Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.8
Notable
El reciente facelift del Audi A4 ha dado como resultado un sedán que llega más equipado que nunca, con hasta siete motorizaciones, un equipo multimedia de última generación y un mejorado comportamiento dinámico. Sigue posicionándose como uno de los favoritos en el segmento premium y, por precio, se sitúa en un escalón intermedio entre sus rivales directos.
Desde su llegada al mercado en 1994, se han fabricado más de 7,5 millones de unidades del A4, lo que lo convierte en el modelo de la firma de los cuatro aros más exitoso de todos los tiempos. La primera generación de esta berlina estableció nuevos estándares en el mercado como sucesor del Audi 80, y 26 años después sigue siendo todo un referente.
La actual (y quinta) generación del Audi A4 llegó en 2015, aunque a mediados de 2019 se actualizó para mantenerse en lo más alto frente a un Mercedes-Benz Clase C mejorado y un recién estrenado BMW Serie 3. Con el restyling no solo hemos visto mejoras estéticas y de equipamiento, sino también motorizaciones más eficientes y un nuevo equipo multimedia.
No es de extrañar que la firma de los cuatro aros quiera mantener fresco el Audi A4, pues este sedán continúa liderando su clase y representa uno de los pilares principales para la factoría de Ingolstadt. Solo en Europa se vendieron en torno a 100.000 unidades en 2019, de las cuales 5.002 ejemplares se corresponden con nuestro mercado.
Estos datos demuestran que la demanda del Audi A4 no ha disminuido. Es el modelo más popular de la marca en todo el mundo y, aproximadamente uno de cada 5 modelos Audi que se venden en la actualidad, pertenece a la gama A4. Esta queda formada en la gama 2020 por los Audi A4 berlina, A4 Avant y A4 allroad. Tampoco faltan los poderosos Audi S4 y Audi RS 4 Avant.
Diseño exterior
El Audi A4 ha evolucionado hacia una línea más dinámica y sofisticada que nunca gracias a una serie de detalles deportivos, aunque mantiene su línea clásica y continuista que lo distancia en este sentido de rivales como el BMW Serie 3 o el Volvo S60. En la vista frontal, la inclinada luna aislante y calefactable da paso a un musculoso capó en forma de ‘V’ de marcadas líneas.
Este desemboca de forma natural en una gran parrilla Singleframe propia de la marca más amplia y plana. En ella podemos distinguir los radares de algunos sistemas de asistencia, una de las cámaras del sistema de visión 360º si las equipa, parte de los sensores de aparcamiento delanteros, la matrícula y el logo de la marca.
A ambos lados no faltan los faros LED de serie, aunque opcionalmente se pueden equipar los excelentes y recomendables faros Matrix LED con indicadores dinámicos, que presentan una particular firma lumínica tridimensional. Una pequeña franja del parachoques en el color de la carrocería parece simular un sutil splitter frontal para incrementar la deportividad.
En los extremos exteriores del paragolpes delantero se aprecian los radares de los sistemas de asistencia y unas tomas de aire que dirigen el flujo hacia las ruedas enmarcadas en un embellecedor negro brillante con detalles cromados, que ponen el contraste con el color de la carrocería. En el extremo inferior del paragolpes encontramos una entrada de aire de menores dimensiones.
La vista lateral no es menos llamativa, presentando una línea de cintura ascendente, un espacio acristalado generoso -las lunas posteriores pueden ser tintadas y las delanteras insonorizadas-, una superficie de las puertas completamente limpia de protecciones y un detalle marcado a modo de faldón que le da el toque de deportividad al conjunto.
En dimensiones, el Audi A4 mide 4.76 metros de longitud, 1.85 metros de ancho y 1.43 metros de alto por lo que se encuentra en la media de sus rivales. La batalla es de 2.820 mm y los anchos de vía de 1.572 mm delante y 1.555 mm detrás. El coeficiente aerodinámico Cx es de 0.25, con una superficie frontal de 2,2 m² y un factor de resistencia de 0,55.
Destacan especialmente la pronunciada caída del techo, el marcado nervio de la sección inferior de las puertas y las llantas de 18 pulgadas con diseño de 5 radios dobles en estrella, calzadas con neumáticos Hankook Ventus S1 evo2 en medidas 245/40 R18 93Y. Tras ellas encontraremos unos discos ventilados en el eje delantero y macizos en el trasero.
Remata el atractivo diseño la zaga, con una amplia luna y una horizontalidad marcada que parece asentar con contundencia al modelo sobre el asfalto. Llaman especialmente la atención los pilotos LED de efecto tridimensional que están unidos por una tira cromada. No faltan la tira de sensores posteriores y un difusor en el extremo inferior con detalles cromados.
Las dos salidas de escape que tratan de incrementar la deportividad son plenamente funcionales, no como ocurre en el Clase C. Aquellos que quieran un Audi A4 aún más deportivo, tienen disponible el acabado S line, el paquete Carbon Style, un spoiler trasero normal o en carbono, carcasas de los retrovisores en negro o carbono y el paquete de estilo gris oscuro.
Diseño interior
En el interior del nuevo Audi A4 te costará encontrar cambios. Preside el salpicadero la gran pantalla del nuevo sistema de infoentretenimiento, que mejora notablemente en conectividad y comunicación en red. También vemos nuevos paquetes interiores design selection y S line, que ofrecen más combinaciones, así como una instrumentación remozada.
En términos de diseño, el salpicadero se ha trazado siguiendo líneas horizontales y apostando por la simplicidad, lo que nos libera de una abundante botonería. Los materiales empleados son blandos en su mayoría, con escasos componentes en plástico rígido que, en todo caso, son vistosos y de tacto agradable. Lo cierto es que el conjunto rebosa empaque.
Los cinturones delanteros pueden regularse en altura.
En el salpicadero resaltan los embellecedores en aluminio y los ajustes son muy buenos, con ausencia de crujidos incluso cuando presionamos con fuerza con el dedo. Como novedad, desaparece la unidad central para los sistemas de infotainment de la consola central, tomándole el relevo la pantalla táctil del MMI touch.
También se presenta más despejada la consola del túnel central. En la posición más retrasada de este nos topamos con el reposabrazos, que se puede ajustar en altura y longitud. Esconde bajo el mismo un pequeño hueco portaobjetos con toma USB-C, toma de 12V y cargador inalámbrico para el teléfono móvil. Eso sí, no es nada profundo.
Esta unidad dispone de un volante multifunción de tres radios (hay cuatro tipos) con pequeñas levas solidarias de plástico para el cambio. Tras este encontramos el conocido Audi Virtual Cockpit con abundante información que ahora ocupa todo el espacio disponible, aumentando su tamaño hasta 12,3 pulgadas. Opcionalmente se ofrece un Head-Up Display.
Respecto a los asientos, estos deportivos ofrecen gran comodidad, aunque el agarre es limitado. Hay tres tipos: estándar, deportivos y deportivos S, pudiendo equiparse con ajuste eléctrico, apoyo lumbar, extensión de la banqueta, masaje, memoria y climatización, lo que permite encontrar la temperatura, la posición y la inclinación ideal para cada cuerpo.
El climatizador automático de confort -opcional- regula la temperatura del habitáculo en tres zonas y puede funcionar en dos modos climáticos diferentes, denominados eco y normal. En el modo eco, el climatizador automático se basa en una línea característica de consumo optimizado para establecer la temperatura interior seleccionada, aumentando así aún más la eficiencia.
Por su parte, el nuevo sistema MMI touch que se monta a bordo cuenta con una pantalla fija de excelente resolución que tiene una diagonal de 10,1 pulgadas (antes 8,3”). Su interfaz es similar a la de los modelos más lujosos de la marca, aunque sin respuesta háptica. Como es habitual en Audi la fluidez, los gráficos y el funcionamiento del sistema no admiten tacha.
Los asientos traseros pueden ser calefactados y en la segunda fila podemos añadir cortinillas en las ventanas.
El acceso a las plazas traseras es cómodo gracias al generoso ángulo de apertura de las puertas y las plazas traseras homologan espacio para tres pasajeros, aunque sólo podrán viajar cómodamente dos ocupantes, como es habitual en prácticamente la totalidad de vehículos por las cotas y mullido de la plaza central. Además, el túnel central es prominente.
El maletero cubica 460 litros, que aumentan abatiendo el respaldo de los asientos traseros -60:40 o 40:20:40 opcional-. La superficie de carga es plana y el portón del maletero manual deja una buena apertura de carga. Bajo el piso hay un pequeño hueco y podemos equipar una rueda de repuesto de emergencia. El borde de carga queda a 600 mm del suelo.
Motorización
La gama del Audi A4 berlina 2020 está compuesta por un amplio abanico de motorizaciones diésel y gasolina. La gama de gasolina parte del 35 TFSI con 150 CV, que puede pedirse con caja manual de seis velocidades o S-tronic de siete. Un escalón por encima está el 40 TFSI con 190 CV y, como tope de gama, el 45 TFSI con 245 CV. En ambos encontramos la caja S-tronic.
La tracción siempre es delantera, salvo que optemos por la versión quattro disponible para el 45 TFSI. La rama diésel parte del 30 TDI con 136 CV y sigue con el 35 TDI de 163 CV y el 40 TDI de 190 CV, alcanzando su máximo esplendor en el Audi S4 de 347 CV. Todos montan el S-tronic de siete velocidades salvo el S4, que cuenta con la caja tiptronic de ocho relaciones.
La tracción es siempre delantera, salvo en el 40 TDI que podemos equipar tracción integral de forma opcional y en el S4 que es tracción total de serie. Como sabrás, no hay Audi RS 4 berlina, solo Avant. La gran ventaja del nuevo modelo que todas las mecánicas -salvo el 40 TDI- reciben el distintivo medioambiental ECO de la DGT gracias al sistema mild hybrid.
Los motores de cuatro cilindros cuentan con una red eléctrica de 12 voltios y una batería de iones de litio de 12 voltios adicional. Una máquina eléctrica unida al cigüeñal por una correa hace las veces de motor de arranque y alternador, pudiendo generar hasta 5 kW en las fases de deceleración. Permite la función de avance por inercia y ahorra hasta 0,3 l/100 km de combustible.
Todos los propulsores cumplen con la normativa de emisiones Euro 6d-TEMP.
En los motores de seis cilindros se equipa un sistema eléctrico de 48V que se alimenta por una batería de iones de litio de 480 Wh también ubicada bajo el maletero. No es un sistema híbrido al uso, sólo funciona entre 55 y 160 km/h. Actúa como motor de arranque y como generador, ahorrando en torno a 0,7 l/100 km. Además, recupera hasta 12 kW en la deceleración.
Para la prueba me he decantado por el bloque de acceso gasolina, el 35 TFSI S-tronic. Hablamos de un bloque de aluminio longitudinal con cuatro cilindros que cuenta con 1.984 cm3 de cilindrada y recurre a la turboalimentación, la inyección directa y a un intercooler para proporcionar una potencia de 150 CV (110 kW) entre las 3.900 y las 6.000 rpm.
Todo ello viene acompañado de un par máximo de 270 Nm entre las 1.350 y las 3.900 vueltas, resultando así un motor suficientemente solvente como para cubrir las exigencias de la mayoría de los usuarios. Si bien con el 40 TFSI iremos más desahogados cuando viajemos con la familia y el equipaje, los 150 CV del 35 TFSI guardan gran equilibrio y razonables cifras.
Más concretamente, este motor lanza al Audi A4 hasta los 225 km/h, mientras que la aceleración de 0 a 100 km/h la puede completar en 8.9 segundos y el 80-120 km/h lo cubre en 6.1 segundos. Realmente, aunque empuja bien desde bajas vueltas y el cambio sube de marcha en torno a 1.900 rpm en una conducción tranquila, la fuerza la entrega a partir de las 3.000 rpm.
Sin ser escasa, la aceleración es muy lineal y no nos pegará al asiento. Además, el sonido de la mecánica no es especialmente agradable cuando pisamos a fondo el acelerador. En términos generales es un motor suave y de baja sonoridad que, a mi juicio, supera al anterior 1.5, pero no resulta tan refinado y gratificante como los seis cilindros del grupo.
El cambio S-tronic, ya conocido en la marca, siempre trata de ir en la marcha más alta y a las menores vueltas posibles, necesitando bajar varias marchas cuando aceleramos. Además, la respuesta a los golpes de acelerador no es inmediata. Eso sí, circulando a 120 km/h, el motor gira a 1.800 rpm en séptima velocidad y la calidad de rodadura en autopista es elevada.
La transmisión automática de doble embrague y siete relaciones es tan satisfactoria como en el resto de los modelos que la equipan, destacando por suavidad y rapidez, aunque no está enfocada ni mucho menos a un uso deportivo. Ofrece levas tras el volante y un modo secuencial en la palanca de cambios.
Respecto a los consumos, Audi declara 6.6 litros en ciclo combinado WLTP, pero el consumo urbano real ronda los 9.0 litros, bajando al entorno los 6.4 litros en carretera y deteniéndose en una media de 7.9 litros a los 100 kilómetros tras la semana de pruebas. El depósito de combustible tiene 54 litros de capacidad, lo que garantiza una buena autonomía.
Ficha técnica
Version | 35 TFSI - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 1.984 cm³ |
Potencia | 150 CV (110 kW) @ 3.900 - 6.000 rpm |
Par | 270 Nm @ 1.350 - 3.900 rpm |
Peso | 1.515 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.762 / 1.847/ 1.431 mm |
Volumen Maletero | 460 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 8,9 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 6,1 segundos |
Velocidad máxima | 225 km/h |
Consumo homologado | 6,6 / 9,4 - 6,8 - 5,7 - 6,2 l/100 km (Comb. / vel. baja - media - alta - muy alta) |
Emisiones CO2 por km | 149 g/km de CO₂ (Euro 6d-TEMP) |
Precio de partida | 40.610 euros (este motor y acabado sin descuentos ni extras) |
Comportamiento
El Audi A4 es uno de los sedanes de referencia por calidad de rodadura, tanto por su capacidad de filtrado sobre el asfalto como por su insonorización interior. Sin equipar una suspensión opcional me parece más confortable que un BMW Serie 3, pero también menos dinámico. Eso sí, guarda un mayor equilibrio en ambos aspectos que un Clase C o un Volvo S60.
La comodidad es algo que podríamos esperar en un sedán semejante, enfocado a los viajes por carretera, pero sorprenden los cambios de apoyo y la sutileza con la que se mueve, resultando notablemente seguro, estable y fácil de conducir incluso a un ritmo más elevado. No es divertido como un Serie 3 ni transmite sensaciones, pero sí una elevada confianza.
Pese a no ser compacto, el buen hacer de los ingenieros y los múltiples asistentes que podemos equipar nos permiten movernos con soltura por la ciudad. La dirección se siente cómoda en espacios más reducidos y es cómoda para maniobrar, aspecto que remata un diámetro de giro entre paredes de 11,6 metros. Cuenta con asistencia en función de la velocidad.
Fuera de la urbe, es una dirección que cumple con su función para un uso normal del vehículo, pero no es especialmente informativa. Aquellos que quieran un plus de deportividad y sensaciones pueden optar por la dirección dinámica dynamic steering, que mejora ligeramente en este sentido. La desmultiplicación es de 15,9.
Como os señalaba al compararlo con sus rivales, es una de los sedanes más equilibrados dinámicamente, aunque también es uno de los que me ha transmitido un tacto más artificial a la hora de conducirlo, especialmente a causa de la gran asistencia de la dirección. Es muy cómodo y lo hace todo bien, pero es un coche demasiado neutro en sensaciones.
Además, me ha parecido que la diferencia entre los diversos modos de conducción no es excesivamente apreciable. Sí que considero sobresaliente la suspensión de serie, que es capaz de filtrar muy eficazmente las irregularidades del asfalto y, a su vez, de contener de manera excelente los balanceos de la carrocería incluso circulando a buen ritmo.
Audi ofrece cuatro posibilidades para la suspensión. En la suspensión de serie se puede elegir entre dos tarados: el estándar y otro más firme (suspensión deportiva); al tiempo que están disponibles dos tipos de suspensión adaptativa, ambas con control de la amortiguación: la comfort (reduce la altura en 10 mm) y la deportiva (reduce la altura en 23 mm).
Respecto al equipo de frenado, hablamos de discos ventilados en el eje delantero y macizos en el trasero, con una asistencia más lograda que en otros modelos de la gama Audi. Resultan fáciles de dosificar y cómodos de manejar, pues los frenos no clavan el vehículo con solo rozar el pedal.
Por último y, respecto a los sistemas de asistencia a la conducción, estos se agrupan en paquetes -Tour, City y Aparcamiento-. El abanico es muy amplio, pudiendo encontrar varios niveles de pre sense, regulador de velocidad adaptativo con lector de señales y adaptación de la velocidad, sensor de ángulo muerto, asistente de mantenimiento de carril, asistente de aparcamiento…
Tampoco faltan el asistente de apertura de puertas, de arranque en pendiente y un sistema conectado con la centralita de gestión y regulación de los semáforos de la ciudad que da indicaciones al conductor para que adapte la velocidad y los pille en verde, con el objetivo de ahorrar combustible. En otros países indica cuánto queda para que cambie a verde al detenerse.
Equipamiento y precio
Los niveles de acabado para el Audi A4 2020 se denominan Advanced y S-Line. Todas las versiones cuentan de serie con elementos como el climatizador automático sencillo, sistema de navegación con pantalla de siete pulgadas, ordenador de viaje, control de velocidad, bluetooth, puerto USB, llantas de aleación de 17 pulgadas y asiento posterior abatible.
También en la dotación del modelo más básico se incluyen el volante multifunción en piel, sensores de aparcamiento traseros, faros LED, sensor de lluvia, encendido automático de luces, faros antiniebla, aviso pre-colisión, detector de fatiga y peatones, espejo interior fotosensible, cuatro elevalunas eléctricos, cierre centralizado con mando, arranque por botón…
La versión S-Line añade a lo anterior el paquete deportivo exterior con paragolpes específicos, climatizador automático de tres zonas, asientos deportivos, lector de señales de tráfico, sensores de aparcamiento delanteros, acceso sin llave, lavafaros, llantas de aleación de 18 pulgadas y suspensión deportiva, entre otros.
En España, los precios recomendados para la gama del Audi A4 berlina 2020 sin descuentos ni promociones son los siguientes:
Motor | Advanced | S-Line |
35 TFSI 150 CV 6MT | 37.910 € | 41.310 € |
35 TFSI 150 CV S-Tronic | 40.610 € | 44.010 € |
40 TFSI 190 CV S-Tronic | 43.510 € | 46.910 € |
45 TFSI 245 CV S-Tronic quattro-ultra | 51.240 € | 54.640 € |
30 TDI 136 CV S-Tronic | 41.010 € | 44.410 € |
35 TDI 190 CV S-Tronic | 42.410 € | 45.810 € |
40 TDI 190 CV S-Tronic | 43.810 € | 47.210 € |
40 TDI 190 CV S-Tronic quattro | – | 49.840 € |
S4 TDI 347 CV quattro tiptronic | 75.340 € |
- Rediseño acertado para mantenerse al día.
- Su calidad y presentación son de lo mejor de la categoría.
- Sistema mild-hybridde 12V que permite reducir los consumos y beneficiarte de la pegatina ECO.
- Buen nivel de potencia con consumos razonables. Guarda gran equilibrio.
- Gran calidad de rodadura y excelente insonorización, especialmente la opcional.
- Pantalla del salpicadero bastante “pegote”, podría estar mejor integrada.
- Mecánica algo ruidosa al revolucionarla para adelantar.
- Precio elevado, especialmente el de los opcionales, aunque frente a sus rivales está en una posición intermedia.
- Demasiado neutro en sensaciones, tiene una conducción artificial porque es demasiado perfecto en todo.