Hace unas horas, durante la celebración del Salón del Automóvil de Detroit, Mercedes-AMG ha aprovechado para mostrar la ampliación de su cartera de productos con tres nuevos modelos e introduce al mismo tiempo una nueva designación.
Se trata de los modelos 53 para la gama del CLS, la Clase E Coupé y la Clase E Cabrio .Bajo esta nueva denominación se presentan estos vehículos que bajo el capó cuentan con un nuevo motor electrificado con 3,0 litros de cilindrada y sobrealimentación doble mediante un turbocompresor por gases de escape y un compresor adicional eléctrico.
El motor de seis cilindros en línea desarrolla 320 kW (435 CV) y pone a disposición un par máximo de 520 Nm. Su alternador arrancador EQ Boost puede entregar brevemente hasta 16 kW (22CV) de potencia y 250 Nm de par adicionales, y se encarga además de alimentar la red de a bordo de 48 voltios.
Entre el resto de detalles técnicos destacados nos encontramos con un cambio de nueve marchas AMG SPEEDSHIFT TCT y la tracción integral completamente variable AMG Performance 4MATIC+. La nueva caja de cambios ofrece unas transiciones extremadamente breves, reacciones rápidas a las órdenes emitidas por el conductor mediante las levas de cambio, una función de doble embrague y la reducción directa múltiple.
Entre los distintivos ópticos comunes a los tres nuevos modelos 53 se encuentran la parrilla del radiador Twin-Blade, el faldón delantero en diseño A‑Wing, los embellecedores laterales específicos de AMG, el faldón trasero con inserto de difusor y embellecedores redondos en la salida doble de escape en cromo de alto brillo.
Aunque no es lo «típico en AMG», con este nuevo motor, el CLS 53 4MATIC+ acelera en solo 4,5 segundos de cero a 100 km/h y alcanza con el paquete Driver una velocidad punta de 270 km/h.
El compresor adicional eléctrico recibe asistencia del alternador arrancador EQ Boost durante la puesta en marcha, y alcanza sin retardo una presión de sobrealimentación elevada que hace aumentar con rapidez el par motor al acelerar, antes de que entre en acción el turbocompresor de gran volumen accionado por los gases de escape. Gracias a esta intervención escalonada, el motor de 3,0 litros reacciona con una espontaneidad extrema y asegura una respuesta de gran dinamismo sin caída en la sobrealimentación. Una ventaja adicional es la gran suavidad de marcha del motor de seis cilindros en línea.
Entre las funciones de propulsión híbrida se cuentan la asistencia al motor de combustión (boost) con 16 kW (22 CV) de potencia y 250 Nm de par, la recuperación de energía cinética, el desplazamiento del punto de operación del motor, el planeo y un arranque casi imperceptible del motor en la función de parada y arranque.