarios actuales y futuros«. Gracias a este cada propietario recibirá un sello de la marca confirmando de que su vehículo reúne una serie de características y especificaciones concretas, lo que aumenta considerablemente su valor en el mercado.
El proceso de autenticación no es precisamente fácil, cada vehículo tendrá que pasar por un completo proceso de comprobación, seguido de una restauración en la que cada mínimo detalle se tiene en cuenta. Así, cada propietario de un McLaren F1 podrá recibir este exclusivo certificado a un coche único e irrepetible en la historia del automovilismo. En total entre 1993 y 1998 se construyeron 106 McLaren F1, 64 de calle y 28 GTR de carreras, todos ellos pueden acceder libremente a este programa.
Este McLaren F1 GTR Longtail R25 en concreto pertenece a Simon Kidston, quien encargó a MSO restaurarlo al completo según las especificaciones originales con las que compitió en las 24 Horas de Le Mans hace casi más de dos décadas. Para esta compleja restauración en McLaren han utilizado piezas originales del F1 fabricadas antes de 1997 y además han recuperado el diseño original que luce en su exterior con un llamativo esquema de colores.