Prueba Mercedes-Benz E 300 e 4MATIC Berlina: referencia en confort, pero existiendo un diésel…

Rival del Audi A6, el BMW Serie 5 o el Volvo S90, el Clase E puede presumir de llevar más de 40 años de éxito en el mercado, y en su última actualización supone un nuevo paso hacia el futuro en términos de tecnología, creatividad y calidad. Cuenta con un nivel inédito de confort y seguridad en la conducción, así como nuevas dimensiones en la asistencia al conductor.

Aquellos tiempos en los que primaban únicamente el diseño, la comodidad o la seguridad como elementos individuales han terminado, hoy en día lo importante es ver un vehículo como un todo, como un modelo capaz de ofrecer seguridad, comodidad, diseño y tecnología sea cual sea el segmento al que pertenezca (no hay más que ver el nuevo Clase C).

Además, en un mercado tan competitivo como el actual, donde los grandes y rápidos avances en tecnología hacen que lo que hoy es toda una novedad, mañana deje de serlo, lleva a que las marcas centren toda su atención en el elenco tecnológico de su gama. El otro gran protagonista es sin duda la eficiencia, de ahí las múltiples opciones mild hybrid y PHEV.

Disponible con carrocerías Berlina, Estate, All-Terrain, Coupé y Cabrio, la gama del nuevo Clase E es una de las más amplias dentro de la marca alemana. El E 300e que probamos hoy destaca no solo por su confort, sino también por su gran respuesta en carretera, aunque con un precio de partida superior a los 60.000 euros, no está al alcance de todos los mortales.

Diseño exterior

Tras el facelift, el Mercedes-Benz Clase E recibe novedades visuales en los paragolpes delantero y trasero, la parrilla frontal, las llantas de aleación, los colores de la carrocería y el capó, así como un nuevo conjunto de ópticas Full LED en el frontal y la zaga que lo asemejan en mayor medida a los Mercedes-Benz CLA y CLS actuales, de líneas más angulosas.

Con unos bordes muy definidos y superficies muy curvas, el exterior de esta berlina cuenta con un diseño en el que predomina un gran entramado de superficies cóncavas y convexas que crean unas líneas muy singulares. Su nuevo frontal destaca por su gran parrilla y su capó en forma de “V”, aunque en líneas generales se mantiene similar a su predecesor.

En la zona central de la parrilla de efecto cromado con una lama horizontal encontramos la gran estrella de la marca.

Al igual que en otros modelos de la marca, el cliente puede elegir entre dos frontales: uno deportivo con estrella central -acabados Avantgarde y AMG Line- o bien la parrilla del radiador clásica de berlina con la tradicional estrella sobre el capó -terminaciones básicas y Exclusive-. A ambos lados se encuentran los tecnológicos faros LED High Performance.

Estos acentúan aún más las líneas del capó gracias a los módulos de luz diurna LED que son como unas “cejas enfadadas”. Opcionalmente están disponibles los potentes faros Multibeam LED, que ofrecen diversas funciones adaptativas de iluminación, pues los faros se adaptan automáticamente a situaciones climáticas y de conducción.

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Siguiendo una línea descendente en el diseño del frontal, encontramos el deportivo paragolpes delantero del paquete AMG Line. Este incorpora tres entradas de aire adicionales a la parrilla, una central que se encuentra en la parte inferior de la matrícula y otras dos a ambos lados. No faltan los sensores de aparcamiento delanteros.

Opcionalmente disponemos de un lavaparabrisas calefactado.

Ya en la vista lateral, la interacción entre el diseño dinámico y una excelente aerodinámica son la consecuencia de la superficie arqueada del techo y la inclinación de la luna delantera, mientras que en la zona posterior la silueta revela líneas suaves y fluidas que terminan en un curvo pilar C que nos recuerda a las Clases C y S.

Con el lavado de cara se han mantenido las dimensiones del modelo, que ya habían mejorado teniendo en cuenta la mayor estatura media de las personas y, sobre todo, las limitaciones con las que contábamos en la anterior generación. Ahora hablamos de 4.93 metros de largo, 1.85 metros de ancho y 1.48 metros de alto. La batalla es de 2.939 milímetros.

El ancho de vía delantero es de 1.596 mm y el trasero de 1.575 mm. La superficie de las puertas es limpia, algo que mejora la estética exterior, pero penaliza frente a pequeños golpes. El área acristalada es suficiente, pero tampoco generosa, y cuenta con cristales posteriores tintados. También podemos equipar los cristales laminados con protección acústica.

La vista lateral se encuentra rematada por unas atractivas llantas AMG de cinco radios dobles que encierran unos discos delanteros perforados y están calzadas con neumáticos Goodyear Eagle F1 de medidas 245/45 R18 100Y en ambos ejes. Pese a que parezcan unas medidas desmesuradas, llenan perfectamente los pasos de rueda.

Con el paquete retrovisores, los retrovisores exteriores son eléctricos. Además, el retrovisor exterior del lado del conductor y el retrovisor interior tienen una función antideslumbrante. El coeficiente de penetración (C_x) es de 0,23 en esta generación. En comparación con sus rivales, es excelente.

Las líneas cóncavas y convexas se pueden apreciar también en la parte trasera del vehículo, mientras que la inclinada luna trasera y el pronunciado maletero hacen necesaria la incorporación de un asistente de aparcamiento para no tener disgustos. Los sensores de aparcamiento traseros y la cámara de marcha atrás son de serie en este modelo.

De forma opcional está disponible el paquete de aparcamiento con cámara de 360°, que supervisa los cuatro lados del vehículo y permite una visibilidad omnidireccional homogénea gracias a sus múltiples vistas, incluida la ‘vista de pájaro’. También podemos equipar el paquete de aparcamiento a distancia de manera opcional.

Las luces traseras siguen la línea del lateral y la línea del portón del maletero eléctrico, que las divide en dos partes. La iluminación de los faros traseros emplea tecnología LED y ambos pilotos quedan unidos por una línea cromada. En la parte inferior derecha encontraremos la toma de carga eléctrica en los modelos híbridos enchufables como este.

Al encontrarse equipada nuestra unidad con la Línea AMG, encontramos dos salidas de escape cromadas falsas, en combinación con un difusor en color contraste que le da el toque deportivo definitivo al conjunto. Por último y, sobre el techo, encontramos una superficie acristalada practicable con cortinilla eléctrica dividida en dos partes.

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Hay disponibles 10 colores exteriores para la carrocería entre los que podemos encontrar tonos más bien clásicos y diversos acabados. En este caso tenemos un designo rojo jacinto metalizado. El Paquete Night está disponible para el exterior y con él las llantas de aleación, la carcasa de los retrovisores exteriores y algunas molduras cromadas tienen color negro.

Diseño interior

Mercedes-Benz ha puesto mucho esmero en el interior del nuevo Clase E, que forma una unidad armoniosa con el expresivo y dinámico exterior. Cuando nos montamos en él nos llama la atención el tecnológico salpicadero, especialmente a causa de los nuevos volantes con superficie táctil y las grandes pantallas para la instrumentación y el equipo multimedia.

El diseño del habitáculo encarna con su arquitectura diáfana una berlina clásica, distinguida y, al mismo tiempo, altamente moderna. En términos de calidad y ajustes no ha mejorado, pero cuenta con una abundante proporción de superficies blandas. Pese a ello todavía encontramos algunos crujidos en el salpicadero y el techo. En BMW y Audi la sensación de solidez es mayor.

Pese a ello, transmite gran sensación de calidad, al tiempo que se agradece que el tedioso Piano Black de la consola se pueda sustituir sin sobrecoste por otros materiales como esta madera de fresno. Hay siete opciones, mientras que para las molduras tenemos 10 posibilidades y, para la tapicería, cinco tipos de cuero y seis opciones de símil de cuero.

El cliente puede elegir entre diversas maderas nobles (raíz de nogal o fresno metalizado), aluminios y lacados.

Por otra parte, en el tablero de esta unidad vemos un revestimiento de símil de cuero. El diseño de los difusores de ventilación y los mandos de nueva configuración por debajo de la unidad central subrayan la impresión general de alta calidad, aunque tras el lavado de cara desaparece el reloj analógico entre los dos difusores centrales que le daba un plus de elegancia.

Otros detalles de alto valor son las cuatro posibilidades de tapizado para el techo, las alfombrillas de velours, el paquete de iluminación o el salpicadero en símil de cuero. Para el volante de tres radios forrado en napa hay dos diseños, ambos con controles táctiles en negro brillante, lo que los hace realmente sucios.

Tiene ajuste eléctrico y la superficie del aro capacitiva. Tras él se encuentra como elemento central de la configuración horizontal del habitáculo un display de diseño radicalmente tecnológico que ya hemos visto en otros modelos. Está disponible un completísimo Head Up Display que ofrece información en realidad aumentada.

De hecho, dos displays en color TFT de alta definición con 10,25 pulgadas de serie o 12,3 pulgadas en opción constituyen la central de información de la Clase E. La pantalla izquierda asume la función del cuadro de instrumentos y muestra todas las informaciones relevantes para el conductor, pudiendo configurarse en diversos modos. En los PHEV tiene información específica.

El display derecho se utiliza para el manejo ergonómico de las funciones de infoentretenimiento y de confort, incorporando la última generación del sistema MBUX, que abre una nueva era en Mercedes me Connectivity. Incluye el control mediante gestos y la posibilidad de detectar quién lo está utilizando para activar determinadas funciones y visualizaciones.

Una característica única de este sistema es su capacidad de aprender gracias a la inteligencia artificial, de forma que MBUX puede personalizarse y adaptarse al usuario. Es potente, accesible, conectado y más intuitivo que nunca, gracias esencialmente al uso del brillante sistema de reconocimiento de voz natural que indudablemente es el mejor del mercado.

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La pantalla táctil del MBUX es sólo un componente del concepto de manejo táctil integral: la combinación de pantalla táctil, panel táctil en la consola central (con tres niveles de sensibilidad) y botones de control táctil en el volante. Hay 8 perfiles de conducción (configurables desde el smartphone e importables entre vehículos) con 15 posibilidades de configuración cada uno.

Está conectado a la nube constantemente e incluso reconoce expresiones comunes, lo que lo convierte en un sistema sensacional. No faltan una interfaz de diseño sencillo y vistoso, un asistente personal capaz de aprender de nuestros gustos y órdenes o una pantalla táctil capacitiva capaz de permitirnos interactuar con ella como la de un smartphone.

Con la nueva generación del sistema MBUX se inicia también una serie de servicios nuevos y mejorados que van más allá, como la posibilidad de compartir tu coche entre particulares o las funciones de navegación basadas en la comunicación Car-to-X (sin embargo, la conectividad con el smartphone no es de serie). También hay pantallas y funciones propias de un PHEV.

Esto hace referencia a la información transmitida de un vehículo a otro sobre circunstancias registradas por los sensores, como una frenada de emergencia o comunicaciones manuales del sistema transmitidas por el conductor como un accidente, lo que abre todo un abanico de posibilidades en materia de coches conectados.

Tampoco faltan la localización del vehículo, la localización de plazas de aparcamiento incluso en la calle y una alerta en caso de que el vehículo haya sido golpeado o remolcado mientras está aparcado. Como veis, un sistema de lo más completo, aunque personalmente tendría un poco de miedo a que mi coche sepa tanto sobre mí y me escuche constantemente.

Los gráficos, la resolución y la fluidez de las pantallas son sensacionales. Es el mejor equipo del mercado, al igual que las cámaras 360º.

Bajo el sistema de infoentretenimiento encontramos cuatro difusores de aire. Esta línea se encuentra junto al trabajado botón de arranque y parada del vehículo. Bajo esta fila nos topamos con una hilera compuesta de diversos botones que nos dan acceso a funciones del climatizador bizona (o trizona de manera opcional), entre otras funciones.

Si continuamos con el orden descendente, en la consola nos toparemos con un hueco portaobjetos con tapa, carga inalámbrica para el smartphone y tomas USB-C. Delante del apoyabrazos fijo delantero se sitúa el renovado Touchpad para el sistema de infoentretenimiento, con algunos botones alrededor, como el selector de modos de conducción.

La conectividad con el smartphone no es de serie (Apple CarPlay, Android Auto…), un auténtico atraso y más con el precio del coche.

Un detalle especial de alto valor son las superficies metalizadas de los interruptores, con pintura de efecto aluminio armonizadas con los colores del habitáculo y en contraste con el acabado de la consola central. Ahora, estas superficies metalizadas también están presentes en el volante, junto a los nuevos controles táctiles (que no son del todo prácticos).

Como llevamos ya tiempo viendo en la marca, la palanca selectora situada tradicionalmente en la consola central se sustituye por una palanca DIRECT SELECT y levas de cambio tras el volante multifunción. De ese modo, la sección horizontal de la consola central ofrece mucho espacio para diversos compartimentos.

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En términos de habitabilidad, las plazas delanteras gozan de un amplio espacio y unos comodísimos asientos en mullido y agarre. Pueden contar con masaje, memoria, función dinámica (hincha los laterales al girar), sistema ENERGIZING, calefacción y ventilación. El paquete de confort térmico permite calentar también los reposabrazos.

Los cinturones delanteros ofrecen regulación en altura.

Los ocupantes de la segunda fila disponen también de asientos de primera. Por su concepción y exclusividad, los asientos, los paneles de las puertas y los mandos no tienen nada que envidiar a los de la parte delantera. Además, también pueden ser calefactados, salvo en el caso de la plaza central. En esta fila también encontramos tomas USB-C para los pasajeros.

El paquete de protección solar añade persianas eléctricas en las ventanillas y en la luna trasera, así como parasoles dobles (todos ellos disponibles también individualmente).

Los amplios asientos traseros de serie están formados por un banco con tres plazas, un apoyabrazos con compartimento y portavasos doble. Cuentan con anclajes ISOFIX para sillas infantiles en las plazas de los extremos y pueden equipar el Paquete de seguridad, que añade airbags laterales y cinturones con airbag en la segunda fila.

Como es habitual en el segmento, aunque está homologado para cinco ocupantes y es el más ancho del segmento, solo cuatro adultos de hasta 1,85 metros de altura viajarán realmente cómodos, pues en la plaza central trasera el prominente túnel de transmisión limita el espacio para los pies, además del mullido algo más duro y la menor altura al techo.

El techo del maletero no está forrado, pero sí ofrece iluminación y algunas sujeciones. El portón es eléctrico y el borde de carga queda a 690 mm del suelo.

Respecto al volumen de carga, el maletero cuenta con solo 370 litros de capacidad a causa de la batería, pudiendo ampliarse al abatir los asientos -60:40-. Es una pérdida notable respecto a los modelos de combustión, contando además con unas formas un tanto peculiares, incómodas para transportar objetos voluminosos. Es de los más pequeños del segmento.

Motorización

Para la Clase E están disponibles un total de cinco motorizaciones gasolina, tres motorizaciones diésel y dos mecánicas hibridas-enchufables, todas ellas con el cambio automático 9G-Tronic de serie, Start/Stop y, en su mayoría, con tracción trasera, aunque algunos modelos se pueden asociar a la tracción total inteligente 4MATIC.

Entre las primeras encontramos el E 200 con cuatro cilindros y 184 CV, el E 300 con el mismo número de cilindros y 258 CV; y el E 450 4MATIC con motor de seis cilindros en línea y 367 CV como alternativas “racionales”. En la radical gama AMG, vemos el E 53 4MATIC+ de seis cilindros en línea de 435 CV y el E 63 S 4MATIC+ V8 de 612 CV.

Respecto a la gama diésel, esta se compone del E 200 d con un motor de cuatro cilindros de nuevo desarrollo y 160 CV, el E 220 d también cuatro en línea con 194 CV (disponible con propulsión o tracción integral 4MATIC), el E 400 d con seis cilindros en línea y 340 CV de potencia. Por último, las dos variantes híbridas-enchufables son los E 300 e con 320 CV y E 300 de con 306 CV.

Se diferencian en el motor de combustión: el primero es gasolina (211 CV) y el segundo diésel (194 CV). Tienen el mismo motor eléctrico de 122 CV (90 kW) y 440 Nm, así como idéntica batería (13,5 kWh / 37 Ah), estando disponibles con tracción trasera o integral 4MATIC. La autonomía 100% eléctrica es de 53 km, en los primeros y de 49 km en los segundos.

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Para la prueba nos hemos decantado por el E 300 e 4MATIC, que combina el motor eléctrico con un bloque de aluminio de cuatro cilindros y 1.991 cm³, dos árboles de levas en la culata, inyección directa, turbo e intercooler. Eroga 211 CV (155 kW) a 5.500 rpm y 350 Nm entre las 1.600 y las 4.000 rpm. La velocidad punta es de 130 km/h en modo 100% eléctrico.

La batería posee 13,5 kWh de capacidad, suficiente para dotarle de 49 kilómetros en modo eléctrico si equipamos la tracción total. Basta con conectar la batería descargada durante 1 hora y 30 minutos en un Wallbox de corriente alterna (CA) y 7,4 kW para recargarla cómodamente hasta la capacidad máxima (2,75 horas en Wallbox de 3,7 kW).

Si se utiliza una toma de corriente doméstica convencional necesita unas 5 horas. El Clase E no dispone de una toma de carga combinada, por lo que no permite utilizar corriente continua, solo alterna. Teniendo en cuenta el tamaño de la batería y que la capacidad máxima de carga es de 7 kW, tampoco parece necesaria esta opción que sí vemos en otros modelos de la marca.

En cifras, el E 300e puede acelerar de 0 a 100 km/h en 5.8 segundos, con un 80 a 120 km/h en 4.0 segundos según nuestras mediciones. Esto hace que encontremos un buen equilibrio entre prestaciones y consumos (con la batería cargada). No es exageradamente enérgico, pero numerosos usuarios encontrarán en esta versión satisfechos sus intereses de potencia.

Por otra parte y, si bien no es una mecánica tan refinada como los motores de seis cilindros del fabricante alemán, puede presumir de una contenida rumorosidad. En líneas generales, se muestra bastante suave y exenta de vibraciones, con una aceleración lineal y progresiva que nos permite salir airosos de la gran mayoría de situaciones comprometidas.

Respecto a los consumos, a la hora de la compra hay que analizar muy bien qué tipo de uso se le va a dar y si realmente vamos a aprovechar bien las bondades de la batería, porque no es precisamente un modelo poco tragón. Para medir los consumos he recorrido 1.000 kilómetros probando diversas combinaciones y las diferencias entre circular con o sin batería son grandes.

Durante una conducción real, es posible hacer consumos de entre 0 y 2 litros en ciudad, pudiendo rodar en vías interurbanas por debajo de los 4 litros si llevamos la batería cargada y los trayectos no son muy largos. En autopista, el consumo fue de 5.5 litros con la batería cargada, aunque seleccionando de modo específico el modo eléctrico en pendientes pronunciadas.

Mercedes-Benz homologa un consumo combinado de apenas 1,7 l/100 km, una cifra irreal.

Con la batería descargada, es fácil rondar e incluso superar los 8.0 litros en viajes largos. Lo mismo ocurre en ciudad, si no recargamos la batería es fácil ver consumos por encima de los 10 litros. La media de consumo del motor eléctrico durante la semana de pruebas fue de 5.1 kWh y del de gasolina de 7.1 l/100 km. El depósito de combustible tiene 50 litros.

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Circulando a 120 km/h, el motor de combustión gira a 1.600 rpm en 9ª velocidad.

También podemos encontrar varios modos de conducción, con un notable salto en reacciones entre ellos y posibilidades de personalización. En los híbridos enchufables con MBUX, los programas de conducción y los modos de funcionamiento híbridos se fusionan en el Dynamic Select, haciéndolo todo más cómodo.

Las opciones posibles son las siguientes:

En cuanto al ya conocido cambio 9G-Tronic, este se muestra tan suave y rápido como en el resto de los modelos de la gama que lo equipan, siendo prácticamente imperceptible. La palanca no tiene un modo secuencial ni posición Sport, pero sí encontramos levas de aceptable tamaño en aluminio tras el volante que cumplen una doble función.

En la mayoría de los modos de conducción, actúan sobre el cambio de marchas de manera tradicional, pero en el modo eléctrico, lo que nos ofrecen son diferentes niveles de regeneración de energía. En esta tabla podéis ver todas las opciones posibles:

Este híbrido enchufable se beneficia de la pegatina CERO de la DGT.

Cabe mencionar que el asistente ECO establece una estrategia de eficiencia y hace recomendaciones de conducción en función del trayecto (curvas, cruces, rotondas, cuesta abajo), las limitaciones de la velocidad y la distancia a los vehículos que circulan delante, actuando de forma autónoma sobre la frenada regenerativa.

Comportamiento

Si bien a nivel estético la Clase E es muy similar a la Clase C y a la Clase S, su comportamiento se acerca mucho más al de la berlina de representación de la marca que al de su hermano pequeño de gama, con un confort de marcha y un rendimiento propios de un segmento superior. Es cómodo, ágil y mucho más maniobrable de lo que parece a priori.

Nada más ponerte al volante del Clase E tienes la sensación de que es mucho más coche de lo que parece, sensación que aumenta a medida que avanzas los primeros kilómetros con él. Con todo y con eso, sus medidas no son excesivas para moverse con soltura en la urbe, ofreciendo gran maniobrabilidad y múltiples asistencias para facilitarnos las cosas en espacios reducidos.

El diámetro de giro entre paredes es de 11.9 metros, es decir, menor que el de sus principales rivales e incluso que el de modelos más cortos.

En carretera goza de gran aplomo, estabilidad y confort, con un filtrado de las irregularidades sobresaliente. Además, se siente especialmente ágil en esta generación gracias al nuevo esquema de suspensión de tipo paralelogramo deformable en ambos ejes. Los componentes de estos están realizados en aluminio para reducir el peso total del conjunto.

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El diseño del eje delantero es de cuatro brazos, mientras que en el eje trasero se monta una construcción multibrazo optimizada de cinco brazos conocida por sus insuperables propiedades de guiado de las ruedas y por una óptima estabilidad direccional. Con el paquete AMG Line, encontramos la suspensión AGILITY CONTROL de altura rebajada en 150 mm.

A pesar de ser más deportiva, ofrece buena comodidad a los pasajeros, con un excelente filtrado de las irregularidades del terreno, aunque aquellos que busquen un plus de confort pueden recurrir al mencionado AIR BODY CONTROL, la suspensión con muelles neumáticos -de Bilstein-. Si vas a hacer largos viajes, puede ser un opcional a tener en cuenta, pero no imprescindible.

Si a esto le añadimos una dirección directa electromecánica con carácter deportivo que combina la servoasistencia variable en función de la velocidad de la dirección paramétrica con una desmultiplicación variable en función del giro del volante, os puedo asegurar que la cosa mejora notablemente en la conducción diaria.

La suspensión de serie tiene resortes helicoidales en el eje delantero y neumáticos en el eje trasero.

Sí, parece un trabalenguas, pero hablamos de una dirección que cumple con su cometido en todos los entornos por asistencia y velocidad de reacción, aunque es cierto que en una conducción más deportiva le penalizan la falta de precisión y la ausencia de información acerca de lo que ocurre en el eje delantero. En este sentido un Serie 5 ofrece mayor complicidad.

Gana puntos en este hábitat gracias a la eficacia y suavidad con la que actúan las ayudas, su contenida altura y la ausencia de balanceos, que garantizan un gran control del vehículo y una notable estabilidad incluso cuando aumentamos el ritmo. El paso por curva es rápido, pero sigo pensando que ha perdido algo de aplomo frente a su predecesor (la anterior generación).

Por otra parte, hay que destacar que el buen comportamiento de esta berlina lo remata la sofisticada tecnología de su chasis, la distribución de pesos y el ahorro de los mismos, lo que se combina con varios modos de conducción para adaptar el Clase E a nuestras apetencias, ya sea en confort, dinamismo o eficiencia. Desde luego es una gran alternativa, aunque yo soy más de diésel…

En conjunto, el Mercedes-Benz Clase E es una de las berlinas de tamaño medio más confortables y satisfactorias que puedes comprar.

A nivel de asistencias a la conducción, el Clase E es uno de los modelos mejor equipados del segmento, con programador de velocidad activo con capacidad para reconocer retenciones o tráfico lento (LiveTraffic), detector de ángulo muerto, asistente activo de la dirección y de distancia, sistema de frenado de emergencia con función de giro… Muchos de ellos se han optimizado con el restyling.

En las versiones híbridas enchufables apenas encontramos diferencias palpables en la conducción, salvo por el silencio al rodar en eléctrico, con una entrada en acción del motor gasolina bien disimulada; y el funcionamiento de los frenos a causa de la frenada regenerativa (equipa discos ventilados en ambos ejes) y el asistente ECO, a veces un poco intrusivo.

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Como ocurre en la mayoría de los vehículos de estas características, el primer tramo del pedal de freno corresponde a la frenada regenerativa, lo que en un vehículo de sus dimensiones y peso hace que necesitemos cierto período de adaptación para calcular adecuadamente la frenada; o por el contrario, para no pasarnos de frenada por la actuación del asistente ECO.

Equipamiento y precio

Todos los Mercedes-Benz Clase E vendidos en España incluyen un amplio equipamiento de seguridad que contempla el ABS, EBD, TCS, ESP, múltiples airbags, alerta de cambio de carril, aviso pre-colisión, asistente para señales de tráfico, frenada automática en ciudad, asistente al arranque en cuestas, detector de fatiga, faros Full LED, luces de carretera automáticas y antinieblas LED.

También forman parte de la dotación de serie en nuestro mercado la cámara de marcha atrás, radio digital, preequipo para Car Sharing privado, servicios de acceso remoto plus, paquete de navegación y preequipo de conectividad, puertos USB en consola central zona trasera, paquete se asientos de confort, sistema carga inalámbrica para smartphone y respaldos asiento trasero abatibles.

Como buen alemán que es, hay disponible un extenso listado de opcionales, además de diversos paquetes de equipamiento y paquetes estéticos para personalizar el exterior, como los paquetes Night y AMG Line, ya conocidos en otros modelos de la gama. También se ofrece de manera opcional el cable para recarga rápida en los híbridos enchufables.

Los precios del Mercedes-Benz Clase E 2021 recomendados para España sin descuentos ni promociones son los siguientes:

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