El Salón del Automóvil de Nueva York 2019 ha sido el escenario elegido por General Motors para dar a conocer el nuevo Cadillac CT5, sustituto del extinto Cadillac CTS. A pesar de la fiebre SUV, la firma estadounidense cree firmemente que los sedanes aún tienen un futuro brillante por delante y, tras una inversión de 211 millones de dólares en las instalaciones de Lansing Grand River, el nuevo CT5 llegará con fuerza para situarse por debajo del CT6.
Estéticamente, Cadillac ha arriesgado sensiblemente en agresividad, con un frontal completamente nuevo en el que se pueden distinguir una gran calandra rematada en negro y luces diurnas verticales con tecnología LED. Las ópticas traseras también adoptan una forma vertical, en contraposición con su hermano mayor, el CT6. El ejemplar burdeos de las imágenes es el acabado Premium Luxury y el plateado es la versión Sport.
Si bien Cadillac lo define como una berlina compacta, en dimensiones está al nivel del los BMW Serie 5, Audi A6 y Mercedes-Benz Clase E, con una longitud de 4.924 mm, una anchura de 1.883 mm y una altura de 1.452 mm. La batalla asciende hasta los 2.947 mm. Sin embargo, Cadillac ha querido dejar claro que su precio quedará situado por debajo de estos, a la altura de los Serie 3, A4 y Clase C.
En el interior se puede ver una elegante consola central con acabados en madera que integra el mando giratorio para el nuevo sistema de información y entretenimiento con pantalla táctil de 10 pulgadas. Podemos encontrar molduras de madera también en las puertas, en combinación con un refinado cuero para los tapizados de salpicadero, puertas y asientos.
En términos de equipamiento, no faltan la función Adaptive Remote Start, los asientos con masaje, regulación eléctrica, memoria y climatización; los reposabrazos y la consola central tapizados en cuero, adornos en fibra de carbono, un volante más deportivo con levas de magnesio y pedales de aluminio, múltiples opciones de llantas y un largo etcétera.
Asentado sobre la nueva plataforma Alpha de la compañía, se ofrecerá en versiones detracción trasera y tracción integral. La mecánica de acceso será un bloque turboalimentado de 2.0 litros cuya potencia asciende hasta los 240 CV (177 kW) y 350 Nm de par máximo.
Aquellos que busquen más prestaciones podrán optar por un V6 biturbo de 3.0 litros con 340 CV (250 kW) y 542 Nm de par motor. Ambas mecánicas estarán asociadas a una transmisión automática de 10 velocidades para favorecer los consumos y ofrecerán cuatro modos de conducción: Tour, Sport, Snow/Ice y My Mode. Las ventas comenzarán a finales de año.