Hace solo unos días conocimos el nuevo BMW Z4 ‘First Edition’ y ahora el fabricante alemán acaba de desvelar todos los detalles y características del resto de versiones a la venta a partir del marzo del 2019. Estamos ante la vuelta de un roadster clásico, reinterpretado y más deportivo que nunca que ahora destaca por fusionar el dinamismo de un coche deportivo con un diseño emocionante, un ambiente exclusivo y características de equipamiento avanzadas.
Este biplaza equipa una capota de lona totalmente eléctrica, y entre las principales novedades podemos encontrar unas proporciones revisadas, la posición centrada de los asientos, una distancia entre ejes más corta para conseguir una mayor agilidad y vías más anchas que su predecesor. Además, se han llevado a cabo algunas medidas de ahorro y distribución de peso 50:50 junto con una carrocería aerodinámicamente optimizada.
El diseño exterior del nuevo BMW Z4 utiliza un uso preciso de las formas y varios detalles distintivos. En el frontal, se consigue una mirada afilada y agresiva gracias a los faros colocados en los bordes exteriores de la parte delantera y en disposición vertical, por primera vez. De serie equipa unos faros LED y de forma opcional podemos optar por faros LED adaptativos opcionales, con función de matriz para luces largas de carretera y de curva no deslumbrantes.
La capota de lona se abre y cierra con solo presionar un botón en diez segundos, incluso en movimiento a una velocidad máxima de 50 km/h.
Otra de las señas de identidad en el frontal es la gran parrilla de riñones BMW que ahora luce un nuevo diseño de malla. Por otro lado, el amplio capó, con prominentes líneas de contorno, se extiende a ambos lados de los pasos de rueda. Una vez llegamos a la zaga su diseño no pierde ni un ápice de fuerza, gracias a lineas musculosas y esculturales con un alerón bien integrado, luces LED y un sutil difusor.
En el interior encontramos un estilo moderno y muy BMW con un marcado enfoque hacia el conductor, líneas que van hacia delante con un impulso dinámico y paneles de control claramente estructurados. Se han reducido los embellecedores para obtener un aspecto más purista del habitáculo y los contornos del panel de las puertas hacen eco de algunos de los elementos gráficos de los laterales exteriores.
El conductor y el copiloto disponen de asientos deportivos específicos para este modelo y con reposacabezas integrales. De serie está tapizado en cuero Vernasca, mientras que si optamos por el BMW Z4 M40i tiene un interior de cuero y Alcántara. Además, el interior tiene un aspecto práctico gracias al espacio de almacenamiento detrás de los asientos, los posavasos debajo de la cubierta del reposabrazos central (que se abre en dos secciones con una división longitudinal) y guanteras grandes en las puertas.
Los motores disponibles para el nuevo Z4 se benefician de numerosas actualizaciones todos ellos transmiten la potencia a la carretera a través de la caja de cambios Steptronic Sport de última generación de ocho velocidades. La versión más potente, el BMW Z4 M40i equipa un propulsor de 3.0 litros y seis cilindros en línea, con tecnología TwinPower Turbo de M Performance que consigue una potencia de 340 CV y un par máximo de 500 Nm para propulsar al roadster desde 0 a 100 km/h en 4,6 segundos.
Un peldaño más abajo nos encontramos con el nuevo BMW Z4 sDrive30i que consigue un total de 258 CV (190 kW) y 400 Nm lo que le permite completar la carrera de 0 a 100 km/h en 5,4 segundos. Por último, tenemos al BMW Z4 sDrive20i que desarrolla un total de 197 CV (145 kW) y un par máximo de 320 Nm que se traducen en un tiempo de 0 a 100 km/h de 6,6 segundos.