Prueba BMW 330i Berlina 258 CV M-Sport 2019: Te apetecerá conducirlo a todas horas

Durante más de 40 años, BMW y su Serie 3 han simbolizado lo que la marca ha tratado como el «placer de conducir». Del trío alemán, el Serie 3 siempre se ha caracterizado por ser el más dinámico, mientras que Audi apuntaba hacia el equilibrio y la perfección con el A4 y Mercedes-Benz hacia el confort y el refinamiento con el Clase C. Y eso es algo que se mantiene hoy.

La berlina no solo representa el núcleo de la gama BMW Serie 3, de la que se han vendido más de 15 millones de unidades en todo el mundo, sino también el latido de la marca BMW. Disponible como sedán y con carrocería familiar Touring, el modelo se fabrica en la planta de Múnich, el corazón de la compañía, desde su primera generación (1975).

En 2019, la nueva Serie 3 de BMW Se presenta en el mercado totalmente renovada, con un diseño dinámico, reacciones ágiles, eficiencia excepcional e innovadores equipamientos. Es una gran muestra de lo que la firma bávara es capaz de hacer y, como es habitual, tiene algunas particularidades que cada uno debe juzgar si se tratan de defectos o de virtudes.

Es innegable que BMW ha hecho un excelente trabajo y gracias a ello ha nacido un nuevo Serie 3 que roza la excelencia en muchos puntos. La dinámica y la puesta a punto son sus puntos fuertes, seguidos de los acabados, ajustes y la calidad de su equipamiento, tanto opcional como de serie. Sin embargo, llega la pregunta del millón: ¿Es realmente lo que esperábamos?

Diseño exterior

El diseño exterior del nuevo BMW Serie 3 combina líneas precisas y superficies contorneadas para crear una moderna interpretación de la estética deportiva. Su nuevo lenguaje de diseño es un claro escaparate del carácter dinámico del coche, así como una adaptación del actual ADN de BMW a uno de sus modelos más vendidos en todo el mundo.

El frontal muestra una imagen ancha y baja. Los grandes riñones de BMW están enmarcados por un simple contorno, divididos por amplias barras y conectados a los faros. Aunque hemos criticado enérgicamente la introducción de las nuevas y desmesuradas calandras en otros modelos de BMW, lo cierto es que al nuevo Serie 3 le quedan como anillo al dedo.

Los faros full LED son de serie y, opcionalmente, se puede disponer de funciones adicionales y luces LED diurnas en forma de U -1.184€-. También son opcionales los faros Adaptive LED con dispositivo BMW Laserlight -2.367€- como los de esta unidad, con anillos lumínicos de luz diurna y elementos azules en L en los faros. Alumbran hasta 530 metros de distancia.

LEE TAMBIÉN

Prueba BMW X2 sDrive18d: una alternativa solvente con excelentes consumos

En la parte central de los nuevos riñones podemos apreciar una de las cámaras del sistema de visión 360 grados -1.243€- con un sofisticado software. El Park View, el Panorama View y el 3D Top View que lo componen se usan para crear una imagen de 360° del vehículo y su entorno, desde distintas perspectivas, que se muestra en el Control Display.

Por su parte, la función Remote 3D View ofrece a los conductores la capacidad de ver en sus smartphones una imagen tridimensional y en directo del coche y su entorno próximo. En este punto sólo podemos decir que es un equipo impresionante por funcionalidad y utilidad. La calidad es mayúscula y la precisión sobresaliente, resultando muy recomendable.

Otro extra muy curioso es el Asistente de Marcha Atrás, que almacena los movimientos del coche hacia adelante, a una velocidad no superior a 36 km/h. Gracias a ello, el sistema es capaz de dar marcha atrás al vehículo a una velocidad máxima de 9 km/h y hasta una distancia de 50 metros, exactamente en la misma línea que cuando el coche se movió hacia adelante.

Lo único que debe hacer el conductor es controlar el acelerador, el freno y vigilar el área alrededor del coche. Si el sistema de cámaras 360 grados nos cautivó, esto ya directamente nos deja perplejos. Resulta extremadamente sofisticado y muy útil para aquellos que suelen circular por estrechos aparcamientos o deben deshacer sus maniobras de forma habitual.

En la parte inferior del frontal nos encontramos con parte de los sensores de aparcamiento perimetrales -651€, pero de serie delanteros y traseros-, una generosa entrada de aire horizontal en negro brillante y la superficie del sistema frontal de radar. A ambos extremos encontraremos los aerodinámicos Air Curtains, así como los faros antiniebla LED -249€-.

El capó alargado, la larga distancia entre ejes, los cortos voladizos y la elegante línea del techo acentúan su dinámico perfil cuando se ve el coche de costado. Como todo BMW, el habitáculo está desplazado ligeramente hacia atrás y un par de líneas de carácter, que ascienden hacia la zaga del coche a la altura de las manillas de puerta, refuerzan esa sensación.

Otro rasgo destacado y con un nuevo look es la curva Hofmeister, el familiar trazo que remata en redondo el perfil de las ventanillas traseras. Marca de identidad de BMW, este elemento se integra ahora en el pilar C, dando un aspecto ‘flotante’ a las ventanillas de las puertas posteriores. Lo cierto es que la superficie acristalada es generosa y ofrece buena visibilidad.

El nuevo BMW Serie 3 alcanza los 4.71 metros de largo (+85 mm), 1.83 metros de ancho (+16 mm) y 1.44 metros de alto (+1 mm), dándole unas proporciones dinámicamente alargadas y un aspecto muscular. Gana 41 mm de distancia entre ejes (2.851 mm) y vías de mayor anchura (+43 mm delante y +21 mm atrás), hasta alcanzar los 1.589 y 1.604 mm, respectivamente.

Podemos equipar lunas oscurecidas -473€- y retrovisores en color negro -130€-

Las vías más anchas tienen una influencia positiva y directa en su aplomo y agilidad, al tiempo que la aerodinámica se ha mejorado hasta lograr un C_x de 0,24 en esta versión (0.23 en el BMW 320d), un factor de resistencia de 0,53 y una superficie frontal 2,22 m². Además, el peso del conjunto se ha reducido en un máximo de 55 kilogramos respecto a su predecesor.

LEE TAMBIÉN

G-Power G3M CS Bi-Turbo: el BMW M3 CS con las cifras del nuevo M5

Los abultados pasos de rueda de esta unidad cuentan con unas llantas de aleación de radios dobles y acabado cepillado -1.988€- que van calzadas con unos deportivos neumáticos Michelin Pilot Sport 4S de excepcional agarre. Estos tienen unas dimensiones de 255/40 R19 93Y en el eje delantero y de 255/35 R19 96Y en el eje trasero. Son neumáticos runflat.

En la zaga, los contornos de las superficies se extienden en un movimiento ascendente a través de las ópticas traseras hacia el resalte posterior de la tapa de maletero, que sirve de spoiler, dando a la zaga un aspecto musculoso. A esto se añaden las líneas horizontales y los pilotos, elegantemente oscurecidos, que alojan las luces traseras Full LED con forma de L.

En la parte superior del musculoso paragolpes se ubican los catadióptricos, que dan paso a unas marcadas líneas, dos embellecedores que imitan el diseño de unas salidas de aire y un prominente difusor de color negro que integra dos salidas de escape redondas con un diámetro de 90 milímetros.

Son opcionales destacados para el exterior el acceso manos libres -710€-, el asistente para luces de carretera -189€- y el spoiler trasero M -237€-. Los detalles del exterior pueden ir en aluminio satinado, negro brillante o negro brillante (Shadow Line) con contenido ampliado -209€-.

Diseño interior

El interior es uno de los aspectos más cuidados del BMW Serie 3, suponiendo un verdadero paso adelante respecto a la generación anterior. Las superficies acolchadas son abundantes, tanto en las partes altas como en aquellas menos visibles, al tiempo que se ha cuidado el tacto y la apariencia de materiales y ajustes.

Solo hay un detalle que no me ha gustado en este sentido y es el área de la palanca de cambios, con controles plásticos que, si bien cuentan con un buen ajuste y tacto, en mi opinión desmerecen un gran conjunto como este por su aspecto frío y rígido. Lo mismo ocurre con la palanca de cambios ¿Dónde está aquél bonito y ergonómico joystick?

Por lo demás, la marca ha hecho un gran trabajo y el nuevo lenguaje de diseño interior se caracteriza por una clara disposición de las superficies, diseñadas para acentuar la amplitud. Indudablemente el BMW Serie 3 2019 es un referente en calidad interior y ajustes, quedando por encima del Mercedes-Benz Clase C o el Volvo S60 en este aspecto.

El puesto de conducción queda orientado al conductor, al tiempo que la disposición y forma del cómodo y deportivo asiento permite que encontremos fácilmente la posición deseada. Opcionalmente hay asientos deportivos -651- y asientos M (M-Sport), pudiendo todos ellos equiparse con ajuste eléctrico y memoria -1.420€-, soporte lumbar -296€- y calefacción -899€-.

LEE TAMBIÉN

¿Adiós al BMW X3 M en esta generación? Todo apunta a un nuevo BMW iX3 M

Destacan detalles como que el asiento se sitúe en una posición más baja que en sus rivales. En conjunto, la posición del volante (cerca de la vertical) y los pedales (más bien alejados), así como la altura y el agarre del asiento (ofrece regulación que varía la anchura del respaldo), ofrecen una postura de conducción más deportiva que distingue al Serie 3 de otras berlinas.

Los cinturones no tienen posibilidad de ajuste en altura, un hándicap para las personas de menor estatura.

Las manos se posan cómodamente sobre un grueso volante multifunción de suave cuero extremadamente agradable al tacto, un signo característico de BMW que, personalmente, me encanta. Puede ser calefactado -296€- y se ofrecen un volante deportivo M -260€- y otro Individual -201€-. Tampoco falta en esta unidad un recomendable Head-Up display -1.032€-.

Este incluye la velocidad del coche, los límites de velocidad, la prohibición de adelantar, los mensajes del Check Control, los indicadores de estado, avisos de los sistemas de asistencia, información detallada de la ruta, instrucciones del navegador, listas de teléfono y del sistema de entretenimiento. Su superficie es de 9.2 pulgadas, un tamaño muy generoso.

Respecto al cuadro de instrumentos, encontramos dos tipos: una pantalla digital de 5.7 pulgadas el Live Cockpit Professional -3.255€- con pantalla de 10,25 pulgadas que vemos en esta unidad. Este último es más atractivo, ofrece gran visibilidad y excelente resolución, pero no alcanza en ningún caso el nivel del Audi Virtual Cockpit, mucho más completo e intuitivo.

El salpicadero tiene un aire moderno y ligero. Los acabados más sencillos cuentan con un sistema multimedia con pantallas de 6.5 y 8.8 pulgadas, pero esta unidad equipa el sistema superior, con pantalla de 10.3 pulgadas -3.255€-, control por gestos -355€-, asistente personal, 4G, servicios conectados, radio digital (DAB) -285€-, equipo de sonido Harman Kardon -1.065€-…

En este caso, el sistema de infoentretenimiento es muy superior al de Audi y el asistente de voz mucho menos intrusivo que el de Mercedes-Benz, que parece escuchar y analizar hasta cuando te rascas la cabeza. Recordemos que BMW ya ofrece preparación tanto para Apple CarPlay -237€-, que puede ser incluso inalámbrico; como para Android Auto.

Las salidas de ventilación cuentan con un display monocromo central que nos ofrece la información necesaria del climatizador trizona. Es cierto que la botonera ubicada bajo las salidas de ventilación podría ofrecer un mejor acabado, ya que da la misma sensación fría que la zona de la palanca de cambios, además de presentar algunos controles un poco pequeños.

Me ha agradado que BMW haya mejorado el espacio de almacenamiento. Junto a la tradicional guantera y el espacio de almacenaje bajo el reposabrazos central, hay también una bandeja por delante de la palanca de cambios con carga inalámbrica -533€-, amplias bolsas rígidas en las puertas (sin base forrada) y un compartimento adicional en el lado del conductor.

LEE TAMBIÉN

BMW te da un curso de conducción evasiva de vehículos blindados

La iluminación estándar del habitáculo del nuevo BMW Serie 3 está compuesta enteramente por LED. Incluye las luces de lectura en las plazas delanteras y traseras, así como la iluminación de la guantera, el espacio bajo el reposabrazos central, la zona de los pies, los espejos de cortesía y el maletero, además de las luces de cortesía en las puertas.

La luz ambiente opcional -438€- produce una exquisita iluminación del habitáculo, que se puede ajustar según se desee. La luz indirecta adicional que recorre el salpicadero y los paneles de las puertas utiliza luz de LED con guías de fibra óptica situadas de forma precisa para crear una atmósfera dinámica y exclusiva.

Respecto a la habitabilidad, crece sensiblemente en cotas, situándose en una posición ventajosa en el segmento, salvo en anchura, donde sobresale el Volvo S60. Con ello ofrece buena altura y anchura para que dos adultos de más de 1,80 metros viajen cómodamente detrás, siendo especialmente notables los centímetros adicionales para las rodillas.

También mejora el acceso, aunque no llega a ser todo lo cómodo que nos gustaría para personas de gran estatura o para colocar sillitas de bebé en las plazas posteriores. En la plaza central el mullido es muy duro, la altura más reducida y el túnel central muy prominente. En él encontramos salidas de ventilación, control del clima, toma de 12V y dos tomas USB-C.

Por último, el maletero cubica 480 litros de capacidad, aunque si abatimos los asientos – 40:20:40- podemos obtener unos cuantos litros adicionales (BMW no ha facilitado el dato). Con la nueva partición entre el espacio de carga principal y los compartimentos separados se han creado 36 litros adicionales de capacidad para alojar objetos pequeños.

El maletero es justo y queda por detrás de una gran mayoría de rivales (generalistas o premium).

También cuenta con un doble fondo en el que podemos equipar una rueda de repuesto de emergencia -414€-. El paquete de compartimentos para el maletero añade elementos como áreas de carga extras, redes divisorias para ambos lados del maletero, ganchos para bolsas y una toma de 12V en el maletero, lo cual resulta muy útil a la hora de viajar.

Motorización

La oferta mecánica del BMW Serie 3 es realmente extensa, contemplando opciones gasolina, diésel e incluso un híbrido-enchufable. El abanico de potencias va desde los 150 CV hasta los 374 CV, resultando en todos los casos cifras más que suficientes para mover con soltura el modelo. En esta tabla podéis ver todas las opciones mecánicas disponibles:

LEE TAMBIÉN

BMW Serie 3 2024: sutiles mejoras para lograr un producto más redondo

Para la prueba me he decantado por la opción intermedia en la rama de los gasolina, el prestacional 330i con tracción trasera y cambio automático Steptronic de ocho relaciones. Hablamos de un bloque de aluminio con una cilindrada de 1.998 cm³, cuatro cilindros, dos árboles de levas en la culata, inyección directa, turbo, intercooler y Start/Stop.

Desarrolla una potencia total de 258 CV (190 kW) entre las 5.000 y las 6.500 rpm, más que suficiente para satisfacer las necesidades de la gran mayoría de usuarios e incluso ofrecerles un plus de diversión. Se complementa con un par de 400 Nm disponibles entre 1.550 y 4.400 vueltas, lo que le permite ofrecer un empuje realmente contundente.

El aumento de potencia es de 5 kW/6 CV y 50 Nm de par en comparación con el motor predecesor, lo que le permite completar el sprint de 0 a 100 km/h en 5.8 segundos, recuperar de 80 a 120 km/h en 3,7 segundos (entre marchas) y alcanzar una velocidad máxima de 250 km/h. Como veis, se trata de un coche muy rápido que irá desahogado en cualquier situación.

Además, la caja automática dota al modelo de una mayor elasticidad: está lleno de vida desde muy abajo y resulta más cómodo entre el tráfico diario. Es una combinación ideal tanto para rodar tranquilo con gran suavidad y confort de marcha como para buscarle las cosquillas durante el fin de semana en carreteras de curvas, aunque la gran mayoría de los usuarios tendrán más que suficiente con el 320i.

Para la mejora de prestaciones se ha optimizado del sistema BMW TwinPower Turbo, que comprende turbocompresores de doble entrada, inyección directa de gasolina de alta precisión, sistema de distribución variable VALVETRONIC y variador de árboles de levas Double-VANOS. Ahora, la respuesta a las órdenes del pie derecho es prácticamente inmediata.

El sistema High Precisión Injection asegura una precisa dosificación de combustible y una combustión especialmente limpia. Su nueva bomba de combustible genera una presión máxima de 350 bares, en comparación con los 200 bares de la anterior versión. El sistema de inyección directa perfeccionado permite un flujo óptimo de combustible a través de las cámaras de combustión, con la gasolina atomizada por inyectores multi-orificio.

Encontramos cuatro modos de conducción: ECO Pro, Confort, Sport y Adaptative, con un notable salto en reacciones entre ellos y diversas posibilidades de personalización. Varían distintos parámetros de la dirección, la suspensión y el motor, resultando reseñables la afilada respuesta del acelerador en el modo Sport y el avance por inercia en el modo ECO Pro.

El cambio ofrece un modo secuencial en la palanca de cambios y levas tras el volante.

Respecto a la transmisión Steptronic de ocho velocidades con convertidor de par, esta es la misma que encontramos en otros modelos de la gama, resultando muy suave y realmente rápida como para disfrutar de una conducción dinámica del Serie 3. Sólo me ha parecido un poco brusca en algunas maniobras a baja velocidad, especialmente si activamos el AutoHold.

LEE TAMBIÉN

Novedades para los BMW M3 2024: hasta 530 CV de potencia en los xDrive

La única pega de esta mecánica son los consumos, algo elevados en una conducción real. BMW homologa un combinado que varía entre 6.1 y 5.8 litros a los 100 kilómetros (WLTP), pero en el día a día el Serie 3 se ha movido en torno a los 5.3 litros en carretera y más de 10 litros en ciudad, con un consumo medio tras la semana de prueba de 8.6 l/100 km.

Con todo y con eso, las emisiones del motor también han sido mejoradas. El sistema de tratamiento de escape incluye un filtro de partículas para reducir las emisiones de partículas, lo que le permite cumplir con la exigente normativa de emisiones Euro 6d-TEMP. El depósito de combustible tiene una capacidad de 40 litros (ampliable a 59 litros por 194€).

Ficha técnica

Comportamiento

Como ya he comentado anteriormente, el BMW Serie 3 cuenta con algunas particularidades que lo diferencian de sus rivales. Para algunos hablamos de detalles que serán un problema, mientras que otros agradecerán que BMW siga conservando parte de su esencia en la berlina. El primero de ellos es la deportiva postura de conducción de la que hemos hablado.

Esta se complementa con un comportamiento dinámico en el que el Serie 3 sobresale frente a sus rivales, pero a cambio renuncia a ser tan bueno en otros ámbitos como el confort de marcha, especialmente en el caso de esta unidad M-Sport que monta dirección deportiva variable, suspensión deportiva M -710€- y unas generosas llantas de 19 pulgadas.

Todos estos opcionales dotan de gran agilidad al Serie 3, permitiéndole trazar con precisión cada curva, pero sobre tramos en peor estado o en zonas residenciales con resaltos, se muestra un poco seco y rebotón. No llega a ser incómodo, pero un Mercedes-Benz Clase C o un Audi A4 transmiten menos a los pasajeros las irregularidades del asfalto.

LEE TAMBIÉN

El BMW M2 Coupé de competición se prepara para debutar en la pista

Sí que es cierto que con la suspensión de serie -McPherson delante y multilink detrás- se muestra algo más cómodo, al igual que con la suspensión M adaptativa -1.420€-, por lo que estas pueden ser una buena alternativa para aquellos que buscan un mayor equilibrio entre confort y dinamismo.

La dirección deportiva variable, en cambio, sí que me resulta más cómoda que la de serie en todos los modelos de la gama que he probado, ya permite una gran maniobrabilidad en la ciudad y en espacios reducidos (el diámetro de giro es de 11,4 metros entre paredes), al tiempo ofrece un mayor peso en autopista y buen feedback en tramos revirados.

Con todo y con eso, la dirección no es todo lo informativa que me gustaría cuando le buscamos los límites al Serie 3. Si bien nos transmite más información que la de Mercedes o Audi, ha perdido ese tacto tan natural del que hacían gala antes los BMW, ofreciendo una asistencia que en algunas ocasiones se me antoja excesiva, como ocurre en el nuevo BMW Serie 1.

El Serie 3 siempre muestra reacciones naturales, con cambios de apoyo enérgicos y una intervención eficaz -pero no intrusiva- de los asistentes a la conducción que pueden configurarse al gusto del conductor. Además, la propulsión permite controlar la salida de la curva a la perfección, dotándole de un toque distintivo. Es un coche que te apetece conducir.

El diferencial deportivo M -1.657€- da mucho juego, optimizando la tracción, agilidad, estabilidad y dinámica en curva.

En autopista, también hablamos de un modelo que destaca en aplomo, confort e insonorización, especialmente en esta unidad que monta los cristales acústicos -237€-. Además, el balanceo de la carrocería en el paso por curva, aunque vayamos deprisa, es muy neutro, por lo que los pasajeros viajarán con gran comodidad en este sentido.

Lo cierto es que pocas pegas se le pueden poner al BMW Serie 3 durante la conducción, excepto por los detalles mencionados, aunque quien se decante por este acabado está claro que busca ese tacto más duro. Con otra suspensión y unas llantas de menor diámetro, es un coche más cómodo y con una elevada calidad de rodadura, como ya comentamos al probar el 320d.

Respecto al equipo de frenado, en esta unidad encontramos los frenos deportivos -769€-, que resultan muy eficaces y resistentes a la fatiga, aunque en algunas ocasiones pueden resultar un poco bruscos. Dosificarlos adecuadamente es sencillo, pero resulta bastante complicado llegar a detenerse por completo con suavidad.

Por último y, en materia de asistencias a la conducción, están disponibles el control de crucero activo con asistente de atascos, el aviso de ángulo muerto, el asistente de carril activo, la alerta de tráfico trasero, el asistente de aparcamiento, la detección de peatones y vehículos con frenada de emergencia y una alerta al detectar que se circula en dirección prohibida, entre otros.

Equipamiento y precio

Entre el equipamiento de serie para España podemos encontrar la caja de cambios automática Steptronic (excepto el 318d), llantas de aleación de 16, 17 o 18 pulgadas (según motor); faros LED, volante deportivo de cuero multifunción, climatizador trizona, paquete de iluminación, retrovisor interior anti-deslumbramiento, sistema de carga de objetos largos y paquete de compartimentos.

LEE TAMBIÉN

Manhart MH2 450: un M240i con mucha fibra e ínfulas de M2 Coupé

También son de serie algunos asistentes a la conducción como el sensor de lluvia y luces, control de crucero, control de distancia en aparcamiento (PDC) delantero y trasero, sistema Active Guard Plus, llamada de emergencia inteligente, BMW Live Cockpit o Connected Package, así como la garantía de reparación extendida hasta el tercer año o los 200.000 kilómetros.

Como es habitual en BMW, se ofrecen varias líneas de equipamiento que aumentan la dotación a un precio más atractivo. En el nuevo Serie 3 se denominan Sport (2.500 €), Luxury (4.000€), M-Sport (5.000 €) y M Sport Individual (9.832€). Con estos paquetes se cambia incluso el enfoque del vehículo, mejorando considerablemente el impacto visual.

Igualmente, aquellos que quieran dotar a la berlina de un aspecto realmente radical pueden optar por los accesorios de M Performance Parts, encontrándonos incluso algunos elementos que mejoran el rendimiento. También podemos recurrir al extenso listado de opcionales de los que hace gala el modelo, aunque cuidado con las cifras que puede alcanzar la factura final.

En España, los precios de la gama del BMW Serie 3 2019 sin descuentos ni promociones son los siguientes:

Galería de imágenes