Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.4
Notable
El Ford Transit Custom es la furgoneta más vendida en Europa y de cara a 2018 ha sufrido una profunda actualización interior y exterior para adaptarse a las necesidades de un conjunto de clientes cada vez más exigentes. Ofrece una imagen atractiva, un interior de mayor calidad cargado de equipamiento y tecnología, tres niveles de potencia para la mecánica y múltiples variantes tanto de carga como de pasajeros.
El segmento de los multispacio derivados de furgones le está robando gran parte de la clientela a los MPV grandes, pues estos resultan muy útiles para algunas empresas y particulares, especialmente en el caso de las familias numerosas. Si bien hay MPVs con siete plazas, estos vehículos son más versátiles y útiles al contar con mayor capacidad de carga y unas plazas mucho más holgadas.
En este sentido, Ford tiene mucho que decir al respecto, pues su Transit Custom es la líder indiscutible del mercado de los comerciales, aunque es justo señalar que la mayoría de las ventas se corresponden con empresas (o personas jurídicas, más concretamente). Sólo durante el pasado año, se vendieron más de 6.500 Ford Transit Custom en España y más de 10.000 Ford en este segmento.
Han pasado más de 50 años desde que la primera Ford Transit saliera de la línea de la fábrica de vehículos comerciales de Ford en Berkshire, Inglaterra, el 9 de agosto de 1965. Desde entonces, hemos visto de todo sobre su carrocería, desde una variante de rallies hasta una limusina, todo ello sin olvidar las radicales versiones de M-Sport o el récord de vuelta en Nürburgring con Sabine Schmidt tras el volante.
De cara a este 2018, el modelo se ha renovado por completo junto al Tourneo Custom, sustituyendo con ello a la versión presentada en 2012 para mantenerse en lo más alto del podio por cuarto año consecutivo. Cuenta con muchas novedades estéticas y un habitáculo con mayor empaque, al tiempo que se le ha dotado de una carga tecnológica y de equipamiento propia de un turismo.
Veamos con detalle qué novedades ofrece…
Diseño exterior
Uno de los mayores cambios en la nueva Ford Transit Custom ha tenido lugar en el exterior, donde la firma del óvalo azul ha introducido una nueva parrilla frontal, un rediseño de los grupos ópticos delanteros y nuevos paragolpes. En la zaga estrena carcasas para los pilotos y, a todo esto, se añaden colores más atractivos y vistosos, y diseño de llantas de aleación actualizados.
En la vista frontal destaca su gran parrilla. La luna delantera -con parabrisas térmico (en paquete 170€)-, al igual que toda la superficie acristalada del modelo, es realmente generosa, lo que contribuye notablemente a la visibilidad en todos los ángulos. Además, los enormes faros pueden emplear tecnología HID -248€- y para la luz diurna se emplean LED. Las luces antiniebla y los sensores de aparcamiento delanteros son de serie en este acabado.
La vista lateral está protagonizada por dos puertas correderas -186€- con protección plástica y apertura manual, contando estas con ventana flip open -124€-, cristales posteriores oscurecidos -62€- y estriberas laterales -496€-. En este caso, los espejos retrovisores ofrecen un cristal convexo inferior y cuentan con los intermitentes integrados y detector de ángulo muerto -248€-. El coeficiente aerodinámico Cx es de 0,37.
Hay disponibles nueve colores exteriores para la carrocería, entre los que podemos encontrar tonos clásicos y discretos, así como dos acabados: sólido o metalizado. En este caso tenemos un Naranja Vivo metalizado -434€.
Llenando los pasos de rueda nos encontramos con unas llantas de aleación de 16 pulgadas -248€- calzadas con unos neumáticos Continental Vanco 2 en dimensiones 215/65 R16 C 109/107 T. Respecto a su longitud, es la versión corta, pero alcanza los 4,97 metros de largo (5,34 metros la larga), 1,99 metros de ancho y 2,02 metros de alto (2,39 metros con techo alto), con una batalla de 3.933 mm (3.300 mm la larga).
En la zaga es donde más se aprecian sus similitudes con una furgoneta. Esta unidad cuenta con dos puertas equipadas con limpiaparabrisas -93€-, pero hay disponible un generoso portón -93€- que deja a ambos lados las discretas ópticas y mejora la visibilidad. En cualquier caso, podemos contar con cámara de marcha atrás -124€-.
En las puertas encontraremos los tiradores de apertura manual, ya que ni siquiera en el caso de equipar el portón podemos contar con apertura eléctrica. Tampoco falta la denominación del modelo, así como la palabra Ecoblue que nos sugiere que en las entrañas del modelo se esconde el nuevo y eficiente motor diésel de 2.0 litros. En el paragolpes se ubican los sensores de aparcamiento traseros.
Diseño interior
El interior del Ford Transit Custom destaca especialmente por sus grandes dosis de espacio, incluso si optamos por esta versión de carrocería corta. Atrás quedaron las rústicas furgonetas de hace unos años, ahora los multiespacio y los comerciales tienden a parecerse cada vez más a los turismos de las marcas, con una sensación de calidad mucho más elevada, y eso, es realmente positivo.
A pesar de todo, es inevitable encontrarnos con plásticos rígidos allí donde miremos. La sensación visual es sobria, pero agradable en conjunto gracias a algunos detalles como la pantalla del sistema multimedia, rematada en negro brillante (muy sucio, por otra parte). Es al tacto donde denota su mayor origen comercial, con ajustes que podrían mejorarse, especialmente en las partes bajas.
Si había algo que no nos gustaba de su predecesor era la gran cantidad de botones que se concentraban en la consola central, junto a una pantalla incrustada en el salpicadero que tenía poco o nada de práctico. Como se puede ver, ahora todos los elementos del salpicadero imprimen un diseño más limpio y ordenado, empezando por dejar solo los botones del aire acondicionado y el sistema multimedia.
El volante forrado en cuero equipa el Paquete Control de Crucero Adaptativo (reconocimiento de señales, asistente de carril, control de crucero adaptativo, asistente precolisión…), que añade una serie de botones para tener a mano funciones como el control de crucero y el selector de distancia a mantener con el vehículo que nos precede, su precio es de 682 euros.
Igualmente, de manera opcional -527€- se puede equipar el sistema de infoentretenimiento con una pantalla de 8 pulgadas con SYNC 3, navegador y el sistema de conectividad y control por voz SYNC 3 con compatibilidad para Apple CarPlay y Android Auto. Su funcionamiento, percepción táctil y gráficos son más que adecuados para este segmento.
Al hablar de modularidad, es cierto que abatir y desplegar los asientos resulta sencillo. Lo malo es que las banquetas no son deslizables ni el respaldo reclinable -ni siquiera la del copiloto-, al igual que tampoco pueden girarse los asientos. La habitabilidad es de diez en todas las plazas (tres banquetas dobles y tres asientos individuales), pues hay espacio a raudales y las puertas correderas dejan un espacio de acceso de 930 mm.
Además, en Ford han pensado especialmente en los ocupantes de las plazas traseras, pues los pasajeros de las segunda y tercera fila disponen de iluminación (halógena, por desgracia), altavoces y salidas de ventilación. Es una pena que no haya posavasos o apoyabrazos, o que los asientos no agarren más en todas las plazas para contrarrestar las inercias en las curvas. Los asientos de cuero parcial se reservan al acabado Sport.
Lo mismo ocurre con el espacio de carga. Esta unidad de carrocería corta tiene 922 litros de maletero con todas las plazas desplegadas (1.447 litros la versión larga). En total, el espacio trasero es de 1,3 m3. La altura al techo es de 1.382 mm, la anchura de 1.775 mm y la longitud con tres filas de asientos 687 mm (1.545 mm sin tercera fila). El piso queda a 588 mm del suelo.
Dignos de mención son los múltiples huecos portaobjetos de gran capacidad (hasta 25 litros de espacio solo en el panel de instrumentos) y, sobre todo, en las puertas. Hay espacio para botellas de dos litros, un hueco grande en el techo y diversos espacios sobre el salpicadero, el del conductor con toma de 12V y entrada USB adicional.
Motorización
Una de las grandes novedades de la Ford Transit Custom es la sustitución del veterano bloque de 2.2 litros por el nuevo EcoBlue de 2.0 litros. La nueva gama ofrece potencias que oscilan entre los 105 y 170 CV, dejando una interesante propuesta intermedia con 130 CV. Los usuarios pueden decantarse por la caja de cambios manual de seis relaciones o la automática PowerShift.
Esta nueva generación de motores, basada en el rendimiento y la tecnología de los premiados motores de gasolina EcoBoost, ofrece una mejorada eficiencia de combustible y una notable reducción de las emisiones de CO2 y NOX. Además, se ha mejorado un 20 por ciento el par motor, que ahora está disponible a 1.250 rpm, lo que garantiza un gran empuje desde muy bajas vueltas sin excesivas vibraciones.
La nueva arquitectura del motor proporciona una fricción reducida y un sistema de combustión mucho más limpio. Los sofisticados procesos de post-tratamiento de gases de escape permiten unas emisiones ultra bajas en línea con las normas Euro VI, así como una reducción del 55% en las emisiones de NOx. La mecánica cuenta con Start/Stop.
Las tecnologías incluyen un sistema de admisión integrado; un turbocompresor de baja inercia con materiales de motores diseñados para resistir mejor las altas temperaturas; y un nuevo sistema de inyección de combustible de alta presión que es más sensible y preciso. En conjunto, el bloque motor se mueve con mucha soltura, girando a 1.900 rpm cuando circulamos a 120 km/h.
Lo cierto es que sus cifras son más que buenas para un comercial, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 12,3 segundos, un 80-120 km/h en 8,2 segundos en cuarta velocidad y una velocidad punta de 170 km/h. En cualquier caso, hemos de tener en mente el volumen de carga con el que solemos circular, pues en viajes 105 CV se nos van a quedar cortos, pero quizás con 130 CV tenemos suficiente.
En el caso de esta mecánica, hay potencia de sobra en cualquier circunstancia, pudiendo incluso resultar excesiva para algunos usuarios. A pesar de ello, los consumos reales son ajustados, aunque algo más elevados que los homologados por Ford (7.9 litros en ciudad, 5.8 litros en carretera y 6.6 litros en combinado). Tras la semana de pruebas por autopista y ciudad, el consumo se detuvo en 7,3 l/100 km, no está nada mal… El depósito de combustible tiene una capacidad de 80 litros.
Por último y, respecto al cambio, cabe señalar que este es el típico de un vehículo comercial, con un embrague bastante alto y un tacto que dista del de un turismo o un MPV, al igual que su guiado y precisión. En cualquier caso, no es incómodo, sólo requiere un poco de adaptación, con unas relaciones pensadas para tirar de mucho peso y un escalonamiento bastante abierto.
Una de las cosas que has de tener en cuenta a la hora de adquirir un vehículo de estas características es cómo matricularlo. No matricularlo como turismo puede tener sus ventajas fiscales, pero en ese caso no tendrás los mismos límites de velocidad que un turismo. Atento a la tabla:
Vehículos derivados de turismo y vehículos mixtos adaptables | Autopista/Autovía | 100 km/h |
Vía convencional con 1,5 metros arcén | 90 km/h | |
Resto vías fuera de poblado | 80 km/h | |
Furgones | Autopista/Autovía | 90km/h |
Vía convencional con 1,5 metros arcén | 80 km/h | |
Resto vías fuera de poblado | 70 km/h |
Ficha técnica
Version | 2.0 TDCi EcoBlue - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 1.998 cm³ |
Potencia | 170 CV (125 kW) @ 3.500 rpm |
Par | 405 Nm @ 1.750 - 2.500 rpm |
Peso | 2.250 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.973 / 1.986 / 2.000 mm |
Volumen Maletero | 922 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 12,3 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 8,2 segundos |
Velocidad máxima | 170 km/h |
Consumo homologado | 7,9 / 5,8 / 6,6 l/100 km (urb. / extraurb. / comb.) |
Emisiones CO2 por km | 174 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Precio de partida | 37.050 euros (este motor y acabado sin descuentos mat. como turismo) |
Comportamiento
El Ford Transit Custom es un multiespacio suficientemente cómodo para largos viajes, pero tiene sus limitaciones tanto en ciudad como en tramos de curvas. Sus dimensiones se hacen notar a la hora de maniobrar y entre el tráfico diario, con un radio de giro de 11,6 metros entre bordillos y una visibilidad limitada hacia atrás, aunque podamos equipar cámara y sensores traseros.
En autopista, a pesar de sentirse ágil con esta mecánica, la sensación de ir en una furgoneta es perceptible, especialmente por la vertical postura de conducción. Además, es inevitable que el ruido aerodinámico y los balanceos sean acusados cuando circulamos a 120 km/h. No llega a resultar muy incómodo, pero sin duda alguna en este aspecto los MPV salen más beneficiados.
Por otra parte, la suspensión está pensada para soportar bastante peso, por lo que su tarado es bastante blando. La gran diferencia es que permite equipar una suspensión neumática trasera que se ajusta automáticamente para mantener una altura de marcha constante, independientemente de las condiciones de carga, para una conducción más suave y cómoda. Esta se combina con el control vectorial de par de serie.
Filtra de forma adecuada las irregularidades del terreno, pero a la hora de circular por carreteras con curvas, te recomiendo reducir notablemente la velocidad para que tus pasajeros no vayan de un lado a otro dando tumbos. Está pensado, en todo caso, para ir tranquilo y ofrecer gran confort en autopista, pues la dirección tampoco invita a circular deprisa.
Cumple de forma notoria su función en una conducción tranquila y goza de buen tacto, pero aquellas personas acostumbradas a otro tipo de vehículos notarán que su rapidez, feedback y precisión requieren cierto período de adaptación. En todo caso, es justo decir que es de las mejores del segmento.
Equipamiento y precio
El Ford Transit Custom se ofrece en diversas carrocerías: Van, Kombi, Mixta y Doble Cabina. Dentro de cada carrocería podemos ver varias longitudes (corta y media), alturas (bajo y medio) y masas máximas autorizadas (de 2,5 a 3,6 toneladas). Las combinaciones son múltiples y, en función de la configuración seleccionada, encontraremos disponibilidad en los diferentes acabados: Ambiente, Trend y Sport.
Centrándonos en la variante Kombi que hoy nos atañe, esta parte de un precio de 31.400 euros matriculada como turismo y sin incluir descuentos ni promociones (Kombi 320 105 CV Ambiente). No es precisamente un vehículo barato si lo compramos con algunos MPVs o derivados de comerciales más pequeños, pero las novedades en equipamiento permiten situarlo en un escalón superior respecto a muchos de sus rivales.
En materia de seguridad incluye novedades como múltiples airbags, la alerta de cambio de carril, detector de objetos en ángulo muerto, alerta de tráfico trasero, lector de señales de tráfico o detector de fatiga. También en confort ha ganado bastantes enteros y vemos los sistemas multimedia de última generación con pantallas de hasta ocho pulgadas y compatibilidad Apple CarPlay/Android Auto.
Las unidades más equipadas tendrán navegador y cámara de visión posterior. Según el nivel de acabado elegido hay que destacar el tapizado en piel en dos tonos, la estética deportiva (Sport), cristales tintados, climatizador independiente, retrovisores térmicos y abatibles, control de crucero adaptativo y limitador de velocidad, faros de xenón, pilotos traseros LED o sistema de frenada de emergencia, entre otros.
- Múltiples tipos de carrocerías, longitudes, alturas, MMA y acabados para adaptarse a un sinfín de necesidades.
- Diseño exterior e interior, así como equipamiento de serie/opcional propio de los turismos del fabricante, especialmente en materia de seguridad y asistencia a la conducción, algo que es de agradecer.
- Gran comodidad de los asientos para largos viajes, ofreciendo mucho espacio.
- Los huecos portaobjetos son abundantes y de gran tamaño.
- Buenas dosis de potencia en cualquier circunstancia, con buen empuje desde muy bajas vueltas y sin excesiva rumororsidad y vibraciones.
- Consumos destacables.
- Las posibilidades de modularidad son inferiores a las de otros comerciales y MPVs grandes (los asientos no se pueden girar, el respaldo no se reclina hacia detrás…).
- Echo en falta algunos elementos de los MPV, como la posibilidad de equipar puertas laterales o portón trasero de accionamiento eléctrico.
- Menores comodidades para los pasajeros de la segunda y tercera fila de asientos que algunos competidores como el Opel Vivaro o la Renault Traffic.
- Se han trabajado los detalles en este acabado enfocado al transporte de pasajeros, pero no está todo tapizado, al tiempo que los ajustes y los materiales empleados todavía son sensiblemente pobres.
- Mayores limitaciones que un MPV grande por dimensiones.