Buenas noticias para los amantes de lo eléctrico y en definitiva para todos aquellos que quieran una sociedad libre de emisiones derivadas del mundo del automóvil. Hoy nos han anunciado de forma oficial que MINI se convertirá en una marca exclusivamente eléctrica «a principios de la década de 2030», aunque el principio del fin de la era de motores de combustión interna en MINI, llegará en 2025 cuando se lanzarán los últimos modelos con motores de combustión interna.
Aunque el plan para reinventar la marca británica fue informado por primera vez la semana pasada en forma de rumor, hoy ya ha sido confirmado por BMW Group como parte de una importante aceleración de sus planes de electrificación.
Según la propia BMW, MINI jugará un «papel pionero» en el programa de electrificación del Grupo, afirmando que «la marca urbana es absolutamente ideal para la movilidad eléctrica». BMW dice que MINI seguirá siendo una «marca global con presencia en todas las regiones del mundo», incluidos los mercados en los que opera actualmente y que aún permitirían la venta de automóviles de combustión interna a partir de 2030.
El último modelo con motor de combustión de la firma será el próximo MINI hatch que se lanzará en 2025. A partir de ese momento, la firma solo lanzará modelos totalmente eléctricos, con el objetivo de que la mitad de sus ventas globales sean vehículos eléctricos para 2027.
Si tienes miedo por este cambio has de saber que habrá mucho tiempo de transición y es que al fin y al cabo la nueva generación de MINI -la última con motores de combustión interna- se lanzará en 2023 con el MINI Countryman y 2025 con el nuevo MINI hatch, por lo que todavía tendrás desde 2021 a 2030 para disfrutar de la combustión interna que convivirá con la electrificación a partir de 2030 y terminará en 2035, cuando los modelos que compres en 2025 cumplan 10 años de edad.