Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8
Notable+
El Citroën C5 Aircross se ha convertido en un modelo muy esperado y el Grupo PSA tiene puestas en él grandes esperanzas. Se ofrece inicialmente con cuatro motorizaciones y otros tantos niveles de acabado para adaptarse a las necesidades de una mayoría, gozando de un amplio equipamiento de serie y un precio bastante competitivo si nos podemos beneficiar de los descuentos.
Lo estábamos esperando como agua de mayo, y es que el Citroën C5 Aircross llega para competir en un segmento muy concurrido que no se lo va a poner nada fácil. Estéticamente, sigue las pautas de estilo estrenadas en el C4 Cactus y cuya evolución hemos visto con la última generación del C3.
Puede tener unas posibilidades de personalización elevadas, además de los llamativos Airbumps que reducen los arañazos y pequeños roces, pero sin duda toda la atención de este modelo se centra en tres pilares fundamentales: la plataforma modular EMP2, la novedosa suspensión ‘Progressive Hydraulic Cushions’ y el cuidado aislamiento acústico.
Por ahora la oferta mecánica es algo reducida si la comparamos con la de algunos de sus rivales, pero poco a poco se irá ampliando incluso con opciones híbridas-enchufables. Además, Citroën ha comentado que el C5 Aircross comparte un 60% de piezas con el Peugeot 3008, pero es más grande y el diseño es personal, sin compartir elementos de chapa.
Por tamaño, precio y oferta mecánica, se enfrenta a modelos de la talla del Ford Kuga, Nissan Qashqai, BMW X3, Toyota RAV4, Honda CR-V, Mazda CX-5, Renault Kadjar, Kia Sportage, SEAT Ateca, Volkswagen Tiguan, Peugeot 3008, Škoda Karoq u Opel Grandland X, por lo que hay que destacar que estamos ante grandes rivales en calidad-precio.
Ahora bien, ¿qué virtudes y defectos tiene frente a estos?
Diseño exterior
Como ya te habrás dado cuenta, el diseño exterior del C5 Aircross destaca por la combinación de elementos usados en los Citroën C4 Cactus y C3 Aircross, haciendo gala de una personalidad muy fuerte que te permitirá reconocerlo al primer vistazo. Es original y la verdad es que se agradece teniendo en cuenta el continuismo que reina en el mercado.
Juega con ciertas molduras plásticas protectoras que permiten identificarlo como un SUV, pero sin exageraciones, y aunque no gustan a todo el mundo, son capaces de evitar algunos arañazos y roces de aparcamiento. Se combinan con detalles de color para ser todavía más llamativas.
Si recorremos su carrocería, rápidamente descubrirás que el nuevo C5 Aircross muestra un carácter desenfadado y atrevido en el que predominan las líneas y rectas y redondeadas, lo que por otra parte le aporta cierta robustez característica de este deseado segmento crossover.
En este acabado los cristales delanteros y laterales laminados son de serie, pero no deberíamos de ver la chapa de la carrocería en el marco interior de las puertas.
Comenzando por el frontal, este cuenta con un efecto visual notablemente elevado y protecciones plásticas inferiores. El logo de la marca en posición privilegiada domina la parte superior del morro del C5 Aircross, donde los dos chevrones se extienden por un estrecho embellecedor hasta las características y afiladas ópticas del modelo.
Dichas ópticas rasgadas con perfil cromado cumplen con la función de iluminación diurna con tecnología LED, la cual le da a este SUV carácter y personalidad a partes iguales. En la sección intermedia del frontal será donde encontremos la parrilla, mientras que, a ambos lados y con un aspecto redondeado, se ubican los faros Full LED delanteros.
Ya en el tercio inferior e integrados en la protección plástica encontraremos los pequeños faros antiniebla delanteros. En el centro, aparece una segunda rejilla que refrigera el radiador y la mecánica. Finalmente, a ambos lados podemos ver dos embellecedores que simulan tomas de aire para darle un toque deportivo al conjunto.
En la vista lateral, las protecciones plásticas que recorren longitudinalmente la parte inferior de los laterales y los pasos de rueda marcados aumentan el efecto visual de polivalencia y robustez del nuevo C5 Aircross. En las puertas se han instalado los conocidos Airbumps, aunque en una configuración bastante discreta.
Las llantas de serie son de 17 pulgadas en los acabados más básicos y de 19 pulgadas en el resto, aunque también hay opciones de 18 pulgadas. En cualquier caso, incluso las más grandes ofrecen gran confort y calidad de rodadura, pues contamos con neumáticos Michelin Primacy 3 en medidas 205/55 R19 97V.
El Citroën C5 Aircross se monta sobre la plataforma EMP2, alcanzando una longitud de 4.50 metros, un ancho de 1.84 metros y una altura de 1.65 metros. Por su parte, la batalla es de 2.730 milímetros y los anchos de vía delantero y trasero alcanzan los 1.601 y 1.630 mm, respectivamente.
El modelo parece estar dividido en dos partes gracias a los embellecedores negros brillantes del pilar C, que hacen flotar visualmente a la cabina.
Por último, es preciso remarcar la presencia de los intermitentes integrados en los retrovisores plegables eléctricamente y la generosa y elevada superficie acristalada que hace ascender la línea de cintura del conjunto, aportando además gran visibilidad al conductor y los pasajeros. En este caso también contamos con los cristales posteriores oscurecidos.
La zaga es otro de los elementos más personales y originales del nuevo Citroën C5 Aircross, con una caída pronunciada del portón y unas ópticas LED de diseño tridimensional que le aportan un toque jovial al conjunto. En la parte superior de la luneta -que ofrece buena visibilidad- vemos un sutil spoiler del color del techo que alberga la tercera luz de freno.
En posición central vuelven a dominar los chevrones de la marca y la denominación del modelo, así como dos embellecedores que vuelven a simular la presencia de tomas de aire para incrementar la deportividad. La protección plástica inferior que recorre la carrocería hace las veces de paragolpes, albergando los catadióptricos.
En ella se ubican los sensores de aparcamiento discretamente y un difusor negro brillante en el que descansan dos salidas de escape cromadas. Visto desde arriba, el C5 Aircross cuenta con un techo solar panorámico practicable eléctrico -1.299€- y dos carriles longitudinales con llamativos toques de color.
Diseño interior
El habitáculo del C5 Aircross destaca por sus buenas dosis de espacio, su elevado nivel de confort y su diseño ergonómico y alegre. La calidad del conjunto, la sensación visual, los materiales empleados y los ajustes son buenos en términos generales, especialmente en este tope de gama, pero hay algunos aspectos a pulir.
Por ejemplo, Citroën ha abusado de las superficies en Piano Black, muy sucias y sensibles a los arañazos, así como de los plásticos rígidos en partes visibles como las puertas o la superficie del salpicadero. Como os digo, transmite sensación de empaque, pero en este tope de gama podrán haberse cuidado más algunos de estos aspectos.
Donde no cabe duda de que la firma gala ha hecho un excelente trabajo es en comodidad, especialmente gracias a los asientos Advanced Comfort de este acabado. Su agarre es meramente aceptable, pero su mullido es sublime y ofrecen ajustes eléctricos, calefacción de tres niveles, memoria y masaje con varios modos e intensidades.
Las manos se posan cómodamente sobre un volante multifunción con la parte superior e inferior achatadas revestido en cuero bicolor. Sus botones son los mismos que podemos encontrar en otros modelos de PSA y desde los mismos se controlan las funciones de la instrumentación y el sistema multimedia.
Dicha instrumentación está compuesta por una pantalla de 12.3 pulgadas personalizable que sigue las pautas ya vistas en la cartera de productos de PSA. Aunque se le ha dotado de un nuevo diseño, mantiene los modos de visualización “Personal”, “Cuadrantes”, “Navegación”, “Mínimo” y “Conducción”, y todos ellos muestran una completa información.
Pasando a la pantalla táctil capacitativa HD de 8 pulgadas, es justo decir que cuenta con algo más de fluidez y rapidez que en otros modelos del grupo gracias al nuevo software, pero sigue por detrás de algunos rivales en gráficos y agilidad de movimientos. Además, ya sabéis que no soy especialmente fan de este tipo de pantallas que integran todas las funciones.
Me parece algo peligroso y poco práctico, sobre todo si la pantalla está en una posición baja. Pensemos en el climatizador bizona: cambiar la temperatura te obliga a cambiar la pantalla que lleves puesta -subir o bajar la temperatura un grado te obliga a pulsar, como mínimo, dos o tres veces la pantalla– y, si es el navegador y no lo llevas en la instrumentación, estás perdido.
A veces se aglutinan muchos controles en una pantalla cuya percepción táctil es bastante mejorable, cuando con una ruedecita y tres botones seríamos tan felices…
Bajo la pantalla encontramos una tira de botones táctiles e inmediatamente después, en una posición sensiblemente oculta, otra serie de botones de tipo pulsador que recuerdan a la aviación. Al pasar a la consola central, nos topamos con un buen espacio portaobjetos con base forrada y carga inalámbrica del smartphone, así como las tomas USB y de 12V.
Algo más rezagados quedan los botones de arranque, Eco, Sport y del control de descenso de pendientes, así como la palanca del cambio EAT8, la ruleta del Grip Control y un segundo hueco portaobjetos. Les siguen dos posavasos con iluminación y base forrada, culminando la consola en un reposabrazos fijo que esconde una profunda y generosa guantera iluminada.
Respecto a la habitabilidad, el C5 Aircross está homologado para cinco ocupantes y todos ellos viajarán con comodidad siempre cuando no sean muy altos, especialmente en las plazas traseras laterales. En ellas, los pasajeros van muy pegados a las puertas y al pilar C, por lo que personas más opulentas o que superen los 1,80 metros podrían sentirse incómodas.
El acceso es muy cómodo y en la segunda fila encontramos tres asientos independientes del mismo tamaño, lo que permite que tres adultos viajen cómodos. Además, el túnel central y las salidas de ventilación no son muy invasivos, el mullido y la anchura son iguales a los asientos de los extremos y la altura no es una molestia para personas de más de 1,80 metros.
En esta plaza central se viaja más cómodo que en otras alternativas y los tres asientos de la segunda fila ofrecen un desplazamiento longitudinal de 15 centímetros, así como hasta cinco posibles grados de inclinación para el respaldo. No destaca en muchas cotas respecto a sus rivales, pero cinco pasajeros adultos de complexión estándar viajarán cómodos.
Respecto a la capacidad de carga, cubica entre 580 y 720 litros de maletero, en función de la posición en la que coloquemos los asientos. Es el más grande de la categoría -junto al RAV4, también con 580 litros- y de los que más versatilidad ofrecen junto al Škoda Karoq, pudiendo además ampliarse la capacidad hasta los 1.630 litros abatiendo los asientos -20:20:20-.
Las formas son muy aprovechables y el piso se puede colocar a dos alturas, incluso con la rueda de emergencia -104€-. En la posición más alta el piso queda enrasado con los asientos al abatirlos. El portón es generoso y en este acabado cuenta con apertura eléctrica y gestual, pasando el pie bajo el paragolpes trasero. El borde de carga está a 750 mm del suelo.
Uno de los extras más curiosos del Citroën C5 Aircross es la cámara ConnectedCAM -312€- que se ubica bajo el retrovisor interior. Su uso es sencillo desde la aplicación disponible para smartphones Android e iOS, ya que únicamente hay que sincronizar el coche y el dispositivo.
Su utilidad es diversa, desde el ocio (permite grabar -manteniendo pulsado el botón- o realizar instantáneas -pulsando el botón-) hasta la seguridad, pues en caso de sufrir un accidente, ella misma graba y almacena por sí sola los 30 segundos previos al choque y los 60 segundos posteriores.
Cuenta con un gran angular de 120° y full HD de 2 millones de pixeles, además de permitirte compartir tus mejores momentos de forma instantánea en las redes sociales.
Motorización
La gama del Citroën C5 Aircross cuenta con opciones diésel y gasolina, pero no se descarta la llegada de una opción híbrida-enchufable. El SUV puede solicitarse con los motores de gasolina 1.2 e-THP de 130 CV como escalón básico y 1.6 THP con 181 CV, en ambos casos con cambio automático de ocho velocidades, o manual con seis relaciones en el primero de ellos.
En diésel la familia arranca con el propulsor 1.5 BlueHDI de 130 CV con cambio manual o automático, y seguirá con el 2.0 BlueHDI de 180 CV, este último exclusivamente con la transmisión automática de ocho velocidades. Común en todas las mecánicas es el sistema Stop&Start.
Para la prueba me he decantado por el más potente de los gasolina, un bloque de aluminio con dos árboles de levas en la culata, inyección directa, turbo e intercooler que, con 1.598 cm3, cuatro cilindros y cuatro válvulas por cilindro, desarrolla una potencia de 181 CV (133 kW) a 5.500 rpm y un par máximo de 250 Nm a partir de las 1.600 rpm.
En una conducción tranquila, el cambio sube de marcha en el entorno de las 2.000 – 2.100 rpm.
Lo cierto es que no podemos hablar de una mecánica prestacional como tal, pero sí más que suficiente para mover de forma enérgica al C5 Aircross, pegándonos incluso ligeramente al siento a partir de las 2.000 vueltas, que es cuando empuja con mayor fuerza. Además, resulta muy elástica en combinación con la caja EAT8.
No tendrás sensación de falta de potencia ni siquiera viajando cargado. Para que os hagáis una idea, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 8,2 segundos y de recuperar de 80 a 120 km/h en 6,7 segundos (entre marchas). La velocidad máxima es de 219 km/h y, circulando a 120 km/h en carretera, el motor gira a 2.100 rpm en octava marcha.
Respecto a los consumos, Citroën declara 7.0 litros en ciudad, 4.9 litros en extraurbano y 5.7 litros en ciclo combinado, pero el consumo urbano real ha rondado los 9.5 litros, bajando al entorno los 7.6 litros en carretera y deteniéndose en una media de 8.4 litros a los 100 kilómetros tras la semana de pruebas. El depósito de combustible tiene 53 litros de capacidad.
Por último, cabe mencionar la buena impresión que me ha dejado el cambio automático de convertidor de par con ocho relaciones. Gestiona el cambio de manera eficaz y con notoria suavidad. Únicamente la he notado un poco más brusca en los cambios al usar el control de crucero activo en atascos.
Si bien es cierto que la velocidad de cambio podemos calificarla meramente como normal, está en sintonía con el carácter relajado de este vehículo. Adicionalmente, ofrece levas de plástico de buen tamaño tras el volante. No dudaría en optar por ella en cualquier mecánica en la que resultara posible equiparla.
Ficha técnica
Version | 1.6 PureTech 180 - 4 cilindros en línea |
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Cilindrada | 1.598 cm³ |
Potencia | 181 CV (133 kW) @ 5.500 rpm |
Par | 250 Nm @ 1.650 rpm |
Peso | 1.505 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.500 / 1.840 / 1.654 mm |
Volumen Maletero | 580 - 720 (1.630) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 8,2 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 6,7 segundos (entre marchas) |
Velocidad máxima | 219 km/h |
Consumo homologado | 7,0 / 4,9 / 5,7 l/100 km (urb. /extraurb. / comb.) |
Emisiones CO2 por km | 129 g/km de CO₂ (Euro 6d-TEMP) |
Precio de partida | 34.400 euros (este motor y acabado sin descuentos) |
Comportamiento
La conducción del Citroën C5 Aircross es muy gratificante siempre y cuando circulemos relajados. Desde los primeros segundos tras el volante descubrirás que vas a viajar realmente cómodo, con amplias regulaciones posibles para los asientos y el volante (en altura y profundidad) que garantizan facilidad para encontrar la postura óptima.
Los asientos se ubican en una posición elevada, lo que garantiza una buena visibilidad en autopista y en ciudad. Además, el tacto de la dirección es muy agradable para maniobrar a baja velocidad, ofreciendo un diámetro de giro de apenas 10,7 metros entre bordillos. Eso sí, es demasiado blanda en algunas situaciones.
Su grado de asistencia es muy alto y resulta perceptible con facilidad, no informándonos apenas de lo que ocurre en el eje delantero. A ritmo elevado, no transmite gran confianza en un primer momento, requiere que le pillemos el tranquillo, y lo mismo ocurre con la suspensión de amortiguadores con topes hidráulicos, muy blanda en su conjunto.
Hablamos de un esquema McPherson en el eje delantero y de rueda tirada con elemento torsional en el trasero. Filtra de forma excelente las irregularidades del terreno incluso al circular sobre resaltos o por caminos de grava, pero a cambio nos ofrece unos cambios de apoyo más lentos y balanceos más acusados al trazar rápido las curvas.
Esto no tiene por qué significar algo malo, todo lo contrario, gracias a ello es un coche extremadamente cómodo que no tiene prácticamente rival en este aspecto. Pensad que, como os decía, es un coche pensado para circular relajado, lo que, por suerte o por desgracia, le penaliza en el apartado dinámico.
La mayoría de rivales logran un mayor equilibrio entre confort y dinamismo.
Lo mismo ocurre con la sensación de seguridad que os comentaba. Que no la transmita inicialmente por lo blandas que se sienten la dirección y las suspensiones no quiere decir que no sea un coche con gran estabilidad y unas reacciones muy nobles y seguras. Únicamente requiere que entendamos el objetivo con el que ha sido concebido y cojamos confianza.
Lo que me ha sorprendido gratamente es el tacto de los frenos, compuestos por discos ventilados en el eje delantero y discos macizos en el trasero. Son eficaces y muy cómodos de dosificar, sin excesiva asistencia, algo que se agradece en un vehículo de estas dimensiones y peso.
Por último y, fuera del asfalto, el C5 Aircross es capaz de hacer sus pinitos gracias a una altura libre al suelo de 204 mm y el sistema Grip Control, que nos ofrece varios modos de conducción -nieve, barro, ESP off…-. En todo caso, y más sin los neumáticos adecuados, hay que tener claro que se trata de un SUV.
Con esto quiero decir que nos sacará de un apuro cuando el suelo esté resbaladizo o cuando nos adentremos por un camino de baja dificultad con algo de barro, pero a la hora de superar obstáculos puedes llevarte una sorpresa o alcanzar los topes de la suspensión. Eso sí, cuenta con control de descenso de pendientes.
Equipamiento y precio
Los niveles de acabado del Citroën C5 Aircross se denominan Start, Live, Feel y Shine. El primero ya cuenta con controles de tracción y estabilidad, ABS, EBD, TPMS, múltiples airbags, asistente al arranque en cuestas, alerta de cambio de carril, aire acondicionado, elevalunas en las cuatro puertas, control y limitador de velocidad, cierre con mando y espejos eléctricos.
También sin coste cuentan con frenada automática en ciudad, ordenador de viaje, aviso pre-colisión, detector de fatiga, luces diurnas por LEDs, lector de señales de tráfico, asientos posteriores independientes, apoyabrazos central delantero, contorno de ventanillas cromado, freno de mano eléctrico, Citroën Connect Radio con pantalla de 8 pulgadas, bluetooth y 2 USB.
La terminación Live añade a lo anterior las llantas de aleación ligera, climatizador automático de dos zonas, faros antiniebla con iluminación en curva, sensores de parking traseros, asiento del conductor con reglaje lumbar, volante multifunción forrado en piel y un tapizado exclusivo, entre otros.
El acabado Feel suma el sistema de navegación, Apple CarPlay, Android Auto, cámara trasera, control por voz, sensores de aparcamiento delanteros, llantas de aleación de 19”, barras de techo, cristales tintados, detector de objetos en ángulo muerto, acceso y arranque sin llave, instrumentación digital de 12,3 pulgadas, cargador de móvil sin cables, espejo interior fotosensible, asientos “Advanced Comfort”, doble salida de escape…
Por último, el nivel Shine añade pedales de aluminio, cristales laminados, asientos calefactables, alfombrillas específicas, asiento del conductor eléctrico con memoria, portón trasero manos libres, sistema de aparcamiento asistido, control de crucero adaptativo con función de frenada, faros Full LED, Highway Driver Assist, SmartBeam y detector de fatiga.
En España, los precios recomendados para el Citroën C5 Aircross 2019 sin descuentos ni promociones quedan de la siguiente manera:
Motor | Start | Live | Feel | Shine |
1.2 e-THP 130 CV 6MT | 23.150€ | 24.450€ | 26.950€ | 29.450€ |
1.6 THP 180 CV 8AT | – | 31.700€ | 34.400€ | |
1.5 BlueHDI 130 CV 6MT | 26.450€ | 28.950€ | 31.450€ | |
1.5 BlueHDI 130 CV 8AT | – | 31.600€ | 34.300€ | |
2.0 BlueHDI 180 CV 8AT | – | 33.700€ | 36.400€ |
- Diseño exterior original y cargado de personalidad.
- Mecánica muy suave, con un agradable sonido al acelerar a fondo y capaz de ofrecernos buenas cifras de potencia.
- Interior alegre y personalizable.
- Buenas dosis de espacio para cinco pasajeros, gran confort de los asientos y excelente capacidad de carga gracias a la modularidad de la segunda fila de asientos.
- Gran calidad de rodadura y aislamiento del exterior.
- Cambio automático EAT8 algo brusco en los atascos al activar el control de crucero activo con función Stop&Go.
- En este acabado tope de gama podría haber materiales más cuidados en el interior, se abusa del Piano Black y los plásticos rígidos.
- La percepción táctil de la pantalla es mejorable, al igual que la resolución de la cámara de marcha atrás, aunque hay que reconocer que ha mejorado respecto a otros modelos de PSA.
- Comportamiento dinámico penalizado por la asistida dirección y la blanda suspensión.