Desde que llegó al mercado el primer SUV (que no queda claro a qué marca se le puede atribuir ese concepto) no hemos parado de ver este acrónimo en prácticamente todas las marcas y en casi todos los segmentos y es que el porcentaje de ventas de SUV es tremendo.
Para que te hagas una idea, si un fabricante vende un modelo compacto y una variante SUV basada en ese segmento compacto, actualmente vende más la carrocería SUV a pesar de ser bastante más cara y contar con otras pegas, como un mayor consumo de combustible y un mayor desgaste de neumáticos debido a su ligero incremento de peso.
A pesar de los «contras» que siempre hemos recalcado, la gente opta por los SUV porque son aparentemente más grandes, la gente se siente más segura porque parecen más robustos, presentan mejor disposición para entrar y salir del vehículo y cuentan con un puesto de conducción sobreelevado con el que muchos argumentan una mejor visibilidad en la carretera.
Hace unos días, desde fundéuRAE, una web especializada en lenguaje que cuenta con el apoyo de la agencia de noticias EFE y la propia Real Academia de la Lengua Española (RAE) nos comentaron que deberíamos dejar de usar la palabra SUV.
Sí, tal y como has leído, esta web especializada en lenguaje desaconseja el uso de la palabra SUV debido a que nuestro diccionario cuenta con un término mucho más correcto para denominar a estos modelos de corte sobreelevado y características «offroad» ligeras. El término que nos proponen para dejar de usar la palabra SUV, es el de todocamino.
Según fundéuRAE el término todocamino, escrito en una sola palabra, es una alternativa válida y mucho más recomendable al anglicismo SUV (sigla de sport utility vehicle) para referirse al vehículo que mezcla las características de un turismo con las de un todoterreno.
¿Seguirás usando SUV, pasarás al término todocamino o seguirás odiándolos llamen como se llamen?