En Nio tienen claro que para conquistar el mercado europeo es necesario ofrecer un vehículo de tamaño compacto con motor eléctrico y precio contenido, algo que en MG ya han demostrado que funciona realmente bien con el popular «4» que sigue escalando posiciones en el ranking.
Para los responsables de la firma china es prioritario lanzar un automóvil del segmento C que consiga cifras muy elevadas de venta y posteriormente complementarlo con otros automóviles, algo que no suena descabellado aunque resulta curioso viniendo de un fabricante que tiene solo coches grandes a la venta.
De todos modos la idea de Nio pasa por lanzar una marca más sencilla de corte asequible para ofertar sus automóviles más agresivos en la política de precios, y dejar a Nio como alternativa refinada de alta gama con calidades o equipamientos muy superiores.
En cualquier caso desde España vemos los planes de Nio siempre muy lejanos dado que el Sur de Europa no está en sus planes a corto plazo. La firma quiere invertir en aquellos mercados en los que los eléctricos tienen una cuota elevada y por ello han comenzado en Suecia, Noruega, Dinamarca, Alemania y Países Bajos.