Este modelo producido en Rumanía (ocupa el lugar del B-Max) no tuvo gran aceptación en Europa en su anterior generación. Sin embargo, con los cambios introducidos en 2018 ha crecido en volumen de ventas. No es un caso de éxito, pero tiene buenas cifras. Hoy probamos el Ford EcoSport 1.0 EcoBoost 140 CV ST-Line.
En su primera generación, llegaba desde la India con una calidad de realización discutible, una estética diferenciada y una oferta poco competitiva. Pero todo aquello quedó atrás. Ahora se trata de un producto más atractivo -especialmente con este acabado ST Line-, que goza de un interior muy similar al del Ford Fiesta.
Cuenta con diversos elementos diferenciadores y únicos, mecánicas de gasolina y un buen espacio interior para sus contenidas dimensiones. Ataca directamente al segmento B-SUV, uno de los preferidas en Europa y en España. Puedes encontrarlo con dos atractivos acabados, el deportivo ST Line o el campero Active desde 2021.
El Ford EcoSport es más barato que la mayoría de sus alternativas (con descuentos). Entre ellas hay modelos de lo más variopinto, como los Opel Crossland, Hyundai Kona, KIA Stonic, Peugeot 2008, VW Taigo, Renault Captur, Toyota Yaris Cross, Volkswagen T-Cross, Ford Puma, Nissan Juke, Škoda Kamiq, VW T-ROC o SEAT Arona.
Diseño exterior
Uno de los aspectos en los que el nuevo Ford EcoSport ha salido más beneficiado es en estética. En su última entrega, mantiene su personalidad, pero adaptada a los tiempos que corren. Además, hereda un mayor número de rasgos de otros modelos de la marca. En el frontal destaca esencialmente la generosa parrilla rematada en negro.
Descansa el óvalo azul en posición central. En sus extremos podemos ver las ópticas frontales LED divididas en dos partes. Los faros superiores se corresponden con las luces de cruce y carretera; mientras que en el extremo inferior se pueden apreciar las luces antiniebla y los intermitentes. En opción tenemos el asistente de largas/cortas.
Justo por debajo de este queda el paragolpes, pintado en el color de la carrocería. Integra una segunda entrada de aire. En él podemos encontrar los sensores de aparcamiento delanteros opcionales y una sutil protección de bajos plástica. Llama la atención que esta no recorra toda la carrocería como en otros SUV.
El elevado capó es otra de las señas de identidad del Ecosport, otorgándole robustez al conjunto. En la vista lateral llaman la atención la limpia superficie de las puertas con marcados nervios y unos marcados pasos de rueda. Los espejos retrovisores integran los intermitentes e incorporan detector de ángulo muerto opcional.
La superficie acristalada es mayor en la parte delantera que en la trasera, lo que no contribuye mucho a la luminosidad interior. Las lunas posteriores son, además, tintadas. Por otra parte, las llantas de 17 pulgadas calzan unos neumáticos Michelin Pilot Sport 4 en medidas 215/45 ZR18 89Y. Son específicas de este acabado.
Como buen modelo del segmento B-SUV, sus medidas son contenidas. Hablamos de 4.10 metros de largo, 1.77 metros de ancho y 1.65 metros de alto. La batalla alcanza los 2.519 mm y las vías delantera y trasera miden 1.530 mm y 1.522 mm, respectivamente. El coeficiente aerodinámico ha bajado de 0,395 a 0,38.
Hay disponibles ocho colores para la carrocería con diversos acabados. En este caso vemos el Azul Desert Island metalizado. Visto desde arriba, el modelo cuenta con una antena de tipo convencional de tamaño reducido y dos raíles en negro. No se ofrece techo solar. La vista trasera es una de las más particulares del modelo.
Llaman la atención el spoiler superior y el difusor, rematado en negro. El portón se abre de forma lateral, algo que no es del todo práctico en algunas ocasiones dado el espacio que requiere para abrirse. El tirador del portón se esconde en el faro derecho. La cámara de visión trasera es opcional, los sensores de aparcamiento, de serie.
Diseño interior
A pesar de su tamaño compacto, el Ford EcoSport goza de notable altura. Esto permite disfrutar de un puesto de conducción elevado que mejora la visibilidad al movernos en la ciudad. Resulta sencillo encontrar la postura de conducción óptima por la disposición de los mandos, encontrándonos ante un conjunto cómodo y ergonómico.
En términos de diseño y calidad, está en la línea de los Ford Fiesta y Focus. Vemos componentes específicos y un diseño más deportivo en este acabado ST-Line. La calidad de los materiales es correcta y los ajustes están cuidados. Los materiales blandos están presentes en las partes más visibles, pero hay abundante plástico rígido.
Gracias la moldura en el salpicadero se ha conseguido reforzar aún más la calidad del habitáculo. Como se puede ver, todos los elementos del salpicadero imprimen un diseño limpio y ordenado, empezando por dejar solo los botones más necesarios. El ST-Line suma opciones que mejoran la sensación de calidad a la vista y al tacto.
Un ejemplo son los asientos deportivos con piel parcial. Pecan sensiblemente en agarre -especialmente en la banqueta- pero son muy confortables. Tienen algunas comodidades como ajuste lumbar y calefacción. Tampoco faltan los umbrales de las puertas en aluminio, aunque curiosamente los pedales se mantienen en plástico.
Protagoniza el salpicadero un sistema multimedia con pantalla táctil de ocho pulgadas muy completo. Puede incluir navegador y equipo de sonido B&O. En términos generales, el diseño es limpio y minimalista. El sistema es fácil de usar e intuitivo, con unos gráficos, fluidez y respuesta adecuados.
El sistema de sonido firmado por B&O es recomendable para los amantes de la buena música, convirtiendo el interior en una sala de conciertos. Por su parte, el cuadro de instrumentos ofrece un diseño cuidado y agradable a la vista. Tiene cuatro diales y una pantalla central a color que nos ofrece información variada sobre nuestro viaje.
Nos gusta que los controles del climatizador automático monozona sean mediante botones físicos. Bajo este hay algunos botones adicionales, tomas USB/USB-C y un hueco portaobjetos. Le sigue la palanca del cambio manual con pomo en metal, los posavasos y un reposabrazos deslizable con guantera en su interior.
La sensación de amplitud y espacio es buena en el interior. Resulta algo más angosta en las plazas traseras por el grosor del pilar C. Las dimensiones en el interior le sitúan en una buena posición respecto a sus oponentes directos. Además, podemos encontrar diversos huecos portaobjetos de aceptable tamaño.
En las plazas traseras ofrece un espacio normal tanto para las piernas como para la cabeza. De nuevo observamos un buen tapizado en los asientos, el cual contrasta con los paneles de las puertas de plástico duro. No hay un reposabrazos central ni un acceso directo al maletero para poder llevar objetos más grandes.
Es algo que beneficia a la plaza central, aunque apenas podremos aprovecharla por la anchura del conjunto. En conjunto, es un coche cómodo y práctico para la ciudad, pero también para hacer alguna que otra escapada cuatro adultos. El acceso a todas las plazas es cómodo por espacio y grado de apertura de las puertas.
El maletero tiene apertura lateral. Esto proporciona un mejor acceso al espacio de carga, pero requiere mucho espacio para abrirse. Se abre desde el tirador localizado en el faro derecho. Cubica 356 litros, una cifra algo justa. Crecen hasta los 1.238 litros abatiendo los asientos. Además, hay una tabla divisoria.
Si lo mantenemos a su altura normal, dispondremos de una superficie lisa al inclinar los asientos traseros. Bajo el piso se ubica el kit antipinchazos, aunque otras versiones podían llevar la rueda de repuesto en el portón. Las formas son también muy regulares y hay iluminación y ganchos. La base de carga queda a 640 mm del suelo.
Motorización Ford EcoSport 1.0 EcoBoost 140 CV
En el apartado mecánico, el EcoSport ya solo se vende nuevo con el 1.0 Ecoboost con 125 CV y cambio manual de seis relaciones. Eso sí, todavía puedes encontrar algunas unidades con esta versión más potente. Se trata de un bloque fabricado en hierro y aluminio con dos árboles de levas en la culata, turbo, inyección directa e intercooler.
Con 999 cm3, tres cilindros y cuatro válvulas, desarrolla una potencia de 140 CV (103 kW) a 6.300 rpm. Se asocia a un par máximo de 180 Nm a partir de las 4.400 vueltas. Como se puede ver, la cifra de par no es elevada y la potencia máxima se entrega bastante arriba, por lo que no encontraremos grandes aceleraciones.
De hecho, para su tamaño, peso y potencia, no parece tener 140 CV en muchas ocasiones. Prueba de ello son sus cifras. Acelera de 0 a 100 km/h en 10,2 segundos y recupera de 80 a 120 km/h en 7,1 segundos entre marchas. La velocidad máxima es de 182 km/h. En carretera el motor gira a 2.900 rpm a 120 km/h.
Esto nos permite mantener velocidades de crucero elevadas sin esfuerzo, pero también repercute en los consumos. Es, en esencia, una mecánica pensada para entregar la potencia de forma lineal y progresiva, no para ofrecer grandes dosis de emoción pese a encontrarnos ante el acabado más deportivo de la gama.
La marca homologa un consumo combinado de 6 l/100 km, dato que se aleja de las cifras reales. Durante la prueba, el consumo medio se detuvo en los 7.5 litros, una cifra algo elevada en el segmento. Ascendiendo a los 8.6 litros en ciudad y bajó hasta los 7.1 litros en carretera. Su depósito de combustible tiene una capacidad de 52 litros.
El cambio manual de seis velocidades es cómodo de utilizar en el día a día. El escalonamiento es más bien abierto, pero el guiado, recorrido y dureza de la palanca del cambio me parecen acertados. Sí cabe destacar que, en líneas generales, su tacto es algo blando y presenta cierta holgura, pero no lo veo un problema.
Por último, quiero señalar que el interior está bien insonorizado del motor, aunque no es una mecánica especialmente refinada. Su sonoridad en aceleraciones fuertes y desde fuera del vehículo es elevada, sobre todo en frío. Por otra parte, recupera bien a bajo régimen, aunque la verdadera fuerza llega en la parte alta del cuentavueltas.
Version | 1.0 Ecoboost ST-Line - 3 cilindros en línea |
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Cilindrada | 999 cm³ |
Potencia | 140 CV (103 kW) @ 6.300 rpm |
Par | 180 Nm @ 4.400 rpm |
Peso | 1.355 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.096 / 1.765 / 1.645 mm |
Volumen Maletero | 356 (1.238) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 10,2 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 7,1 segundos (entre marchas) |
Velocidad máxima | 182 km/h |
Consumo homologado | 6 l/100 km en ciclo combinado |
Emisiones CO2 por km | 136 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Pegatina de la DGT | C |
Precio de partida | 27.191 euros (gama sin descuentos ni promociones) |
Comportamiento Ford EcoSport 1.0 EcoBoost 140 CV
La conducción del Ford EcoSport resulta bastante cómoda gracias a un puesto de conducción elevado. Esto nos permite dominar el tráfico diario de la urbe. El modelo ofrece una carrocería contenida, una visibilidad bastante buena en todos los ángulos y una dirección con asistencia en función de la velocidad.
Todo ello facilita las maniobras de aparcamiento y la conducción en ciudad. Además, se complementa con un diámetro de giro de 10,6 metros entre bordillos. El volante tiene 2,74 vueltas entre topes. Adicionalmente encontramos diversas asistencias como la cámara de marcha atrás o los sensores de aparcamiento delanteros y traseros.
Pero no hablamos de un modelo sólo apto para la urbe, y ese es otro de sus puntos fuertes. Gracias a su puesta a punto, permite que hagamos escapadas de larga distancia con buen confort. Sin duda alguna ha mejorado el aislamiento y la calidad de rodadura respecto a su predecesor. En todo caso, no es una referencia en estos aspectos.
La suspensión ofrece un esquema McPherson delante y un eje rígido detrás. Resulta firme para circular ligeros por autopista sin balanceos de la carrocería y con un buen filtrado de las irregularidades del asfalto. Solo en zonas urbanas con resaltos o movimientos rápidos del muelle se muestra algo más seco en el eje posterior.
Es en tramos de curvas lentas donde el EcoSport se muestra más perezoso. Carece de ese compromiso entre confort y agilidad del que presumen la gran mayoría de Ford. Su elevado centro de gravedad y su dirección, algo lenta -aunque bastante informativa-, no invitan a practicar una conducción deportiva.
Pese a ello, los cambios de apoyo resultan rápidos y las reacciones tan seguras como naturales. Básicamente, las ayudas no tardan en intervenir si le buscamos las cosquillas. En definitiva, este acabado ST-Line está pensado para aquellos que buscan más un coche vistoso que con cierto toque dinámico.
Por otra parte, los frenos tienen un tacto agradable y son fáciles de dosificar. Su eficacia a ritmo normal es buena. En el eje delantero encontramos discos ventilados de 300 mm. En el trasero, Ford ha montado unos frenos de tambor (229 mm). Suficiente y acertado para el tipo de uso que se le va a dar a este vehículo.
Fuera del asfalto, el EcoSport puede hacer sus pinitos en lo que a caminos fáciles se refiere. No hay tracción total y la altura libre al suelo es de 160 mm. Nos brinda un ángulo de entrada de 21º, un ángulo ventral de 23,3º y un ángulo de salida de 33,3º. Eso sí, ni encontramos tracción total ni los neumáticos son los más adecuados.
En materia de asistencias a la conducción y de seguridad, echamos en falta algunas de las últimas novedades del mercado. Podemos encontrar programador y limitador de velocidad, sistema de reconocimiento de señales de velocidad, detección y alerta de vehículos en el ángulo muerto, detector de fatiga y Alerta de tráfico cruzado posterior.
Equipamiento y precio
Los niveles de acabado para España son los ST-Line y Active. En seguridad todos contemplan los controles de tracción y estabilidad, múltiples airbags, asistente al arranque en cuestas, faros LED, TPMS, ABS, EBD, alarma, sistema MyKey de control parental, etc.
También de serie encontramos climatizador automático, elevalunas eléctricos, Apple CarPlay, Android Auto, cierre centralizado con mando, espejos térmicos y eléctricos, volante y pomo del cambio en piel, apoyabrazos delantero, barras de techo, control de crucero adaptativo, sistema de navegación con pantalla táctil de 8”…
Los ST-Line incluyen el paquete deportivo exterior, llantas de aleación de 17 pulgadas, detalles en negro brillante, suspensión deportiva, pedales de aluminio, aplique decorativo en umbral de puertas, tapizado mixto tela/piel con costuras en rojo, acceso y arranque sin llave y carrocería bitono, entre otros elementos.
Por su parte, el acabado Active suma el paquete off-road exterior con llantas de aleación de diseño específico de 17 pulgadas y pasos de rueda ensanchados, logotipos Active, alfombrillas específicas más resistentes, tapizado exclusivo, retrovisores pintados a contraste, inserciones cromadas, etcétera.
Los precios recomendados de la gama Ford EcoSport arrancan en 27.191 euros sin descuentos ni promociones para el ST-Line. La versión Active asciende a 27.659 euros sin descuentos ni promociones. En ambos casos hablamos del modelo equipado con motor 1.0 EcoBoost de 125 CV.
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.3
Notable
Desde diciembre de 2017 está a la venta en España la última entrega del Ford Ecosport, un modelo que en su anterior generación no tuvo excesivo éxito, pero que ahora apuesta fuerte por el diseño y la originalidad para conquistar a los más jóvenes. Su oferta de mecánicas y acabados es atractiva y su precio con los descuentos bastante suculento.
Lo bueno
- Diseño cargado de personalidad propia. Elementos curiosos como la forma de apertura del maletero.
- Un gran aliado en la urbe, con buena calidad para viajar.
- Entrega de potencia en un amplio rango de revoluciones, mecánica elástica.
- Precios interesantes con los descuentos.
- Buen equipamiento de serie.
Lo mejorable
- Oferta mecánica, de transmisiones y de acabados limitada.
- La potencia no se corresponde con las prestaciones.
- Echamos en falta el compromiso entre agilidad y confort de otros Ford.
- Le pesan los años en algunos aspectos. Por ejemplo, en seguridad y asistencias a la conducción.
- El portón trasero de apertura lateral puede no resultar del todo práctico. Requiere mucho espacio para abrirse.
- No destaca en habitabilidad ni espacio de carga.