Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.5
Notable
Con el nuevo Hyundai Santa Fe la firma coreana ha llevado a cabo un excelente trabajo de diseño y desarrollo que ha dado como fruto una cuarta generación sublime, tanto a nivel estético como a nivel de comportamiento y construcción. Mucha tecnología y gran atractivo visual al servicio de las familias que busquen distinguirse con un SUV de 7 plazas muy llamativo y a un precio más que razonable.
Nada queda ya de esa marca de pequeños modelos utilitarios baratos que conocíamos, ahora Hyundai es una gran fabricante capaz de desarrollar modelos urbanos, compactos, todoterrenos, SUV o incluso híbridos y vehículos de alto rendimiento. Y ojo, porque lo más curioso de todo es que son buenos en sus respectivos segmentos.
El nuevo Hyundai Santa Fe es un modelo que lleva estando presente en el mercado español desde 2001 y del que ya hemos conocido cuatro generaciones. Ubicado en el segmento D-SUV, el todocamino se fabrica en Corea -para el mercado local y para el mercado europeo- y en los Estados Unidos -para el mercado norteamericano-.
A diferencia de otras generaciones, en esta ocasión Hyundai España sólo traerá el Santa Fe de siete plazas -el de cinco plazas no merece la pena por precio-, de forma que esta cuarta generación carecerá del Grand Santa Fe. Sin embargo, aterriza con una alternativa en gasolina, opción que llevaba ya unos cuantos años sin estar disponible en el Viejo Continente.
Rival de modelos como los Kia Sorento, Mitsubishi Outlander, Škoda Kodiaq, SEAT Tarraco, SsangYong Rexton, Renault Koleos y Nissan X-Trail, ofrece un abundante equipamiento de serie en sus diversos acabados y nuevas tecnologías tanto de confort como en materia de asistencias a la conducción. Vamos a dar un repaso a todas sus novedades, que no son pocas…
Diseño exterior
El nuevo buque insignia de Hyundai cuenta con un diseño mucho más expresivo, a la vez que fuerte. Las nuevas líneas de diseño otorgan una gran robustez visual al modelo que es elegante a la par que tecnológico. Si nos fijamos en el frontal, introduce una enorme parrilla en forma de cascada.
Al igual que ocurre en el Hyundai Kona, el nuevo Santa Fe cuenta con tres grupos de faros. Uno superior con la firma lumínica LED para la luz diurna; uno intermedio para la iluminación principal y la de carretera; y una inferior para las antiniebla. El acabado Essence es en el único en el que solo encontramos LED para la iluminación diurna.
En una posición intermedia se localizan los sensores de aparcamiento frontales, junto a una segunda toma de aire de menor tamaño, mientras que en el tercio inferior cobra protagonismo un embellecedor plástico en el que no falta un protector de bajos en color plata, a juego con el cromado que pone fin al marcado capó.
Las líneas del capó quedan bien marcadas y dan paso a una generosa luna delantera que ofrece excelente visibilidad.
Visto de perfil de perfil ha ganado en empaque. El alargado capó y los marcados pasos de rueda le otorgan una vista más dura y musculosa. Presenta una generosa superficie acristalada -con cristales posteriores tintados- y no faltan nuevamente los cromados para destacar su elegancia.
Llenan los pasos de rueda unas llantas de aleación de 18 pulgadas calzadas con neumáticos Kumho Crugen HP91 en dimensiones 235/60 R18 107V en ambos ejes. La superficie de las puertas es limpia salvo en su parte inferior, donde vuelve a estar presente el embellecedor plástico a contraste.
Los espejos retrovisores integran los intermitentes y cuentan con plegado eléctrico.
Las dimensiones exteriores hacen que la nueva generación del Santa Fe parezca aún más grande. Con una longitud de 4.77 metros, un ancho de 1.89 metros y una altura de 1.68 metros, el modelo es ligeramente más grande que la tercera generación. Por su parte, la batalla es de 2.765 milímetros.
En la zaga también gana en prestancia, con unas ópticas traseras alargadas de diseño tridimensional que llevan tecnología LED. Tengo que subrayar que la tecnología LED no está presente en las luces de dirección, algo que aportaría un plus de calidad y mayor seguridad.
Además, como pega podemos decir que el grupo inferior de pilotos traseros que se encuentra compuesto por catadióptricos, luz antiniebla, luz de marcha atrás y luz de dirección se ha posicionado muy bajo, quedando en una posición muy propensa a golpes y arañazos.
El portón de generosas dimensiones no es eléctrico, pero pesa poco, por lo que resulta cómodo subirlo y bajarlo. Debajo del mismo, el embellecedor plástico a contraste protagoniza todo el paragolpes, donde volvemos a ver una protección de color plata y la presencia de detalles cromados.
Llaman especialmente la atención elementos como el sutil spoiler superior, los aletines de la luna en negro y la salida de escape de generoso tamaño. Tampoco falta tira de sensores de aparcamiento posteriores y la cámara de marcha atrás.
Diseño interior
El habitáculo del Hyundai Santa Fe es una de sus mejores bazas. El acceso es sencillo gracias al ángulo de apertura de sus puertas y se han mejorado algunos plásticos, todo ello rematado por una terminación está más cuidada. También estrena salpicadero, introduciendo la pantalla táctil tipo tableta de hasta ocho pulgadas en lugar de la integrada.
En conjunto, el interior cuenta con una calidad de fabricación elevada. Los ajustes son buenos, al tiempo que los materiales de fabricación cuentan con acolchado en las zonas clave y con plásticos más duros en las zonas inferiores, aunque echo en falta algo más de moqueta en las partes bajas, así como algo menos de superficies en acabado gloss debido a su fácil deterioro.
El diseño del salpicadero está claramente orientado hacia el conductor, buscando que éste tenga que desviar lo mínimo posible su atención de la carretera. En él encontramos una combinación de colores para resultar más atractivo y juvenil, contando con una superficie acolchada que mejora la sensación al tacto.
Es un diseño simple que se combina con diversos elementos metálicos y materiales de tacto suave que causa muy buena impresión. La verdad es que no hay un solo elemento al que no se haya prestado atención y que podamos calificar de “malo”. La botonería queda dividida en dos zonas diferenciadas: la de monitorización y la de control del climatizador.
La primera de ellas está centrada exclusivamente en proporcionar la información a los ocupantes de la forma más clara posible a través de la instrumentación, los botones para controlar el sistema multimedia y la pantalla de 8 pulgadas, cuyo manejo resulta fácil, rápido e intuitivo. Tiene Apple CarPlay, Android Auto, sistema Hi-Fi Krell y acceso a internet.
Te costará encontrar algún tornillo visible, el maletero está perfectamente rematado y todos los mandos transmiten buenas sensaciones. Hay tres colores para el interior.
Justo por debajo de los controles del climatizador bizona encontramos un hueco portaobjetos que también acoge las dos entradas USB, la toma de corriente, la carga inductiva del teléfono y la toma auxiliar, seguida de la palanca del cambio automático y los botones del control de velocidad de descenso, los sensores de aparcamiento y el freno de mano eléctrico, entre otros.
Por último, vemos un apoyabrazos central fijo que esconde una guantera de tamaño aceptable. El volante multifunción es ahora más vistoso y alberga los mandos de control del teléfono, el equipo multimedia y el control de crucero y limitador. Como el resto de las interfaces del vehículo, es intuitivo y fácil de manejar.
Tras el volante encontramos el nuevo cuadro de instrumentos digital, compuesto por una pantalla de 7 pulgadas que presenta varios estilos en función del modo de conducción seleccionado. Por primera vez en Hyundai, el Santa Fe dispone de Head-Up Dsiplay (HUD), que proyecta la información de conducción relevante sobre el parabrisas.
En las plazas posteriores hay espacio suficiente para que dos adultos viajen cómodamente tanto por anchura como por altura (+18 mm) y espacio para las piernas (+38 mm). Podrían ir incluso tres personas que no sean muy corpulentas en trayectos no muy largos, pero no es lo recomendable a pesar de sus buenas cotas.
Todas las plazas son amplias para piernas y hombros, pero si hablamos de la tercera fila de asientos, compuesta por dos plazas, nos encontramos con que, a pesar de ser anchas, la distancia al techo resulta incómoda para gente de más de 1,70 metros de altura. Están más enfocadas a niños.
Podrán sacarte de un apuro con adultos, pero su acceso requiere cierta agilidad y las rodillas habrán de ir flexionadas, aunque el espacio para las piernas se ha mejorado en 22 mm. Eso sí, la superficie de la tercera ventanilla lateral se ha aumentado un 41% para disminuir la sensación de claustrofobia y cuentan con muchas comodidades.
A pesar de que no cuentan con iluminación propia, sí que podemos ver en este acabado salidas de ventilación con regulación de intensidad, apoyabrazos, posavasos y huecos portaobjetos para la tercera fila, así como diversos botones que nos permiten abatir rápidamente la segunda fila de asientos -en proporción 40/20/40-.
Respecto al maletero, este se sitúa en los 625 litros (+40 litros e esta generación) y en los 1.625 litros con la segunda fila de asientos abatida. Si montamos la tercera fila de asientos, nos queda una capacidad de solo 130 litros. La segunda fila es desplazable longitudinalmente y el respaldo se puede ajustar en tres posiciones.
Está bien rematado, presenta unas formas regulares y tiene varios puntos de anclaje para sujetar la carga, dejando un suelo totalmente plano al abatir los respaldos. La loneta que lo cubre transmite suficiente calidad y, bajo el piso del maletero, hay un hueco para la cortinilla cubre-equipajes y otras herramientas. Por desgracia, el portón no es eléctrico.
Motorización
La cuarta generación del Hyundai Santa Fe se presenta con dos motores diésel y uno de gasolina, todos de desarrollo propio y capaces de cumplir con los nuevos estándares de emisiones Euro 6d Temp. La gama se verá ampliada con la incorporación de dos mecánicas más, de nuevo desarrollo e híbridas. Una normal y otra híbrida enchufable.
El motor de acceso es el diésel 2.0 CRDi, que se ofrece con 150 CV (110 kW) y 400 Nm de par. Está asociado a un cambio manual de seis velocidades y a la tracción delantera. El motor 2.2 CRDi entrega 200 CV (147 kW) y 440 Nm de par y está disponible con una caja de cambios de seis velocidades o la automática de ocho, con tracción delantera o total.
Por último, el motor de gasolina Theta II con 2.4 litros de cilindrada entrega 185 CV (136 kW) y ofrece 241 Nm de par. Está disponible con cambio automático de seis velocidades y tracción total. Es el que he elegido para esta prueba, pues es una de las grandes novedades y nos lleva a plantearnos: ¿Tiene sentido un bloque de gasolina en un SUV de siete plazas?
Hablamos de un bloque de aluminio con dos árboles de levas en la culata e inyección directa que, con 2.360 cm3, cuatro cilindros y cuatro válvulas por cilindro, desarrolla una potencia de 185 CV (136 kW) a 6.000 rpm y un par máximo de 241 Nm a 4.000 rpm. El Start/Stop es de serie.
Lo cierto es que no hablamos de una mecánica prestacional y su aceleración es bastante lineal y progresiva, subiendo mucho de vueltas cuando necesitamos un extra de potencia. Es un acierto haberla asociado a la transmisión automática de seis relaciones, ya que el conjunto es más aprovechable, aunque si acostumbras a ir cargado, se te quedará algo corto.
Para que os hagáis una idea, empieza a empujar con cierta fuerza realmente por encima de las 2.500 vueltas, aunque en una conducción tranquila, la transmisión sube de marcha sobre las 2.100 rpm. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 10,4 segundos y de recuperar de 80 a 120 km/h en 8,5 segundos (entre marchas).
Por otra parte, he de señalar que no he apreciado gran diferencia a nivel de suavidad entre la versión diésel que tuve la ocasión de probar hace un tiempo y este gasolina. Si ser ni mucho menos molesto, al ralentí se aprecian las vibraciones y la rumorosidad de la mecánica, por lo que no me parece una razón para descartar el diésel.
Lo mismo ocurre a nivel consumos. Hyundai declara 13.3 litros en ciudad, 7.1 litros en extraurbano y 9.3 litros en ciclo combinado, unas cifras muy similares a las reales que he logrado obtener, pero aún así bastante elevadas. Además, ten en cuenta que al aprovechar las capacidades de carga y pasajeros del modelo el consumo será mayor.
El consumo urbano real obtenido ha rondado los 14 litros, bajando al entorno los 7.7 litros en carretera y deteniéndose en una media de 9.2 litros a los 100 kilómetros tras la semana de pruebas. El depósito de combustible tiene 71 litros de capacidad, lo que al menos garantiza una autonomía aceptable a la hora de viajar.
Respecto al cambio automático por convertidor de par de seis relaciones, este me ha parecido suave en funcionamiento y suficientemente rápido como para gestionar las necesidades de nuestro pie derecho, pero no brilla especialmente en ningún aspecto. La palanca tiene un modo secuencial y hay levas tras el volante.
Ficha técnica
Version | 2.4 GDI - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 2.360 cm³ |
Potencia | 185 CV (136 kW) @ 6.000 rpm |
Par | 241 Nm @ 4.000 rpm |
Peso | 1.780 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.770 / 1.890 / 1.680 mm |
Volumen Maletero | 625 (1.625) [130 con 7 plazas]) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 10,4 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 8,5 segundos |
Velocidad máxima | 195 km/h |
Consumo homologado | 10,3 / 7,1 / 9,3 l/100 km (urb. /extraurb. / comb.) |
Emisiones CO2 por km | 215 g/km de CO₂ (Euro 6d-TEMP) |
Precio de partida | 51.400 euros (este motor y acabado sin descuentos) |
Comportamiento
Las mejoras a nivel dinámico en el nuevo Hyundai Santa Fe se han centrado en la agilidad, el confort, la calidad de rodadura y los sistemas de asistencia a la conducción. Encontrar la postura óptima es sencillo gracias a los ajustes eléctricos del asiento del conductor, con una posición elevada que mejora la visibilidad en todos los ángulos.
No es un vehículo que nos limite a la hora de movernos en la ciudad a pesar de tratarse de un SUV de siete plazas. Todo lo contrario, la dirección nos ofrece un buen diámetro de giro -11.4 metros- y, junto a la mencionada buena visibilidad (algo peor solo a través de la luna posterior), encontramos los sensores de aparcamiento y la cámara de marcha atrás.
Sin embargo, donde realmente vas a disfrutar del Santa Fe es en autopista, pues es fácil percibir una mayor calidad de rodadura y se ha mejorado la insonorización. En su conjunto es bastante buena, eso sí, no es de las mejores que he experimentado en el segmento. También se ha incrementado el confort a bordo.
El equipo de frenos (ventilados delante y macizos detrás) es eficaz y fácilmente dosificable.
Las suspensiones -McPherson en el eje delantero y multibrazo en el trasero- filtran con eficacia las irregularidades del asfalto, aunque este se encuentre deteriorado, al tiempo que contienen la carrocería notoriamente cuando circulamos algo más ligeros por autovía o carreteras secundarias. Es más ágil que su predecesor y donde mayores bandazos de la carrocería notarás será en curvas lentas dado su peso y altura.
En cualquier caso, es lo habitual en el segmento y no es un coche pensado para buscarle las cosquillas, sino para disfrutar de los largos viajes y las excursiones de fin de semana con la familia. Lo importante es que siempre muestra reacciones naturales, predecibles y seguras para el conductor, sin sorpresas desagradables.
Esto se complementa con un gran número de sistemas de asistencia y seguridad. Una de las que más me ha llamado la atención es el avisador de ocupantes trasero (el primero en la industria del automóvil que nos recuerda que las plazas traseras están ocupadas y evita que olvidemos mascotas o niños).
No menos importante resulta el asistente de salida segura, que bloquea las puertas en caso de que el coche detecte un objeto aproximándose por su ángulo muerto. Tampoco faltan el asistente de tráfico cruzado, el asistente de choque frontal con detección de peatones, el asistente de mantenimiento de carril o la advertencia de ángulo muerto, entre otros.
Respecto a sus capacidades fuera del asfalto, el modelo equipa el sistema de tracción HTRAC, un viejo conocido que se estrenó en el Hyundai Genesis. Este sistema se basa en la tecnología de tracción a las cuatro ruedas y controla la entrega de potencia de las ruedas de forma variable.
El sistema aumenta la tracción en nieve, grava y, por supuesto, en superficies de carretera irrregulares, al tiempo que mejora el rendimiento en las curvas. La relación de distribución de par cambia con los modos de conducción y se muestra en el cuadro de instrumentos. En este caso se completa con la posibilidad de bloquear del diferencial.
En condiciones resbaladizas, el sistema distribuye la potencia a las cuatro ruedas automáticamente.
En el modo deportivo, el HTRAC ofrece una mayor aceleración y puede llegar a transmitir hasta el 50% de par al eje trasero. En el modo confort, ofrece una estabilidad mejorada y la entrega de par a las ruedas traseras alcanza el 35%. En modo eco, proporciona una mayor eficiencia, al enviar potencia sólo a las ruedas delanteras.
También encontramos un asistente de descenso de pendientes y unas cotas aceptables, aunque los neumáticos no son los más idóneos para aventurarse campo a través. Más concretamente, cuenta con un ángulo de entrada de 18.5º, de salida de 21.2º y ventral de 15.7º, con una altura libre al suelo de de 185 mm.
Equipamiento y precio
La gama del Hyundai Santa Fe 2019 cuenta con los acabados Essence, Klass, Tecno, Style y Style Limited, lo que representa una oferta bastante generosa.
En todos ellos se incluye de serie el asistente al arranque en cuestas, climatizador automático de dos zonas, ordenador, volante en piel, espejos térmicos, sistema de sonido con siete pulgadas, Apple CarPlay, Android Auto, bluetooth, USB, llantas de aleación de 17 pulgadas, cámara posterior, sensor de lluvia, siete plazas, alerta de cambio de carril, detector de fatiga, detector de peatones…
La terminación Klass añade el freno de mano eléctrico, luces antiniebla con iluminación en curva, paquete cromado exterior, cristales tintados, retrovisores plegables, asientos delanteros eléctricos (5 reglajes), sistema multimedia con pantalla de 8 pulgadas, sistema de audio con subwoofer, brújula, faros LED, radio digital, acceso y arranque sin llave, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, SmartBeam y protector de bajos, entre otros.
El nivel Tecno suma el tapizado en piel, asientos eléctricos y térmicos, llantas de aleación de 18 pulgadas, retrovisor interior fotosensible, volante calefactable, apliques decorativos exclusivos, cargador de móvil sin cables, control de crucero adaptativo, techo de cristal panorámico, Head–Up Display, navegador, lector de señales de tráfico, sistema de sonido Krell…
Por último, el nivel Style cuenta con los asientos delanteros ventilados, asientos traseros térmicos, cortinillas integradas en las puertas traseras, llantas de aleación de 19 pulgadas, portón eléctrico, control de estabilidad antivuelco, detector de objetos en ángulo muerto y en maniobras de marcha atrás, sistema de visión 360º y enchufe 230V.
El acabado Style Limited presume del tapizado en cuero especial y las llantas de aleación exclusivas.
Hyundai España ha comunicado que, si se financia con la marca y se entrega un usado, es posible acceder al nuevo Santa Fe 2.0 CRDi 150 CV Essence desde 29.700 €. En todo caso, los precios recomendados en nuestro país para el Hyundai Santa Fe 2019 sin descuentos ni promociones son los siguientes:
Motor | Essence | Klass | Tecno | Style | Style Limited |
2.4 GDI 185 CV 4×4 6AT | – | 45.100€ | 51.400€ | – | – |
2.0 CRDi 150 CV 6MT | 36.900€ | – | – | – | – |
2.2 CRDI 200 CV 6MT | – | 40.900€ | – | – | – |
2.2 CRDi 200 CV 8AT | – | 43.100€ | 49.400€ | – | – |
2.2 CRDI 200 CV 4×4 8AT | – | – | 51.400€ | 55.200€ | 55.500€ |
- Calidad general y tacto de los materiales muy bueno. Gran empaque del conjunto.
- Buenas dosis de espacio interior.
- Equipamiento de serie generoso.
- Equipamientos cerrados, sin extras que incrementen desproporcionadamente la factura final.
- Buenos precios con los descuentos.
- Buena habitabilidad en la segunda y tercera fila de asientos, incluso para adultos en caso de necesidad.
- No hay túnel central que moleste a los pasajeros de atrás.
- Gran mejora en dinamismo y confort.
- El portón no cuenta con accionamiento eléctrico en este acabado.
- Mecánica frugal si aprovechamos las posibilidades de carga del modelo.
- Consumos elevados, mejor decantarse por una de las versiones diésel.
- Algunos acabados gloss desmerecen un interior que por lo general es muy bueno tanto en materiales como en montajes.
- A pesar de que Hyundai nos ha comentado que las siete plazas tienen un precio testimonial, nosotros nos decantamos por ofrecer la variante de cinco plazas y la de siete plazas en opción.
- El modelo carece de rueda de repuesto.