Startech es uno de los especialistas del mercado de accesorios del automóvil que nunca se pierde el Salón del Automóvil de Ginebra. Un año más, el preparador pone toda la carne en el asador con tres novedades de lo más suculento, las cuales utilizan como base el Aston Martin Vantage, el Range Rover Sport y el Bentley Continental GT.
Quizás el más llamativo es el deportivo británico, cuyo motor V8 con doble turbo de 4.0 litros y origen Mercedes ha incrementado su potencia hasta los 600 CV y 775 Nm de par máximo gracias al kit de rendimiento PowerXtra SP 600 de Startech. Con ello, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3.4 segundos y de alcanzar una velocidad punta de 320 km/h.
A nivel estético, añade algunos elementos en fibra de carbono, tales como el difusor posterior -con luz LED al más puro estilo Fórmula 1), las salidas de aire de los pasos de rueda, las carcasas de los espejos retrovisores exteriores y las puntas de escape personalizadas, aunque el diseño se mantiene bastante fiel al modelo convencional. Por último, pero no menos importante, hay que mencionar las llantas de aleación Monostar M de 21 pulgadas, disponibles en negro, plata, rojo o azul.
Para el lujoso GT, el especialista tiene preparado un paquete estético de lo más llamativo, con elementos en fibra de carbono visible opcional, nuevas llantas forjadas Monostar M de 22 pulgadas y una suspensión rebajada en 25 mm. También es novedad la parrilla frontal, que permite una mayor ventilación de motor y frenos, así como un nuevo paragolpes delantero con dos alas que nos recuerdan a las de los monoplazas de F1.
En la zaga, se puede apreciar un sutil spoiler, mientras que el paragolpes cuenta con un difusor de carbono con cinco aletas y un módulo de luz LED central que sirve como luz antiniebla trasera y como luz de freno. Pero lo más espectacular es el interior, que combina el cuero en gris y marrón con las molduras en fibra de carbono y unas alfombrillas específicas, todo ello en diseño de rombos.
Por último y, para el SUV, la fibra de carbono vuelve a ser la protagonista en los nuevos paragolpes, tomas de aire, difusor, spoiler y carcasas de los espejos retrovisores exteriores. La carrocería se ha ensanchado en nada menos que 60 mm y la suspensión se ha rebajado en 25 mm lo que le da un aspecto todavía más ancho y robusto al Range Rover Sport.
Para las llantas se ha optado por un salvaje tamaño de 23 pulgadas y, en el interior, hay una nueva combinación de cuero y Alcántara que combina con los detalles y superficies en fibra de carbono, disponibles en acabado mate o de alto brillo. También se ofrecen alfombrillas específicas y una particular iluminación ambiente.