Toyota ha sido siempre una de las marcas de referencia en modelos 4×4. Entre ellos se han distinguido, desde hace más de medio siglo, el Toyota Land Cruiser y el Toyota Hilux. Ambos siempre han destacado por sus sobresalientes niveles de calidad, durabilidad y fiabilidad –Quality, Durability and Reliability (QDR)-. Hoy probamos el Land Cruiser 5p 204 CV.
Han pasado ya nada menos que 67 años desde que conociéramos el primer Toyota Land Cruiser. Los todoterrenos no abundan en el mercado, y esa es precisamente una de las razones por las que este modelo resulta tan sumamente especial. A lo largo de su historia, se han vendido en torno a 10 millones de unidades. Actualmente, se comercializa en 195 países.
En 2020 el modelo se renovó ligeramente para seguir siendo un rival duro de pelar frente a sus principales alternativas. Con más equipamiento y esta nueva mecánica de 204 CV, el Land Cruiser ofrece un carácter más robusto y premium, nuevas opciones y unas todavía mejores cualidades dinámicas gracias a diversos sistemas de ayuda a la conducción.
Como sabrás, esta generación del mítico todoterreno que lleva ya 12 años a la venta se enfrenta a rivales como el Jeep Wrangler, el Land Rover Defender, el Land Rover Discovery o el Mercedes-Benz Clase G. Es bastante caro sin los descuentos, pero más asequible que los modelos de alta gama mencionados. Los británicos, además, tienen un chasis monocasco.
Diseño exterior
En su última entrega, el Land Cruiser es una evolución del modelo anterior estéticamente hablando. Se mantiene casi intacta la base ya conocida, pero tras el lavado de cara de 2018 se reconoce por el nuevo frontal más elegante en el que se han modificado los paragolpes, las ópticas principales LED e incluso la parrilla. En conjunto, gana en empaque y robustez.
La vista lateral está protagonizada por una amplia superficie acristalada con los cristales posteriores tintados en opción. Junto a las enormes lunas delantera y trasera, garantizan una buena visibilidad. Destacan también las puertas de superficie limpia y unos marcados pasos de rueda. Se complementan con las estriberas laterales y los enormes retrovisores.
Llenando los pasos de rueda vemos unas llantas de aleación de 19 pulgadas. Están calzadas con neumáticos Bridgestone Dueler A/T de medidas 265/55 R19 109V en ambos ejes. Las dimensiones del vehículo varían en función de si elegimos la carrocería de tres o cinco puertas. El tres puertas mide 4.39 metros de largo, 1.85 metros de ancho y 1.83 metros de alto.
La batalla asciende a 2.450 milímetros. En el caso del cinco puertas, hablamos de 4.84 metros de largo, 1.85 metros de ancho y 1.84 metros de alto. La batalla mide 2.790 milímetros. Las vías delantera y trasera miden lo mismo en ambas versiones, 1.585 mm en ambos ejes. El coeficiente aerodinámico es de 0,32, una cifra bastante razonable.
Para la carrocería se ofrecen 10 colores de tonos clásicos y acabado sólido o metalizado. En este caso vemos el Azul Medianoche metalizado. En la zaga hay nuevas carcasas para los pilotos traseros LED, un paragolpes con nuevas formas y pequeños detalles específicos en el portón. Este mantiene la apertura de forma lateral, aunque permite abrir solo el cristal.
Visto desde arriba, este modelo puede equipar un techo solar practicable que es de serie en los acabados VXL y Limited. En el resto no hay disponibilidad ni siquiera de manera opcional. Curiosamente, no encontrarás antena sobre el techo. También se pueden equipar dos barras longitudinales de techo opcionales rematadas en color plata y enganche de remolque.
Diseño interior
El Toyota Land Cruiser recibe novedades en el habitáculo, aunque los cambios apenas son notables. Mantiene la elevada sensación percibida, pero nos costaría encasillarlo en el segmento premium como afirma la marca. Algunos ajustes no transmiten toda la solidez que deberían y tenemos una cortinilla de apertura y cierre manual para el techo solar (no eléctrica).
Si bien es cierto, se hace un uso abundante de materiales agradables a la vista y al tacto. Es más notorio en las partes altas del salpicadero, reservándose los plásticos rígidos para las partes menos visibles y más sufridas. En términos de diseño, mantiene un salpicadero que se sitúa bajo para favorecer la visibilidad y cuenta con elementos del Land Cruiser 200, como el volante o el pomo de la palanca de cambios.
Es novedad la instrumentación, ahora más completa y visual. La consola central cuenta con mandos sencillos de manejar y hay un nuevo sistema multimedia de última generación. Integra Apple CarPlay y Android Auto como novedades, contando con un nuevo diseño y una pantalla de ocho pulgadas con mandos físicos. Permite visualizar dos informaciones distintas al mismo tiempo.
Debes saber que la navegación es opcional. Se trata de un sistema algo más fluido que el anterior, pero todavía resulta algo lento y se mantiene por detrás de algunos de sus competidores en gráficos y calidad. Por su parte, el sistema de cámaras perimetral ofrece numerosas vistas y resulta de gran ayuda al maniobrar en ciudad o fuera del asfalto.
También podemos encontrar un salto de calidad en el equipamiento de serie y opcional. Por lo general, es bastante ergonómico y más intuitivo que antes, aunque algunos botones se mantienen ligeramente escondidos. En términos de habitabilidad, hablamos del mismo vehículo, con una situación elevada de los asientos.
Destaca un acceso amplio, aunque alto, manteniendo las mismas cotas en todas las plazas. En la segunda fila de asientos pueden viajar con comodidad hasta tres adultos tanto por espacio para las piernas como por anchura a la altura de los hombros. Además, los asientos pueden regularse tanto longitudinalmente como en el respaldo. Es extremadamente cómodo.
La tercera fila de asientos es de serie en todas las versiones de cinco puertas salvo en el modelo de acceso a la gama. Lo cierto es que las plazas son algo menos estrechas de lo que me esperaba, aunque su acceso resulta bastante complicado. Requiere saltar por encima de los asientos. Son las mismas que en su predecesor.
En ellas pueden viajar dos adultos de estatura media (hasta 1,75 metros) con cierta comodidad. El hueco bajo los asientos de la segunda fila no resulta abundante, por lo que los pasajeros de la tercera fila llevarán las rodillas bastante flexionadas. Eso sí, gozan de muchas comodidades, como posavasos, huecos portaobjetos, apoyabrazos, iluminación o salidas de ventilación independientes.
Con todo ello, se convierte en una de las mejores opciones de siete plazas por espacio. Extraer la tercera fila de asientos no es tan sencillo como en otros modelos del mercado en los que basta con tirar de ellos. Hemos de sacar con cierta fuerza la base de estos del piso del maletero.
Además, cuando queremos montar esta fila de asientos, hemos de quitar la bandeja que cubre el maletero. No hay un hueco específico para colocarla. Habremos de dejarla en casa o llevarla en los pies. Respecto al maletero, este cubica un total de 381 litros en la versión de tres puertas. Asciende a 621 litros en la versión GX de cinco plazas y 553 litros en el caso de las variantes con siete asientos –104 litros con esta configuración-.
Si abatimos los asientos, dichas cotas crecen hasta los 1.434, 1.934, y 1.833 litros, respectivamente. En cualquier caso, las formas son muy regulares y aprovechables. Sin embargo, encontramos dos inconvenientes: la altura del piso de carga (880 mm) y el portón de apertura lateral. Por suerte, la luneta se abre de manera independiente -hacia arriba-.
Motorización Land Cruiser 5p 204 CV
La gama para el mercado español está formada por un único motor diésel de cuatro cilindros y 2.8 litros. Está fabricado en hierro y aluminio. Cuenta con dos árboles de levas en la culata, inyección directa por conducto común, admisión variable, turbo, geometría variable e intercooler. Ahora desarrolla 204 CV (150 kW) a 3.400 rpm.
Va acompañado de 500 Nm de par motor entre las 1.600 y las 2.800 vueltas (420 Nm el manual). Como cabría esperar, siempre está ligado a la tracción total a las cuatro ruedas. Los usuarios pueden elegir entre la caja de cambios manual de seis velocidades o bien la automática con el mismo número de relaciones. En todos ellos se incluye la reductora.
Realmente es el mismo bloque del modelo anterior, el cual no se caracterizaba especialmente por ser un motor silencioso y carente de vibraciones. Eso sí, se ha refinado en gran medida. Suena poderoso, pero no resulta ni mucho menos molesto porque el interior está bien aislado. Sí algo más notable respecto a lo que estamos acostumbrados en un coche moderno.
Como os digo, la insonorización del habitáculo está muy conseguida. Incluso cuando rodamos por autopistas o autovías no se percibe en exceso el ruido de rodadura. Cosa distinta ocurre con el viento, pues aerodinámicamente hablando no nos encontramos ante un referente en el mercado. Del motor me ha sorprendido su suavidad y progresividad.
Siendo sinceros, no ofrece grandes prestaciones, pero su empuje al acelerar es correcto y resulta suficiente para mover los 2.295 kg que pesa. En cualquier caso, no es un coche ágil, pues acelera de 0 a 100 km/h en 12,7 segundos. Recupera de 80 a 120 km/h en 8 segundos y alcanza una velocidad máxima de 175 km/h. Eso sí, mantiene la velocidad en autopista con solvencia.
No me ha gustado particularmente el funcionamiento del cambio automático por convertidor de par con seis relaciones. Si bien cumple con su cometido, no ofrece una respuesta inmediata y el resbalamiento del convertidor de par es acusado. Requiere pisar el acelerador con contundencia y anticiparse cuando queremos llevar a cabo adelantamientos.
Otra opción es usar el modelo en modo secuencial, pero en este caso la electrónica es muy invasiva y no te permite forzar situaciones. Es el propio cambio el que vuelve a gestionar por sí solo la subida o bajada de marchas si nos acercamos a la zona roja del cuentarrevoluciones o dejamos caer en exceso las marchas. No encontraremos levas tras el volante.
En una conducción normal sube de marcha en el entorno de las 2.000 rpm, justo cuando el motor empieza a entregar la mayor parte de la fuerza. Cuando circulamos por autopista a 120 km/h en sexta velocidad, el motor gira a 1.900 rpm. Cabe destacar que, pese a que el consumo es elevado, estos son algo más contenidos que su predecesor.
Oficialmente, los consumos son de 9.5 litros en ciclo combinado. Durante una conducción real, en carretera es fácil rondar los 8.7 litros. En cambio, en ciudad no es moverse por encima de los 10 litros. Tras la semana de prueba, el consumo mixto se detuvo en 9.6 l/100 km combinando todo tipo de conducción. El depósito tiene una capacidad de 87 litros.
Version | 2.8D VXL Auto - 4 cilindros en línea |
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Cilindrada | 2.755 cm³ |
Potencia | 204 CV (150 kW) @ 3.400 rpm |
Par | 500 Nm @ 1.600 - 2.800 rpm |
Peso | 2.295 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.840 / 1.855 / 1.845 mm |
Volumen Maletero | 553 [104 - 7 plazas] (1.833) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 12,7 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 8 segundos |
Velocidad máxima | 175 km/h |
Consumo homologado | 9,5 l/100 km en ciclo combinado |
Emisiones CO2 por km | 250 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Pegatina de la DGT | C |
Precio de partida | 68.350 euros (este motor y acabado sin descuentos ni extras) |
Comportamiento Land Cruiser 5p 204 CV
Sin lugar a duda, lo que más te llamará la atención al ponerte al volante del nuevo Land Cruiser es la altura de su puesto de conducción. En él, mirarás por encima del hombro incluso a aquellos que van a bordo de un Audi Q7, pudiendo chocarle la mano en horizontal a los conductores de las furgonetas. La verdad es que esa sensación de poderío, mola.
Con ello, la visibilidad es muy buena dentro y fuera del asfalto, aunque has de contar con maniobrar con un coche realmente grande cuando te muevas en la urbe. Para que os hagáis una idea, su diámetro de giro es de 11,6 metros entre bordillos. Cuenta con sensores de aparcamiento, cámara de marcha atrás y asistencia a la dirección en función de la velocidad.
Su elevado centro de gravedad te pasará factura en curvas lentas y en autopista, donde los balanceos son inevitables. En cualquier caso, la suspensión -de paralelogramo deformable delante y eje rígido atrás- cuenta con una dureza intermedia. Contiene bien los balanceos y filtra estupendamente las irregularidades del terreno. Brinda un conjunto aplomado, estable y de reacciones nobles.
Sin embargo, no hablamos de un vehículo ágil en términos dinámicos. Al Land Cruiser le cuesta cambiar de trayectoria y apoyar con precisión a la hora de enlazar curvas. La dirección es más bien blanda, lenta y poco informativa, como ocurre en sus rivales. Su conducción requiere de cierto período de adaptación si no estamos acostumbrados a este tipo de vehículos.
Cabe mencionar que el modelo cuenta con tres tipos de suspensiones, como ya ocurría en su predecesor. En primer lugar encontramos la de serie; seguida de la KDDS con cartuchos hidráulicos que actúan sobre las barras estabilizadoras; y la más confortable de todas, que cuenta con muelles neumáticos y amortiguadores controlados electrónicamente con varios niveles de ajuste para situarle un peldaño por encima en confort que sus principales rivales.
Por otra parte, fuera del asfalto se trata de un modelo que ofrece una flexibilidad y una robustez superiores gracias a la carrocería sobre chasis de largueros. Desde 2020 cuenta con un diferencial trasero con posibilidad de bloqueo manual para las versiones de cinco puertas con cambio automático y acabados VX o VXL.
El sistema de tracción total permanente con reductora es realmente eficaz.
En el acabado Limited sigue montando un diferencial autoblocante de tipo Torsen. Esto, junto a los sistemas Crawl Control y Multi Terrain System de los acabados más altos, permiten al Land Cruiser subirse, literalmente, hasta por las piedras. El primero de ellos dosifica el acelerador y el freno con cinco velocidades predefinidas para que bajar o subir pendientes sea coser y cantar.
El segundo de ellos actúa sobre el motor, la caja de cambios y las ayudas electrónicas para ofrecernos hasta cinco modos de conducción off road: barro y arena, rocas, polvo y rocas, gravilla y baches, con su correspondiente modo automático. Adicionalmente, el Toyota Land Cruiser tiene unas cotas excelentes, aunque debes pensar en acompañarlas de unos neumáticos adecuados.
Todas las versiones tienen un diferencial central con bloqueo manual.
Su ángulo de ataque es de 31º, su ángulo ventral de 22º y su ángulo de salida de 26º. La altura libre mínima es de 215 mm (205 mm el 3p) y su capacidad de vadeo alcanza los 70 centímetros. La pendiente máxima superable es de 42º y la inclinación lateral alcanza los 44º. En cualquier caso, un Defender, un Wrangler o un Clase G ofrecen mejores cotas.
El Toyota Safety Sense 2 incluye sistemas de seguridad y asistencias. Tenemos sistema de frenada de emergencia en ciudad con detección de peatones y bicicletas, programador de velocidad activo, alerta y mantenimiento por cambio involuntario de carril, asistente de cambio luces cortas / largas, aviso de ángulo muerto, detector de señales, alerta de tráfico cruzado trasero…
Equipamiento y precio
Los niveles de acabado se denominan GX, VX, VXL y Limited. Los dos primeros están más enfocados para profesionales. El primero ya cuenta con ABS, EBD, TCS, ESP, TPMS, múltiples airbags, aire acondicionado, dirección asistida, elevalunas y espejos eléctricos, ordenador de viaje, sistema de sonido con bluetooth y USB, llantas de chapa en 17 pulgadas, apoyabrazos central delantero…
Los VX añaden a lo anterior los sensores de aparcamiento traseros, cámara de visión posterior, sistema Toyota Touch con pantalla de ocho pulgadas, Apple CarPlay, Andorid Auto, control y limitador de velocidad, climatizador automático de dos zonas, arranque y acceso sin llave, volante forrado en piel, llantas de aleación de 17 pulgadas, alarma, etc.
La terminación VXL incluye el paquete cromado exterior completo, techo solar eléctrico, suspensión pilotada, diferencial trasero LSD Torsen (sólo 5 puertas), asientos delanteros eléctricos y térmicos, control de crucero adaptativo, SmartBeam, lector de señales de tráfico, sensor de parking delantero, alerta de cambio de carril, doble cierre, faros LED, llantas de 19 pulgadas, aviso pre-colisión, frenada automática en ciudad y sensor de luz y lluvia, entre otros.
Por último, el nivel Limited añade el tapizado en piel, detector de objetos en ángulo muerto y en maniobras de marcha atrás, asiento del conductor con memoria, paquete maletero, sistema de visión 360º, sistema de entretenimiento en plazas traseras, sistema Crawl Control, suspensión variable adaptativa, sistema de selección multiterreno MTS…
En España, los precios recomendados de toda la gama Toyota Land Cruiser 2022 sin promociones ni descuentos son los siguientes:
Motor | GX | VX | VXL | Limited |
2.8D 204 CV 6MT 3p | 49.550 € | 47.850 € | – | – |
2.8D 204 CV 6AT 3p | – | 50.750 € | 59.150 € | – |
2.8D 204 CV 6MT 5p | 51.650 € | 53.850 € | – | – |
2.8D 204 CV 6AT 5p | – | 57.050 € | 68.350 € | 78.950 € |
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.6
Notable
Con la proliferación de los SUV, los todoterrenos puros han ido desapareciendo del mercado, pero Toyota mantiene en su cartera de productos el popular y veterano Land Cruiser/Prado. Actualizado en mecánica y equipamiento en 2020, este modelo combina todavía mejor el confort de un turismo con unas posibilidades camperas sensacionales. No te va a decepcionar en ningún caso.
Lo bueno
- Capacidades fuera del asfalto. Es uno de los pocos todoterrenos de pura cepa que quedan en el mercado.
- Calidad en el habitáculo mejorada. Diseño actualizado y mejores ajustes que se perciben tanto al tacto como a la vista.
- Gran comodidad a bordo dentro y fuera del asfalto. Muchas posibilidades de equipamiento.
- Tercera fila de asientos bastante generosa y con muchas comodidades.
- Posibilidad de que tres adultos viajen cómodamente en la segunda fila de asientos. Tienen ajuste longitudinal y de respaldo.
Lo mejorable
- Gama mecánica muy escasa.
- El cambio automático de seis relaciones no es todo lo bueno que debería.
- Precio de partida elevado debido a su enfoque premium.
- El sistema multimedia no cuenta con una gran fluidez ni buenos gráficos.
- Las plazas traseras son ligeramente complicadas de montar. No hay huevo para dejar la bandeja que cubre el maletero.