Con 20 años a sus espaldas, el sello CUPRA se ha convertido en un icono de deportividad. Como sabéis, ahora es una marca independiente. Modelos como el CUPRA Ateca han destacado por sus elevadas prestaciones y un comportamiento dinámico intachable. Hoy probamos su versión de acceso, el CUPRA Ateca 190 CV 2.0 TSI DSG-7 4Drive.
Si bien CUPRA aún desarrolla los modelos junto a su matriz, el objetivo es crecer de manera independiente. Buena prueba de ello es el CUPRA Formentor, el primer modelo desarrollado por la compañía. Es también la segunda apuesta de corte SUV de la marca, que se une al CUPRA Ateca. Englobará también la división de competición y carreras de SEAT.
Tras el restyling sufrido en 2021, el CUPRA Ateca obtiene una mejora de la dotación. Tampoco faltan diversas novedades estéticas que lo hacen más atractivo. Mantiene el precio de su predecesor, por lo que se alza como una alternativa aún más interesante. Sí que cabe destacar que las impresiones de conducción son las mismas, siendo casi perfecto.
Sus rivales directos por puesta a punto y mecánica deportivas son el CUPRA Formentor, el MINI John Cooper Works Countryman, el Audi SQ2, el Mercedes-AMG GLA 35 4MATIC, el BMW X2 M35i y el Volkswagen Tiguan R. El resto de SUV que rondan los 300 CV de potencia o bien carecen de un ADN deportivo o son opciones híbridas enchufables.
Diseño exterior
El último CUPRA Ateca hereda los principales rasgos de diseño del renovado SEAT Ateca y los lleva a un plano más deportivo. Tras el lavado de cara, el frontal incluye un nuevo diseño de paragolpes, así como nuevos faros Full LED. La parrilla superior de nido de abeja tiene un acabado cromado oscuro en su marco, con el logotipo CUPRA justo en el centro.
Ahora la parrilla inferior presenta un difusor de aluminio oscuro. Por su parte, la parrilla de las luces antiniebla a cada lado va a juego. Gracias a ello hace inconfundible en la carretera la presencia de este SUV de altas prestaciones. La luna delantera ofrece buena visibilidad y el marcado capó pone la guinda del pastel. No faltan sensores de aparcamiento delanteros.
Las molduras laterales están acabadas en aluminio oscuro brillante, igual que las barras del techo y los espejos exteriores. Albergan unas luces de bienvenida que proyectan el logo CUPRA sobre el suelo. La vista lateral se resalta con las llantas de aleación de 19 pulgadas. Hay cinco disponibles e incluyen insertos cobre o plata para aportar un nuevo estilo.
Gracias a nuevas opciones, el cliente puede personalizar el estilo de su vehículo. Para los neumáticos se ha optado por equipar unos Bridgestone Turanza T005 en dimensiones 245/40 R19 94W en ambos ejes. Tras las llantas se alojan de serie las pinzas de freno grises. En esta versión no tenemos en opción los frenos Brembo y las gomas blandas.
Las dimensiones del CUPRA Ateca también juegan su papel en las capacidades del vehículo, proporcionando la base para una conducción segura. Mide 4.39 metros de largo, 1.60 metros de alto y 1.84 metros de ancho. Las vías delantera y trasera alcanzan 1.575 mm y 1.549 mm, respectivamente. La batalla es de 2.630 mm.
En la trasera del CUPRA Ateca se dispone de iluminación Full LED con intermitentes dinámicos. Proporcionan a los otros conductores una clara indicación y se suman a la elegancia del diseño exterior. Lo que no verás son los cuatro escapes, aunque sí un marcado difusor que refuerza el posicionamiento del CUPRA Ateca como vehículo de altas prestaciones.
Por último, el CUPRA Ateca se ofrece con cinco pinturas exteriores. Cada color aporta algo a la imagen dinámica del vehículo. En este caso podemos ver el Negro Mágico metalizado. Sobre el techo, encontramos una antena de tipo aleta de tiburón, carriles longitudinales y, opcionalmente, un techo corredizo eléctrico panorámico.
Diseño interior
En el interior, los clientes percibirán un aumento de la calidad en el diseño y el modo en que el habitáculo transmite el carácter del coche. Incorpora una imagen deportiva, pero que también incluye una gran sensación de confort. Respecto a la unidad probada anteriormente, el salto en sofisticación y tecnología es notable, con buenos ajustes y materiales.
Los asientos deportivos de tipo bucket son de serie, ofreciendo un gran agarre lateral en el respaldo y suficiente comodidad como para abordar viajes largos sin fatigarse. El cliente también puede optar por unos asientos con tapicería de piel, calefacción, reglaje eléctrico y función de memoria opcionales. Estos aportan un plus de comodidad al modelo.
Otra interesante novedad es el volante CUPRA. En opción aloja el botón de arranque del motor y el selector del modo de conducción. Se complementa con el nuevo cuadro de mandos Digital Cockpit de 10,25 pulgadas. Es muy similar al que equipan otros modelos de la gama SEAT, aunque con algunas características propias que realzan su carácter deportivo.
Por todo el habitáculo los detalles en cobre y en aluminio oscuro aportan una sutil sensación de alto rendimiento. Destacan la salida de los aireadores, la radio y la zona del climatizador. También hay elementos que se benefician de unos marcos de aluminio oscuro brillante; así como cuatro puertos USB-C iluminados. Hay dos en la parte delantera y dos en la trasera.
En el centro de todo está el sistema de infoentretenimiento. En la nueva entrega del CUPRA Ateca se ofrece con una pantalla de 23 cm (9,2 pulgadas) de serie. Incluye navegación y un control por voz más natural para simplificar la interacción del usuario. Remata el conjunto el sistema Full Link con el que los clientes pueden acceder también de forma inalámbrica.
No importa qué dispositivo usen, Android Auto o Apple CarPlay (empleando una conexión inalámbrica basada en Bluetooth o WLAN). En esta ocasión, a diferencia de pruebas anteriores, ya no he notado problemas con la conexión inalámbrica del CarPlay. Tampoco falta la unidad de conectividad on-line con SIM integrada.
Esta permite no perder la conexión con el mundo digital. En futuros desarrollos, el sistema dejará que los usuarios accedan a las últimas aplicaciones de infoentretenimiento. Podrán ser actualizadas en cualquier momento. La eSIM también conlleva la disponibilidad del servicio eCall, que contacta directamente con los servicios de emergencia en caso de accidente.
Por su parte, la aplicación Connect abre un nuevo mundo de posibilidades. Se puede descargar en el teléfono móvil que se desee. Brinda acceso a distancia sobre un sinfín de funciones que ayudarán al conductor a maximizar su disfrute y ayudarán también a aumentar la seguridad. Cabe destacar que los cinturones delanteros no cuentan con regulación en altura.
En términos de habitabilidad, ofrece un cómodo acceso a todas las plazas. También suficiente espacio para que cuatro adultos altos viajen cómodamente. En cotas, se encuentra en la media del segmento. La plaza central trasera presenta las clásicas limitaciones a causa del túnel de transmisión, las salidas de ventilación y el mullido más duro del asiento.
Respecto al maletero, este cubica un total de 485 litros, una cifra destacable en el segmento. Pueden ampliarse abatiendo la segunda fila de asientos -60:40-. Las formas son muy regulares, contando con una trampilla al habitáculo, anclajes, iluminación y tomas de 12V o 230V opcionales. El portón es eléctrico y el borde de carga queda a 710 mm del suelo.
El doble suelo en el maletero, la bola de remolque, la red divisoria y la rueda de repuesto de emergencia son opcionales.
Motorización CUPRA Ateca 190 CV DSG
Os dijimos en su día al probar el SEAT Ateca con esta mecánica que la antesala del CUPRA no desmerecía. No nos faltaba razón, hasta el punto de que la firma española ahora oferta esta opción únicamente bajo el sello de CUPRA. Se une así al CUPRA Ateca 2.0 TSI 300 CV DSG-7 4Drive que también probamos en su día y que, en mi opinión, es la alternativa más recomendable.
Con el motor de acceso, el CUPRA Ateca es un coche ágil que te permite disfrutar de un SUV deportivo con una excelente puesta a punto. Sin embargo, la opción de 300 CV es, sencillamente, sublime. Sobre todo, si la acompañas del escape opcional Akrapovič. Si puedes permitirte el coste adicional, no lo dudes. En caso contrario, este tampoco va a decepcionarte.
El ”básico” monta un bloque de hierro y aluminio con cuatro cilindros en línea. Cuenta con 1.984 cm3 de cilindrada, dos árboles de levas en la culata, inyección directa, turbo e intercooler. Con ello, brinda una potencia de 190 CV (140 kW) entre 4.200 y 6.000 rpm; así como un par máximo de 320 Nm entre las 1.500 y las 4.100 vueltas.
Si bien es cierto que no notarás una patada que te pega al asiento, se trata de una mecánica muy solvente. Ofrece una respuesta rápida al pisar el acelerador cuando recurrimos al modo Sport -en otros modos, el cambio tarda algo más de tiempo en reaccionar-. Además, se han mejorado su refinamiento y la insonorización con respecto a la versión en SEAT.
La buena cifra de par nos ofrece buenas recuperaciones y una notable aceleración a partir de las 1.800 revoluciones. Circulando a 120 km/h en 7ª velocidad, el motor gira a 2.000 rpm. Por lo tanto, es posible mantener la velocidad de crucero sin problemas incluso yendo cargados. La caja DSG no necesita reducir marchas para garantizar un buen empuje.
Cabe destacar que el cambio automático y el sistema de tracción total a las cuatro ruedas 4Drive hacen que el conjunto no sea especialmente liviano. Lastra, por lo tanto, las sensaciones y las prestaciones que nos brinda el VZ de 300 CV. Para que os hagáis una idea, en cifras es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7.2 segundos.
Recupera de 80 a 120 km/h en 5.4 segundos y alcanza una velocidad máxima de 212 km/h. Son unos datos buenos con los que el Ateca se mueve sobrado, pero no casan tan bien con la puesta a punto del chasis. Adicionalmente, el selector de modos de conducción permite elegir entre cinco opciones que modifican diversos parámetros del vehículo.
Es el caso de la transmisión, la respuesta del acelerador, la dureza de la suspensión y la dirección o la tracción total a las cuatro ruedas. Se denominan Comfort, Sport, Snow, Offroad e Individual. Estos pueden seleccionarse desde el selector redondo de la consola central o desde le botón CUPRA del volante en opción. Eso sí, en el 190 CV, el DCC es opcional.
Respecto a los consumos, SEAT declara un combinado de 8.1 l/100 km (WLTP). Durante la semana de pruebas la cifra final fue de 9.1 l/100 km. Durante una conducción real en carretera podemos movernos en torno a los 7.5 l/100 km, mientras que en ciudad superaremos con facilidad los 11 l/100 km. Es bastante sensible a los cambios de ritmo.
El depósito de combustible tiene una capacidad de 55 litros. Es preciso mencionar que el avance por inercia solo está disponible en algunos modos, como el Comfort o el Individual. En este último caso, podemos seleccionar un funcionamiento de motor ECO, lo que nos permite capar ligeramente las prestaciones para ahorrar combustible.
Respecto al cambio DSG de siete marchas, he de decir que se ha afinado su funcionamiento para CUPRA, aunque no es tan brillante como en el Ateca VZ. Con todo y con eso, brinda cambios rápidos y suaves. Es menos torpe a baja velocidad que en otros vehículos SEAT que lo montan. Además, nos da bastante juego, pese a no ser totalmente permisivo.
Tiene modo secuencial en la palanca y levas tras el volante. De hecho, las levas han aumentado su tamaño respecto a otros modelos, algo realmente positivo para una conducción más deportiva. Practicando una conducción sosegada, la transmisión automática de doble embrague sube de marcha por debajo de las 2.000 rpm para no disparar los consumos.
Version | 2.0 TSI - 4 cilindros en línea |
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Cilindrada | 1.984 cm³ |
Potencia | 190 CV (140 kW) @ 4.200 - 6.000 rpm |
Par | 320 Nm @ 1.500 - 4.100 rpm |
Peso | 1.580 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.381 / 1.841 / 1.611 mm |
Volumen Maletero | 485 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 7,2 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 5,4 segundos |
Velocidad máxima | 212 km/h |
Consumo homologado | 8,1 / 10,3 - 8,2 - 7,0 - 8,2 l/100 km (Comb. / vel. baja - media - alta - muy alta) |
Emisiones CO2 por km | 183 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Pegatina de la DGT | C |
Precio de partida | 45.760 euros (este motor y acabado sin descuentos ni extras) |
Comportamiento CUPRA Ateca 190 CV DSG
Está claro que si hay algo por lo que destaca el CUPRA Ateca es por su puesta a punto. Tiene un comportamiento del que pocos SUV pueden presumir, especialmente si hablamos de modelos por debajo de los 50.000 €. Lo mejor de todo es que resulta tan válido para el día a día como para divertirse los fines de semana en un puerto de montaña.
Gran parte de la culpa la tiene el sistema de tracción integral total 4Drive. La última generación del sistema de tracción Haldex de embragues multidiscos bañados en aceite y actuación electrohidráulica suministra la potencia de una manera controlada y eficiente. Es posible gracias al análisis constante de las condiciones de tracción, giro de volante y gestión del acelerador, entre otros.
El conjunto de tecnologías da como resultado un SUV muy preciso y obediente a las órdenes del conductor. Siempre tenemos gran sensación de control pese a lo rápido que permite trazar curvas cerradas. Es más, resulta complicado encontrarle los límites y su carácter subvirador, aunque no tanto como en el VZ. Este último tiene un ajuste algo más firme y directo en suspensiones y dirección.
Pese a ello, este CUPRA no decepciona, los cambios de apoyo se producen de forma rápida y con naturalidad. Sí que es preciso señalar que hablamos más de un producto redondo que divertido. Es un coche muy ágil y rápido, similar a un Alfa Romeo Stelvio en este sentido. Destacar que modelos como el Porsche Macan dan más juego a ritmo elevado. También tiene un precio muy superior, claro.
Junto a la tracción total, los otros dos pilares fundamentales del buen hacer dinámico del CUPRA Ateca son la suspensión -McPherson delante y multibrazo detrás- y la dirección. Ambas tienen una dureza variable que podemos ajustar con los modos de conducción si equipamos el DCC opcional. El tarado de las suspensiones es algo más firme que en un SEAT Ateca, pero menos que en el VZ.
Esto ayuda a que la carrocería apenas balancee a la hora de negociar curvas cerradas, pero también a que se haga menos de rogar que el VZ en largos viajes cuando el asfalto no está en buen estado. En ningún caso podemos decir que sea un modelo incómodo. Filtra las irregularidades de la carretera mejor que el VZ y que cualquier deportivo de estas características.
Además, está bien aislado y el ruido de rodadura no es elevado pese al gran tamaño de las llantas. Por el contrario, en ciudad nos encontramos con dos pegas importantes. La primera de ellas el mencionado consumo; y por otra la visibilidad desde el interior, que no es todo lo buena que nos gustaría en un modelo de sus dimensiones -salvo hacia delante-.
En autopista el CUPRA Ateca se mueve con mucha soltura y tremendo aplomo.
Esto hace que haya ocasiones en las que no tenemos claro dónde están los límites posteriores del vehículo. Cierto es que se trata de un problema relativo. Los sensores de aparcamiento y el equipo de cámaras nos aportan un plus de confianza en este sentido. A la hora de maniobrar, el CUPRA Ateca tiene un diámetro de giro de 10,8 metros entre bordillos.
De serie encontramos discos ventilados en ambos ejes (diámetro de 312 mm delante y 272 mm detrás). Son eficaces, pero resultan algo blandos cuando apuramos la frenada. Me pareció más satisfactorio el equipo de frenos opcional Brembo que en su día probé con la versión VZ de 300 CV. Su eficacia, precisión y tacto eran brillantes incluso tras una conducción exigente.
A nivel de asistencias a la conducción y de seguridad, el CUPRA Ateca también es uno de los coches más seguros del segmento, con elementos como el asistente pre-colisión, control de crucero adaptativo y predictivo, asistente de viaje y emergencia, mantenimiento de carril, detector de ángulo muerto, alerta de tráfico cruzado trasero, asistente de salida…
Equipamiento y precio
El CUPRA Ateca goza de un completo equipamiento. Lo mejor del nuevo modelo está en su relación valor-precio gracias a una dotación estándar superior. El precio recomendado del nuevo CUPRA Ateca 2.0 TSI 190 CV se ha fijado en 45.760 euros; mientras que el VZ de 300 CV parte de 55.170 euros, en ambos casos sin descuentos ni promociones.
En España, la dotación de serie del CUPRA Ateca contempla faros Full LED con intermitentes dinámicos, sistema de visión 360º, control de velocidad adaptativo, alerta de cambio de carril, SmartBeam, lector de señales de tráfico, suspensión pilotada, selector de modos de conducción, aviso pre-colisión, detector de fatiga y peatones y llantas de 19 pulgadas.
También de serie son el climatizador automático de dos zonas, el control de objetos en ángulo muerto, la instrumentación digital, los asientos de tipo bacquet, el portón automático, el acceso sin llave, el arranque por botón, el sensor de lluvia, el asistente al aparcamiento delantero y trasero, los cristales tintados y el atractivo paquete deportivo, entre muchos otros.
Por su parte, el sistema multimedia cuenta ahora con el equipo con pantalla táctil de 9,2 pulgadas de serie, navegador integrado, Mirror Link, Apple CarPlay, Android Auto, puertos USB, cargador de móvil por inducción y ocho altavoces. Tampoco falta la aplicación Connect se pueden consultar algunos datos del vehículo y utilizar algunas funcionalidades.
Muchos de los opcionales entre las dos versiones mecánicas son compartidos y se agrupan en paquetes. La mayor diferencia entre ambos se encuentra en el DCC (control de chasis adaptativo), que el CUPRA Ateca de 300 CV lo equipa de serie; así como en el sistema de escape opcional Akrapovič, que solo se ofrece para el más prestacional.
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8
Notable+
El CUPRA Ateca es capaz de ofrecer un diseño deportivo y dinámico, pero aunando un amplio habitáculo y un maletero de grandes dimensiones. Sus briosos motores, su puesta a punto y su amplio abanico de equipamiento no solo son capaces de sacarnos sonrisas al volante, sino también de convencer incluso a aquellos que reniegan de las carrocerías en formato SUV. Bravo por CUPRA.
Lo bueno
- Diseño imponente, con detalles deportivos diferenciados, especialmente tras el restyling.
- Rebaja el precio de acceso a la gama CUPRA Ateca.
- Comportamiento dinámico sin rival por precio, aunque es más perfecto que divertido.
- Buena relación tamaño-habitabilidad.
- Maletero muy amplio, de los más espaciosos del segmento.
- Equipamiento muy completo.
Lo mejorable
- Sonido discreto sin posibilidad de optar por los escapes opcionales Akrapovič.
- Consumos elevados y sensibles a los cambios de ritmo.
- La visibilidad no es especialmente buena, salvo hacia delante.
- La suspensión se muestra dura incluso si optamos por los modos de conducción más confortables.
- Precio elevado sin las promociones. Hace dos años, es lo que costaba el VZ de 300 CV.
- Su potencia le dota de buena agilidad, pero el verdadero CUPRA es el VZ.