El nuevo BMW Serie 1 continúa la historia de éxito escrita por las dos primeras generaciones de este automóvil y ya hemos tenido la oportunidad de probar a fondo su buque insignia, el M135 xDrive. Recordemos que corría el año 2004 cuando BMW introdujo por primera vez en el segmento premium compacto las cualidades dinámicas propias de la marca y un elegante diseño deportivo.
Fue todo un éxito, con 1.106.131 unidades vendidas en todo el mundo. La segunda generación, lanzada en 2011, destacó por nuevos y frescos rasgos, con una imagen más poderosa en la parte frontal, los flancos y la zaga. Además, en 2015, ganó una presencia aún más llamativa y obtuvo una gran aceptación, especialmente en Europa.
En total, 2.490.803 ejemplares vendidos, 132.000 de los cuales en nuestro país. En la tercera entrega, lanzada en 2019, el modelo abandonó la propulsión con su nueva plataforma para ser todavía más polivalente. Ahora se renueva -pese a que en BMW nos hablan de una cuarta generación (F70)- dándole una vuelta de tuerca a sus excelentes cualidades.
Cambian el diseño, las dimensiones, el equipamiento y los motores. Estos pueden ser gasolina y diésel con hasta 300 CV. Gracias a ello, se pone al día para seguir plantando cara a rivales como los Mercedes-Benz Clase A, Audi A3 o Volkswagen Golf. Por precio, el Serie 1 está en una posición intermedia en este cuarteto. El compacto de la firma de la estrella es el más caro de todos.
Diseño exterior
El aura deportiva del Serie 1 se acentúa en su última entrega con las proporciones típicas de BMW: un largo capó, un habitáculo muy retrasado, una línea del techo que fluye dinámicamente y una poderosa zaga. En términos generales, luce un diseño exterior claro y definido, protagonizado por una estética atlética y un diseño de superficies lisas.
Vemos un frontal distintivo con amplias tomas de aire. La parrilla del radiador rediseñada tiene contornos planos. Por primera vez, presenta una estructura de barras verticales y diagonales, salvo en el M135 xDrive, que son horizontales. No menos interesantes son los nuevos faros LED. Albergan elementos verticales y ligeramente en forma de flecha como luces diurnas e intermitentes.
Los faros LED adaptativos con luz de carretera matricial, función de luz de giro y acentos azules están disponibles según acabado. En este tope de gama son de serie. Por encima, el renovado capó es más musculoso gracias a nuevos nervios; mientras que la luna delantera nos brinda una buena visibilidad. La vista lateral también tiene características propias de BMW, como la dinámica forma de cuña y los gráficos planos de las ventanillas.
Estos se estrechan hacia atrás, proporcionando gran dinamismo. La Shadow Line de serie incluye un elemento gráfico con el ‘1’ en la zona Hofmeister, en el montante C. La superficie de las puertas queda limpia de ornamentaciones y el área acristalada es amplia. Podemos equipar llantas de 17 a 19 pulgadas. El M135 xDrive calza unas gomas GoodYear Eagle F1 en dimensiones 235/40 R19 96Y en ambos ejes.
El coeficiente aerodinámico se reduce en la nueva entrega a Cx 0,27. Para la carrocería encontramos un total de 13 colores. Los tonos son más bien clásicos y hay acabados sólido y metalizado. El techo puede ir en color negro y también se ofrece el catálogo de pinturas de BMW Individual. En esta unidad podemos ver el Alpine White solid que no tiene sobrecoste.
Por otra parte, las dimensiones del modelo de cinco puertas sólo han cambiado ligeramente en comparación con su predecesor. Alcanza los 4.36 metros de largo (+42 mm), 1.80 metros de ancho y 1.46 metros de alto (+25 mm). La distancia entre ejes es de 2.670 milímetros. Los anchos de vía delantero y trasero miden 1.561 mm y 1.562 mm, respectivamente.
Pasando a la poderosa zaga, las superficies generosas y las líneas horizontales acentúan su anchura. Las luces LED en dos partes se extienden hasta los laterales. El faldón trasero distintivo cuenta con reflectores verticales y un difusor negro. Los tubos de escape van integrados de forma invisible, salvo en la versión más potente de la gama. Sobre el techo tenemos una antena de tipo aleta de tiburón y podemos equipar techo solar panorámico.
Opciones destacadas para el exterior según acabado son las molduras M, las pinzas de freno en rojo, gris o azul, el alerón M, los faros en negro, el paquete de retrovisores, los cristales tintados, el acceso confort y el enganche de remolque. En suma, tenemos un amplio catálogo de accesorios M performance como los que equipa esta unidad: faldones laterales, elementos en fibra de carbono, un alerón más provocativo, vinilos…
Diseño interior
En el habitáculo nos encontramos con una moderna interpretación del diseño del puesto de conducción con pantalla curva BMW (BMW Curved Display). También vemos un nuevo selector de marchas en la consola central. Las superficies acolchadas son abundantes, tanto en las partes altas como en aquellas menos visibles. Las costuras M decoran el salpicadero del M135 xDrive.
Asimismo, se ha cuidado el tacto y la apariencia de materiales y ajustes. Solo hay un par de detalles que no me han gustado en este sentido: el área de la palanca de cambios, con controles plásticos que dan un aspecto más frío y rígido; y los botones para ajustar las salidas de ventilación, que son pequeños y de un tacto gomoso. Por lo demás, la marca ha hecho un gran trabajo.
El nuevo lenguaje de diseño interior se caracteriza por una clara disposición de las superficies, diseñadas para acentuar la amplitud. Además, vemos detalles interesantes, como las molduras interiores retroiluminadas; así como prácticos espacios para el almacenamiento de buen tamaño. En opción, podemos mejorar el estilo con diversos accesorios M Performance, como en el exterior.
El puesto de conducción queda orientado al conductor; al tiempo que la disposición y forma del asiento del conductor permite que encontremos fácilmente la posición deseada. Cabe destacar que los asientos delanteros y traseros presumen de un nuevo diseño. Tenemos asientos deportivos y asientos deportivos M con reposacabezas integrados y logo iluminado, como los que vemos en esta unidad.
Entre las funcionalidades que pueden equipar están la calefacción en las plazas delanteras (de serie), ajuste eléctrico, apoyo lumbar y función de masaje. Tampoco falta el nuevo airbag de interacción para conductor y pasajero. Respecto a los tapizados, no encontramos cuero de serie. En su lugar tenemos una nueva tapicería Econeer. Ofrece buen aspecto y tacto en términos generales.
Está fabricada con PET reciclado en un diseño bicolor. Como puedes ver, luce costuras de contraste para los asientos deportivos opcionales. A juego pueden ir los cinturones. Asimismo, vemos un nuevo volante deportivo de serie. En opción se mantienen el volante de cuero M con levas de cambio y la calefacción para este. Por otra parte, la digitalización reduce el número de botones y mandos.
Los controles del climatizador pasan a integrarse en la pantalla.
Encontramos un sistema de visualización totalmente digital compuesto por un cuadro de instrumentos de 10,25 pulgadas y una pantalla central de 10,7 pulgadas. Incluye la última generación del sistema operativo de la marca, el BMW iDrive 9.0. Es un sistema de mucha calidad, por gráficos, fluidez, respuesta táctil y resolución. Sin embargo, tiene mucha información.
Su uso no es especialmente intuitivo por la cantidad de funcionalidades que aglutina y su estructuración. En cualquier caso, no es un problema para un propietario que se familiarice con él. Incluye MyModes, nueva interfaz, servicios BMW ConnectedDrive, actualizaciones OTA, 5G, Apple CarPlay y Android Auto sin cables, comunicación con la app MyBMW…
El techo puede ir en Antracita y los cinturones con los colores ‘M’.
Algunos opcionales interesantes son la carga inalámbrica para el smartphone y el BMW Live Cockpit Professional. Estas pantallas pueden combinarse con un Head-Up Display de gran tamaño y excelente resolución. La instrumentación, por su parte, puede personalizarse con múltiples vistas y contenidos de forma sencilla. Por ejemplo, duplica la navegación en Waze.
En términos de espacio y habitabilidad hay pocos cambios. Delante hay buen espacio, aunque los cinturones siguen sin ofrecer ajuste en altura. En la segunda fila tenemos buena altura y anchura para que dos adultos de 1,85 metros viajen cómodamente. No destaca en cotas, pero sí que se encuentra en la media del segmento por espacio interior.
También es bueno el acceso, aunque el grado de apertura de puertas no llega a ser todo lo cómodo que nos gustaría para personas de gran estatura o para colocar sillas de bebé en las plazas posteriores. En la plaza central el mullido es muy duro, la altura más reducida y el túnel central muy prominente. Hay salidas de ventilación, toma de 12V y tomas USB-C.
La curva Hofmeister en la puerta tiene cierto peligro al abrir si vas despistado.
El maletero cubica 380 litros, que pueden ampliarse abatiendo la segunda fila (40:20:40 opcional). En este caso, alcanza los 1.200 litros. Es de los más amplios del segmento y cuenta con un doble fondo en el que podemos equipar una rueda de repuesto de emergencia. Los BMW 120 y BMW 120d tienen un maletero de 300 a 1.135 litros.
El portón puede ser eléctrico (de serie en M135 xDrive) y deja una boca de carga bastante amplia. Hay algunas funcionalidades como ganchos y argollas, perchas, bolsas laterales e iluminación. Su tapizado es muy bueno y la altura del borde de carga queda algo elevada. Concretamente, a 700 mm del suelo. En opción disponemos de una red de separación.
Gama mecánica BMW Serie 1
El lanzamiento al mercado arranca con cinco alternativas. Tenemos motores de gasolina y diésel de tres y cuatro cilindros, respectivamente. En esta tabla puedes ver de manera sencilla todas ellas:
Modelo | Potencia | Distintivo ambiental |
116 | 122 CV / 90 kW | C |
120 | 170 CV / 120 kW | ECO |
118d | 150 CV / 110 kW | C |
120d | 163 CV / 120 kW | ECO |
M135 xDrive | 300 CV / 221 kW | C |
Como puedes comprobar, solo los BMW 120 y BMW 120d cuentan con tecnología mild hybrid de 48 voltios, y es una pena. Todos los motores van combinados con un cambio Steptronic de 7 velocidades con doble embrague. En la cúspide de la gama tenemos el BMW M135 xDrive que hemos probado. Equipa un nuevo motor de gasolina de cuatro cilindros y 2.0 litros.
Desarrolla 300 CV (221 kW) y 400 Nm de par, seis caballos menos que antes, aunque sigue siendo una auténtica bomba de relojería. En combinación con la mencionada caja Steptronic de 7 velocidades con doble embrague, completa el 0 a 100 km/h en 4,9 segundos. La velocidad punta está limitada electrónicamente a 250 km/h y recupera de 80 a 120 km/h en 3,5 segundos.
A su rapidez de respuesta hemos de añadirle un empuje muy contundente, capaz de pegarnos al asiento si pisamos a fondo. Esto permite no solo disfrutar al volante, sino también completar adelantamientos en muy breve espacio de tiempo. En suma, la leva izquierda cuenta con la función boost si la mantenemos pulsada. Con ello, reduce varias marchas de golpe.
Los modos de conducción son, por desgracia, los ya vistos en la nueva hornada de productos BMW. Resultan algo confusos y varían un amplio elenco de parámetros del vehículo. Por suerte, el modo Sport es fácilmente reconocible y el que más vas a disfrutar, tanto por prestaciones como por sonido de la mecánica. En él se acentúa el rugido del motor al acelerar, pero también al cambiar de marcha.
Si bien es una delicia, no es tan marcado como los que encontramos, por ejemplo, en un AMG. En cualquier caso, este M135 nos parece un conjunto muy equilibrado para quienes busquen altas dosis de potencia y diversión. Con una estética como la de esta unidad, tendrás un coche que te apetecerá mirar y conducir cada día. Todo ello con unos consumos bastante racionales.
No es el más eficiente de la gama, pero BMW homologa un consumo combinado WLTP de 7,6 l/100 km. Tras la semana de pruebas, nosotros hemos obtenido una media de 8,2 l/100 km conduciendo en todo tipo de escenarios. Lógicamente, cuanta más caña le des, más difícil te resultará bajar del entorno de los 10 l/100 km. Viajando tranquilo, puedes rondar los 7,5 l/100 km.
Version | M135 xDrive - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 1.998 cm³ |
Potencia | 300 CV (221 kW) @ 5.750 - 6.500 rpm |
Par | 400 Nm @ 2.000 - 4.500 rpm |
Peso | 1.625 kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.361 / 1.800 / 1.459 mm |
Volumen Maletero | 380 (1.200) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 4,9 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 3,5 segundos |
Velocidad máxima | 250 km/h |
Consumo homologado | 7,6 l/100 km |
Emisiones CO2 por km | 173 g/km |
Pegatina de la DGT | C |
Precio de partida | 61.950 euros (este motor y acabado sin descuentos ni extras) |
Comportamiento BMW Serie 1
El renovado BMW Serie 1 quiere seguir siendo un modelo destacable por las sensaciones que aporta al conducirlo. Especialmente este. M135 xDrive. Por ese motivo, los ingenieros de la marca han introducido algunas mejoras que perfeccionan su comportamiento. Por ejemplo, BMW nos habla de una mayor rigidez de la estructura de la carrocería y de la conexión del chasis.
El tren de rodaje de serie también cuenta con una cinemática optimizada y barras estabilizadoras de alta pretensión. La nueva tecnología de amortiguación optimiza la precisión de la dirección, el dinamismo en curvas y el confort de marcha. Otras novedades en la gama pasan por la limitación directa del patinaje de las ruedas.
Por su parte, el chasis M adaptativo opcional (de serie en este M135 xDrive) cuenta con amortiguadores de frecuencia selectiva, dirección deportiva y altura de conducción rebajada. El resultado de todo ello es un compacto un poco firme para el día a día, con cierta brusquedad en resaltos urbanos, pero capaz de sacarnos sonrisas durante el fin de semana en tramos de curvas.
Es cierto que el tacto de conducción ya no es tan natural como antaño. Pese a ello, sigue siendo uno de los mejores compactos (si no el mejor) que puedes comprar si buscas un plus de dinamismo y diversión al volante. No es un deportivo puro, ni siquiera en esta versión, pero sí que supera en este sentido a sus rivales de una manera clara. A cambio, es también más firme que estos.
La suspensión de serie la compone un esquema McPherson en el eje delantero y multibrazo trasero. Su tarado filtra de forma adecuada las irregularidades del asfalto en la mayoría de las situaciones. Con todo y con eso, es algo menos confortable que las del Grupo VAG y Mercedes-Benz. En los movimientos rápidos de las ruedas es donde más lo sacudida notarás.
En conjunto, resulta menos cómodo que otras opciones premium como un Audi A3 o un Volkswagen Golf. Ambos guardan un mayor equilibrio entre confort y dinamismo, mientras que el Serie 1 apuesta más por lo segundo. Sí quieres un plus en términos de suspensiones, el mencionado chasis M adaptativo te ofrece los amortiguadores de frecuencia selectiva.
Estos cuentan con una válvula en su interior que está calibrada para abrirse y dejar pasar más flujo de aceite ante baches fuertes. Gracias a ello, resultan algo más suaves y hacen al coche ligeramente más cómodo. Por el contrario, cuando el asfalto está en buen estado, la válvula permanece cerrada y ofrecen mayor firmeza para contener los movimientos de la carrocería.
En el chasis M también se incluye también la dirección deportiva. De serie tenemos asistencia en función de la velocidad y una desmultiplicación de 15,3. En general, el Serie 1 ofrece un tacto de dirección muy agradable y preciso tanto para maniobrar en espacios estrechos como para conducir en tramos revirados. La dirección opcional va un paso más allá y es de serie en el M135 xDrive.
Suma un extra de rapidez, precisión y firmeza a la ecuación. En otras palabras, mejoran todavía más las cualidades deportivas del compacto. Como he comentado, para mí la única pega es el exceso de asistencia actual. Ya no aporta un tacto tan natural ni tanto retorno de información como lo hacía antaño. Dicho de otra forma, ya no nos involucra tanto en la conducción.
El M135 xDrive probado, a nivel dinámico, es un coche que no admite tacha para lo que hay hoy en día en el mercado. El eje delantero muestra un gran aplomo cuando enlazamos curvas, lo que nos permite afinar la trayectoria a velocidades elevadas con buena precisión y estabilidad. Y siempre obteniendo reacciones nobles y seguras, que es un detalle muy importante.
Pero no todo van a ser curvas y hacer el cabra. En autopista también muestra un gran empaque. La insonorización es realmente buena y, la calidad de rodadura, también, pese al gran tamaño de llanta y salvo los detalles mencionados en cuanto a la suspensión. En este ámbito está más a la par con el Audi A3. Lo mismo ocurre en la urbe en cuanto a maniobrabilidad y visibilidad.
El BMW Serie 1 nos brinda un diámetro de giro entre paredes de 11,7 metros y una visibilidad correcta en todos los ángulos. Adicionalmente, incluye numerosos sistemas de asistencia y seguridad, ya sea de serie u opcionalmente. En cualquier caso, por dimensiones no es un coche complicado para el tráfico diario o los aparcamientos más estrechos.
En cuanto a los frenos, estos gozan de gran resistencia y eficacia en todas las versiones. Sí que es cierto que, en un primer momento, su asistencia requiere que les pillemos el tranquillo para no quedarnos ni cortos ni largos de frenada. Los frenos deportivos M incluyen discos autoventilados, así como pinzas fijas delanteras de cuatro pistones y traseras deslizantes de uno.
Son de serie en el M135 xDrive y su funcionamiento es soberbio cuando vas buscando los límites del coche. Eso sí, personalmente creo que no son necesarios para la conducción habitual del resto de los Serie 1 que tienen potencias más racionales. Únicamente si tienes pensado darle mucha caña o quieres tener las pinzas de freno en otro color deberías apostar por este opcional.
Por último y, en materia de asistencias a la conducción y de seguridad, tenemos una dotación mejorada. Algunos de los elementos de serie con el aviso de colisión frontal, aviso de cambio involuntario de carril, aviso de salida del carril, reconocimiento de señales de tráfico con aviso de velocidad y Parking Assistant con asistente de marcha atrás.
En opción podemos sumar asistente de dirección y control de carril, control de crucero activo con función de Stop & Go, asistente automático de límite de velocidad y asistente activo de cambio de carril. El Parking Assistant Professional permite controlar el aparcamiento y las maniobras desde fuera del vehículo mediante un smartphone.
Equipamiento y precio
Entre el equipamiento de serie para España podemos encontrar la caja automática Steptronic, llantas de aleación de 17 pulgadas; faros LED, volante deportivo en piel, elevalunas y espejos eléctricos, arranque por botón, asiento trasero con acceso al meletero, climatizador bizona, paquete iluminación, DAB+, paquete iluminación…
También son de serie algunos asistentes a la conducción como el sensor de lluvia y luces, control de crucero, sensores de aparcamiento perimetrales, aparcamiento asistido, sistema Active Guard Plus, llamada de emergencia inteligente, BMW Individual Shadow Line, cuadro de instrumentos de 10,25 pulgadas y una pantalla central de 10,7 pulgadas, entre otros.
Como es habitual en BMW, se ofrecen varias líneas de equipamiento que aumentan la dotación a un precio más atractivo. En el nuevo Serie 1 se denominan M Sport Design, Paquete M Sport y Paquete M Sport Pro. Con estos paquetes se cambia incluso el enfoque del vehículo, mejorando considerablemente el impacto visual.
Igualmente, aquellos que quieran dotar al compacto de un aspecto realmente radical pueden optar por los accesorios de M Performance Parts. Algunos elementos mejoran incluso el rendimiento. También podemos recurrir al extenso listado de opcionales de los que hace gala el modelo, aunque cuidado con las cifras que puede alcanzar la factura final.
Se ofrecen dos paquetes de equipamiento muy completos: Premium e Innovation.
En España, los precios de la gama del BMW Serie 1 2025 sin descuentos ni promociones son los siguientes:
Modelo | Potencia | Precio |
116 | 122 CV / 90 kW | 34.650 euros |
120 | 170 CV / 120 kW | 41.150 euros |
118d | 150 CV / 110 kW | 39.650 euros |
120d | 163 CV / 120 kW | 41.450 euros |
M135 xDrive | 300 CV / 221 kW | 61.950 euros |
Diseño/Estética
Calidad de acabados
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8.1
Notable+
El BMW Serie 1 cambia radicalmente su diseño para atraer a un mayor volumen de público, al tiempo que adopta un interior mucho más moderno y tecnológico con altos niveles de calidad, un equipamiento más completo y mayores dosis de espacio. Se ofrece con mecánicas diésel y gasolina de hasta 306 CV y un precio algo elevado, aunque en la línea de sus principales rivales.
Lo bueno
- Buena sensación de calidad y ajustes, aunque era más vistoso su predecesor.
- Sistema de infoentretenimiento realmente avanzado y con un asistente de voz muy bueno. Duplica Waze en la instrumentación, pocos coches lo hacen.
- Fuerte carga tecnológica en materia de asistencias a la conducción y de seguridad.
- Amplias posibilidades de equipamiento.
- Generoso maletero, de los mejores del segmento.
- Excelente dinámica de conducción con una buena calidad de rodadura e insonorización.
Lo mejorable
- Solo dos mecánicas con distintivo ambiental ECO.
- Precio elevado, el del modelo y el de los opcionales.
- Excesiva digitalización con un sistema multimedia que puede mejorar en estructuración de menús, tiene mucha información.
- Ciertas lagunas de equipamiento.
- Algunos detalles de acabado no terminan de convencer.
- En esta generación perdió gran parte de su esencia.