La C de Mercedes-Benz es la Clase con mayor volumen de ventas de la compañía alemana. Tiene una importancia vital para la marca. Desde su nacimiento en 1982 (W201), se han vendido casi 10 millones de unidades repartidas entre las distintas carrocerías de modelo: Berlina, Estate, Cabrio y Coupé. Hoy probamos el Mercedes-Benz C 220 d Berlina.
Con este modelo, Mercedes-Benz consigue plasmar con acierto los clásicos valores de la estrella en una atractiva gama de turismos posicionada entre la categoría media-alta y la categoría superior. Además, con el paso del tiempo se han ido añadiendo suculentas versiones que van desde los más prestacionales AMG hasta las variantes electrificadas.
Este mismo año la firma germana nos ha dado a conocer un nuevo Clase C más fresco y tecnológico que nunca. Gran parte de su atractivo se centra en la importante herencia que recibe de la Clase S, tanto en el interior como en materia de asistencias a la conducción y de seguridad. Está en algunos aspectos varios pasos por delante de sus rivales (no tanto en otros).
Más conectado, moderno, deportivo, mejor acabado y mucho más equipado, el Mercedes-Benz Clase C vuelve a dar en el clavo sin perder la esencia clásica de la marca. Frente a sus rivales, los BMW Serie 3, Audi A4 y Jaguar XE es el más caro de todos a igualdad de motor y equipamiento. Los híbridos enchufables, los AMG y el All Terrain llegarán el próximo año.
Diseño exterior
El diseño exterior es bastante continuista. El sedán cuatro puertas debuta con novedades visuales en los paragolpes delantero y trasero, la parrilla frontal -varía en función del acabado, siempre con la estrella en posición central-, las llantas, los colores de la carrocería y el capó. No falta un conjunto de ópticas Full LED en el frontal y la zaga, donde son de dos piezas.
Con el Paquete AMG la remozada parrilla tiene un atractivo diseño diamantado. En opción alberga los radares frontales y una cámara del sistema 360º. La resolución de estas cámaras es la mejor del mercado y ofrece múltiples vistas. Si se hace uso de la ayuda activa para aparcar, el vehículo aparca en huecos estrechos y puede reconocer si alguien se mueve alrededor.
Tampoco pasan desapercibidos los tecnológicos faros. De serie equipa iluminación MULTIBEAM LED, pero esta unidad monta los sensacionales DIGITAL LIGHT. Implementan funciones completamente nuevas, como la proyección de líneas auxiliares o símbolos de advertencia sobre la calzada:
- Advertencia de zonas de obras reconocidas, con proyección del símbolo de una excavadora sobre la calzada
- Advertencia de la presencia de peatones en el arcén y marcado con un foco de luz
- Indicación de la existencia de semáforos, señales de STOP o señales de dirección prohibida mediante la proyección de un símbolo sobre la calzada
- Ayuda al circular por carreteras con carriles más estrechos de lo habitual (zonas de obras) mediante proyección de marcas de guiado sobre la calzada.
Su funcionamiento es sencillamente sublime. DIGITAL LIGHT posee en cada faro un módulo de iluminación con tres LED de alta potencia y 1,3 millones de espejos, que reflejan y refractan la luz. Cada vehículo alcanza una definición mayor de 2,6 millones de píxeles. En el extremo inferior, el paragolpes y las tomas de aire varían con el acabado seleccionado.
Como es habitual, las versiones con paquete AMG tienen un aspecto más deportivo y llantas de mayor tamaño. En la vista lateral, el pilar C fluye suavemente hacia el marcado hombro trasero. Las puertas, libres de ornamentaciones, tienen una superficie amplia y los cristales posteriores son tintados. Es una pena que no herede los tiradores retráctiles del Clase S.
Para las llantas encontramos tamaños de 17 a 19 pulgadas. En este caso tenemos unas llantas AMG que calzan neumáticos Pirelli P Zero en dimensiones 225/40 R19 93Y. Para el exterior encontramos hasta 12 colores con tonos más bien clásicos y acabados variados. En este caso vemos un atrevido Azul espectral metalizado.
Varían las dimensiones, siendo más largo, ancho y bajo. Para mantener las proporciones, también cuenta con una batalla ligeramente extendida. Hablamos de 4.75 metros de largo (+65 mm), 1.82 metros de ancho (+10 mm) y 1.43 metros de alto (-9 mm). La distancia entre ejes es de 2.865 mm (+25 mm) y el coeficiente de resistencia aerodinámica de 0,24.
En la zaga, la Clase C luce unos faros Full LED divididos en dos secciones. La visibilidad por la luna trasera es buena y el portón trasero es eléctrico. Ponen el toque deportivo el sutil alerón de la tapa del maletero, el difusor y los embellecedores que imitan las salidas de escape. Sobre el techo descansa en opción un techo solar panorámico y apertura eléctrica.
Como opcionales para el exterior cabe destacar el Paquete Night, el Paquete AMG y el acceso y arranque sin llave.
Diseño interior
Para el interior, la marca nos habla de una zona de confort integral y preparada para el futuro: un refugio que combina deportividad y comodidad con eficiencia, emoción e inteligencia, definiendo así el lujo moderno. Las grandes pantallas para la instrumentación y el sistema multimedia quedan ahora más diferenciadas.
Una vez entramos en su tecnológico habitáculo, destaca la presencia de la pantalla táctil de 11,9 pulgadas (9,5 pulgadas de serie). Se trata de una pantalla flotante vertical que nos da acceso a un sistema MBUX muy sofisticado. La única pega es que prácticamente todas las funciones quedan dentro de la pantalla, aunque el menú de climatización de cuatro zonas opcional siempre está visible.
En su segunda generación, el MBUX está interconectado con prácticamente todas las funciones del vehículo. A ello se suma un mayor número de controles táctiles, como los del volante, el volumen o la cortinilla del techo solar. El problema que le veo a esta botonería es que el control de los diversos mandos es menos preciso que con la botonería física.
El sistema multimedia también incluye control gestual e incorpora protección mediante PIN, huella dactilar y voz. Tampoco falta un gran control de las funciones del vehículo desde la aplicación Mercedes Me. Si el MBUX ya era el mejor sistema del mercado, ahora estamos ante un conjunto simplemente espectacular que no igualan ni Lexus, ni BMW, ni Audi.
Por su parte, la función de navegación de realidad aumentada y los comandos de voz también reciben algunas actualizaciones para ser aún más naturales. La navegación AR ahora proyecta una lectura más nítida en la pantalla de visualización frontal. Desde luego, a la fluidez, gráficos, nitidez y manejo de todas las pantallas y cámaras no se les puede sacar pega alguna.
El cuadro de instrumentos digital es uno de los platos fuertes de este coche, ya que ahora ofrece mayores opciones de personalización. La pantalla tiene un tamaño de 10,25 o 12,3 pulgadas. Es posible seleccionar entre tres estilos de visualizado (clásico, deportivo, discreto) y tres modos (navegación, asistencia, servicio) para personalizar su apariencia.
Tampoco faltan la función Smart Home para controlar el propio domicilio ni las actualizaciones por aire.
Pese a tratarse de un sistema nuevo, tanto la instrumentación como el Head-Up Display funcionan realmente bien, sin fallos y con gran agilidad. El interior se ha digitalizado hasta límites insospechados. Lo que menos convence respecto a sus rivales directos es la calidad de algunos materiales empleados y los ajustes entre las diversas piezas.
Sin ser ni mucho menos malos, el conjunto no aporta el empaque y la sensación de solidez de Audi o BMW. Hay más sensación tecnológica que de lujo. A ello contribuye, además de las pantallas, un completo sistema de iluminación ambiental LED con hasta 64 colores que te hace sentir a bordo de una nave espacial.
No menos interesantes son los cómodos asientos con infinidad de ajustes eléctricos y memoria. Estos asientos también ofrecen opcionalmente calefacción, apoyo lumbar, ventilación y masaje. Adicionalmente, las opciones de tapizado son múltiples, ofreciéndose tela, cuero, símil de cuero y cuero napa. También hay numerosas molduras para elegir.
El color de techo puede modificarse y el salpicadero forrarse en cuero.
Otra novedad es el volante, que tiene controles capacitivos actualizados, sensores para los pulgares y ajuste eléctrico. Lo que menos me ha gustado es que muchos de los controles sean táctiles y en negro piano. Debido a ello, con la suciedad o el sudor hay veces que no responden a nuestras órdenes. En otras ocasiones, activamos las funciones por error.
Los cinturones ofrecen regulación en altura.
Gracias a su mayor distancia entre ejes y a sus proporciones mejoradas, la nueva Clase C también cuenta con un poco más de espacio interior que su predecesora. El espacio para las piernas es bueno en la segunda fila de asientos, pero la anchura y la altura para la cabeza no son reseñables para personas altas y corpulentas. Delante también hay buen espacio.
Cabe mencionar que el Clase C Estate tiene más espacio hasta el techo en las plazas posteriores. La plaza central, por su parte, no es recomendable por altura, anchura y comodidad, salvo que detrás viajen tres niños. El acceso a las plazas posteriores tampoco es destacable, pues las puertas no abren mucho y son curvadas y gruesas.
El maletero cubica 455 litros en las versiones de combustión interna y es muy aprovechable. Esta cifra se reduce hasta los 360 litros en los híbridos enchufables. Tiene unas formas muy regulares y cuenta con botones para abatir la segunda fila. Suma iluminación, toma de 12 V, algunas sujeciones y un doble fondo para guardar accesorios y otros objetos.
Resumen de las dimensiones
Clase C … | Berlina | Modelo anterior | Diferencia | Estate | Modelo anterior | Diferencia |
Dimensiones exteriores (mm) | ||||||
Longitud | 4.751 | 4.686 | +65 | 4.751 | 4.702 | +49 |
Ancho | 1.820 | 1.810 | +10 | 1.820 | 1.80 | +10 |
Anchura incluyendo retrovisores exteriores | 2.033 | 2.020 | +13 | 2.033 | 2.020 | +13 |
Altura | 1.438 | 1.447 | -9 | 1.455 | 1.462 | -7 |
Batalla | 2.865 | 2.840 | +25 | 2.865 | 2.840 | +25 |
Ancho de vía delante | 1.582 | 1.563 | +19 | 1.582 | 1.563 | +19 |
Ancho de vía detrás | 1.594 | 1.546 | +48 | 1.594 | 1.546 | +48 |
Dimensiones interiores (mm) | ||||||
Altura máxima hasta el techo delante, conductor | 1.041 | 1.039 | +2 | 1.046 | 1.046 | |
Altura hasta el techo detrás | 955/952 | 942/942 | +13/+10 | 985/991 | 974/986 | +11/+5 |
Espacio para las piernas delante | 1.059 | 1.059 | 1.059 | 1.059 | ||
Espacio para las piernas detrás | 914 | 893 | +21 | 914 | 893 | +21 |
Delante, anchura a la altura de los codos | 1.476 | 1.454 | +22 | 1.476 | 1.454 | +22 |
Detrás, anchura a la altura de los codos | 1.477 | 1.462 | +15 | 1.477 | 1.462 | +15 |
Ancho a la altura de los hombros delante | 1.430 | 1.404 | +26 | 1.430 | 1.404 | +26 |
Ancho a la altura de los hombros detrás | 1.411 | 1.398 | +13 | 1.411 | 1.398 | +13 |
Volumen del maletero VDA (l) | 455 | 455 | 490 – 1.510 | 460 – 1.480 | +30/+30 |
Motorización Mercedes-Benz C 220 d Berlina
Por ahora, para la Clase C Berlina están disponibles un total de tres motorizaciones gasolina y tres motorizaciones diésel. Todas equipan el cambio automático 9G-Tronic de serie. La rama de gasolina equipa motores de cuatro cilindros y arranca con el C 180 de 170 CV. Le sigue el C 200 con 204 CV. Por último encontramos el C 300 con 258 CV.
Todos van asociados a la tracción trasera. Más adelante llegará la tracción integral 4MATIC. También en un momento posterior llegarán las opciones híbridas enchufables y los AMG. La gama se compondrá del C 43 4MATIC, el C 63 4MATIC+ y el C 63 S 4MATIC+. Estarán asociados al cambio AMG SPEEDSHIFT de nueve velocidades.
Respecto a la gama diésel, esta arranca con el C 200 d con un motor de cuatro cilindros y 163 CV. Le sigue el C 220 d también cuatro en línea con 200 CV. La cúspide de la gama es el C 300 d con cuatro cilindros y 265 CV. En este caso, el C 220 d puede asociarse a la tracción total 4MATIC. La caja de cambios es siempre automática de nueve relaciones (9G-Tronic).
Como gran novedad destaca la inclusión de la singular red de a bordo de 48 voltios (EQ Boost) en toda la gama. Esta aporta deportividad y eficiencia, además del distintivo ECO de la DGT. Otras ventajas son el modo de planeo con motor apagado y la recuperación de la energía de frenado con parada inteligente del motor.
El C 220 d Berlina equipa un bloque de aluminio. Cuenta con dos árboles de levas en la culata, geometría variable, inyección directa por conducto común, turbo e intercooler. Con 1.992 cm3 de desplazamiento y cuatro válvulas, desarrolla ahora una potencia de 200 CV (147 kW) a 4.200 rpm. Se complementa con un par máximo de 440 Nm desde las 1.800 rpm hasta las 2.800 rpm.
A pesar de no ofrecer el empuje en un rango excesivamente amplio de revoluciones, cuenta con potencia suficiente para moverse con soltura y agilidad. Es más, en mi opinión creo que se trata de la mecánica más equilibrada entre los diésel. El C 300 d ya será excesivo para aquellos usuarios que no viajan muy cargados ni buscan altas dosis de potencia.
Con sus cifras, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7.3 segundos, recuperando de 80 a 120 km/h en 5.2 segundos y alcanzando una velocidad máxima de 245 km/h. Es un motor suave que entrega la potencia de forma progresiva. Pese a ello, es justo señalar que la rumorosidad podría haberse trabajado un poco más, especialmente en la aceleración.
Si bien es un coche enérgico, la respuesta al acelerador no es inmediata. Ciertas maniobras en las que vamos a pisar con fuerza el pedal derecho -o mantener pulsada la leva izquierda- requieren anticipación. De hecho, si miramos las cifras de su predecesor nos daremos cuenta de que pierde algunas décimas en las prestaciones.
Cabe destacar que, asociado a la transmisión automática de nueve relaciones con levas tras el volante, la mecánica es tremendamente aprovechable. En términos generales, no sentirás una ausencia de potencia prácticamente en ninguna circunstancia. Quizá únicamente en una pendiente muy empinada donde vayas totalmente cargads de personas y equipaje.
Empieza a empujar con fuerza realmente a partir de las 1.800 rpm. Sin embargo, en una conducción tranquila, la transmisión sube de marcha en el entorno de las 1.700 vueltas. Esto, junto al Start/Stop, ayuda a contener los consumos. A un ritmo más elevado, sin llegar a practicar una conducción deportiva, el cambio sube de marcha a unas 2.100 revoluciones.
En carretera, el motor apenas gira a 1.500 rpm a 120 km/h en novena marcha. Esto nos permite obtener unos consumos irrisorios en autopistas y autovías. Obtuve una media de 5.2 l/100 km con tres personas a bordo y el maletero lleno. En ciudad el consumo ronda lo 7 l/100 km, una cifra muy razonable. La media tras la semana de pruebas fue de 5.9 l/100 km.
Mercedes-Benz, por su parte, homologa un combinado WLTP de 4.6 l/100 km. Es una cifra difícil de alcanzar en la conducción real. El depósito de combustible tiene una capacidad de 66 litros. Gracias a ello nos ofrece una autonomía de viaje superior a los 1.000 kilómetros, aunque no practiquemos una conducción tranquila.
El cambio 9G-Tronic por convertidor de par es muy suave, siendo prácticamente imperceptible. También resulta suficientemente rápido para un uso normal del Clase C. La palanca no tiene un modo secuencial ni posición Sport, pero sí levas de generoso tamaño en aluminio tras el volante. Si optas por él, no te va a decepcionar.
Version | C 220 d Berlina - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 1.992 cm³ |
Potencia | 200 CV (147 kW) @ 4.200 rpm |
Par | 440 Nm @ 1.800 - 2.800 rpm |
Peso | 1.755 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.751 / 1.820 / 1.437 mm |
Volumen Maletero | 455 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 7,3 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 5,2 segundos |
Velocidad máxima | 245 km/h |
Consumo homologado | 4,6 l/100 km en ciclo combinado |
Emisiones CO2 por km | 120 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Pegatina de la DGT | Eco |
Precio de partida | 49.304 euros (este motor sin descuentos ni extras) |
Comportamiento Mercedes-Benz C 220 d Berlina
El Clase C siempre ha sido uno de los sedanes de referencia por calidad de rodadura. Sin embargo, en esta nueva entrega la diferencia respecto a los A4 y Serie 3 no me parece tan abismal. Sí que es cierto que, incluso con el tren de rodaje deportivo, resulta más confortable que un BMW Serie 3, pero también menos dinámico.
La comodidad es algo que podríamos esperar en un sedán enfocado a los viajes por carretera. Sorprenden los cambios de apoyo y la sutileza con la que se mueve. Resulta notablemente seguro, estable y fácil de conducir incluso a un ritmo más elevado. No es divertido como un Serie 3 ni transmite sensaciones, pero sí una elevada confianza.
Pese a no ser compacto, innovaciones poco habituales en el segmento como el eje trasero direccional nos permiten movernos con soltura por la ciudad. La dirección se siente cómoda en espacios más reducidos y es cómoda para maniobrar. Remata este aspecto un diámetro de giro entre paredes de 11,07 metros. Cuenta con asistencia en función de la velocidad.
Fuera de la urbe, la dirección cumple con su función para un uso normal del vehículo, pero no es especialmente informativa. Aquellos que quieran un plus de deportividad y sensaciones pueden optar por la Dirección Directa Deportiva incluida en el tren de rodaje deportivo. Mejora ligeramente en este sentido. A ella se unen la suspensión deportiva y frenos mejorados.
Como os señalaba al compararlo con sus rivales, es uno de los sedanes más equilibrados dinámicamente. Sin embargo, también es uno de los que me ha transmitido un tacto más artificial a la hora de conducirlo. La asistencia de la dirección tiene gran parte de la culpa. Es muy cómodo y lo hace todo bien, pero es un coche más bien neutro en sensaciones.
Además, me ha parecido que la diferencia entre los diversos modos de conducción no es especialmente apreciable. Sí que considero muy cómoda la suspensión deportiva. Lejos de lo que insinúa su nombre, es capaz de filtrar eficazmente las irregularidades del asfalto. Así mismo, contiene de manera excelente los balanceos de la carrocería incluso circulando a buen ritmo.
La insonorización alcanza un nivel muy bueno de serie, aunque rodemos a alta velocidad. Lo más apreciable es el ruido aerodinámico. En este sentido, es cierto que con unas llantas de menor tamaño y la suspensión de serie podríamos lograr un mayor confort en carretera. Eso sí, seguramente también perderíamos cierta agilidad en tramos de curvas cerradas.
Respecto al equipo de frenado, monta discos ventilados en el eje delantero y macizos en el trasero. Con el paquete AMG, encontramos discos de freno delanteros de mayor tamaño y perforados. Resultan fáciles de dosificar y cómodos de manejar, pues no clavan el vehículo con solo rozar el pedal. Además, presumen de buena resistencia a la fatiga.
Por último, hablemos de los sistemas de asistencia y seguridad a la conducción. Encontramos regulador de velocidad adaptativo con lector de señales y adaptación de la velocidad, sensor de ángulo muerto, asistente de mantenimiento y centrado en el carril, asistente de aparcamiento, PRE-SAFE Impulse Side, frenada de emergencia en ciudad…
Equipamiento y precio
En el mercado español, el equipamiento de serie en todos los Clase C contempla las llantas de aleación de 17 pulgadas, climatizador automático de dos zonas Thermotronic, instrumentación digital, volante multifunción forrado en piel, freno de mano eléctrico, ordenador de viaje, cuatro elevalunas eléctricos, arranque por botón y espejos térmicos.
También de serie son el sistema de navegación integrado MBUX, Apple CarPlay, Android Auto, bluetooth, USB, sensor de lluvia, faros LED, control de ángulo muerto, Dynamic Select, asientos calefactables, acceso sin llave, cámara posterior, SmartBeam, cargador de móvil por inducción, escáner de huella dactilar, suspensión «Agility Control» y radio DAB, entre muchos otros.
No menos interesante es el completo abanico de equipamiento opcional disponible, aunque ojo con los precios. Algunos de los extras se agrupan en paquetes de equipamiento más interesantes para el comprador. Esto es así en el caso de la tecnología de infoentretenimiento, los paquetes de estilo o los sistemas de asistencia a la conducción y de seguridad.
Los precios recomendados de la gama Mercedes-Benz Clase C 2021 sin descuentos ni promociones quedan de la siguiente manera:
Modelo | Berlina | Estate |
GASOLINA | ||
C 180 170 CV 9G-TRONIC | 48.251 € | – |
C 200 204 CV 9G-TRONIC | 49.847 € | 51.417 € |
C 300 258 CV 9G-TRONIC | 56.143 € | – |
DIÉSEL | ||
C 200 d 163 CV 9G-TRONIC | 47.194 € | 48.719 € |
C 220 d 200 CV 9G-TRONIC | 49.304 € | 50.815 € |
C 220 d 200 CV 9G-TRONIC 4MATIC | 51.765 € | 53.276 € |
C 300 d 265 CV 9G-TRONIC | 59.335 € | 60.870 € |
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.9
Notable+
Mercedes-Benz vuelve a sorprendernos con una excelente berlina de tamaño medio y acabado premium que nos hará disfrutar con su tracción trasera. Gracias a una mayor herencia que nunca de la Clase S, nos acoge en un interior verdaderamente confortable que ahora viene plagado de innovaciones y tecnología. Nuevamente la marca de la estrella ha trasladado parte del espíritu innovador de las clases superiores a una categoría más accesible.
Lo bueno
- Fuerte herencia de la Clase S en tecnología, diseño y asistencias a la conducción y de seguridad.
- Iluminación y funciones de las nuevas DIGITAL LIGHT.
- Buen confort en carretera incluso con el tren de rodaje deportivo. Eso sí, ya no hay tanta diferencia respecto a los A4 y Serie 3.
- Sistema MBUX y calidad de las pantallas sobresaliente. Lo mejor del mercado en este sentido.
- Sensación de seguridad al buscarle las cosquillas, pese a ser neutro en reacciones.
- Prestaciones más que suficientes con consumos irrisorios incluso viajando cargados.
- Si te puedes permitir elevar la factura sin límite, el catálogo de opcionales es realmente grande.
- Maletero de gran capacidad.
Lo mejorable
- Altura de la carrocería muy baja con el tren de rodaje deportivo. Es un hándicap en pasos de cebra elevados y accesos a garajes.
- Mayor confort en largos viajes con la suspensión de serie y llantas de menor tamaño.
- La rumorosidad del motor podría estar más trabajada.
- Pierde algunas cifras en prestaciones respecto a su predecesor.
- El precio de partida de la gama es superior al de sus rivales, aunque cuenta con una aceptable dotación de serie.
- Algunos precios de los opcionales resultan excesivos, especialmente sus innovadoras tecnologías.
- Los materiales son buenos en el habitáculo, pero hay algunos plásticos y ajustes que desmerecen.
- El maletero no cuenta con trampilla de acceso al habitáculo para transportar, por ejemplo, unos esquís.