El Mercedes Clase T está listo para llegar a los concesionarios de los principales mercados europeos. Lo hace con la intención de convertirse en una alternativa más confortable y refinada al Citan Tourer para cubrir en cierto modo el hueco que han dejado los MPVs compactos.
Estéticamente cuenta con detalles que permiten conseguir un efecto más cuidado y parecido al de un coche aunque es evidente que tanto de perfil como por la zaga es complicado diferenciarlo del Renault Kangoo o Nissan Townstar. El frontal es la zona más personal.
En el interior el salpicadero sí es específico pero no cambia en relación al estrenado en los Citan y Citan Tourer así que la distribución es sencilla, sin nada novedoso. Algunos apliques decorativos son nuevos para intentar poner un toque más cuidado pero en general no difiere demasiado de los más comerciales.
La gama mecánica con la que es lanzado contempla dos motores de gasolina 1.3 Turbo con 102 y 130 CV de potencia y dos diésel con 95 y 116 CV de potencia, estos últimos de origen de Renault. Si el cliente lo desea puede elegir el cambio de doble embrague con siete velocidades.
Según versiones el Mercedes Clase T puede tener equipamientos exclusivos como el tapizado en piel que no se puede montar en el Citan. Además pueden incluir navegador, acceso sin llave, asistente al aparcamiento, cámara posterior, control de crucero, monitor de ángulo muerto, climatizador, etc. Los precios arrancan en los 28.062 €.